Capítulo 3 - La mansedumbre que entrelaza el corazón

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Para Saiki Madoka, ese día era el destino.

Llegó a estar cerca de un buen chico que ahora podía decir que era muy importante para ella, un chico que era más joven que ella y, sin embargo, trató desesperadamente de aferrarse a ella...

"...Jaa~♪"

Pensando en lo que acababa de suceder, Madoka dejó escapar un suspiro caliente.

Se estaba haciendo tarde, y Madoka había impedido que Chinatsu regresara a su propia habitación. No es que quisiera que se fuera de todos modos, porque quería abrazarlo para siempre.

A pesar de estar desconcertada por los sentimientos que nunca tuvo por su ex, Madoka concluyó que se trataba de amor verdadero.

"Um... ¡Estaré justo al lado y puedes verme en cualquier momento! ¡También me gustaría venir aquí en cualquier momento si Madoka-san me lo permite!"

"Oh, ¿entonces por qué no te quedas aquí todo el tiempo?"

"Esta bien..."

Divertido, feliz, este tipo de emociones se desbordaban y no paraban.

Le gustaba la expresión de su rostro cuando deseaba que ella viviera, pero era incluso mejor cuando estaba avergonzado, como correspondía a su edad. Ella pensó que era genial y lindo. Madoka ya estaba completamente loca por Chinatsu.

"... Chinatsu-kun... ¡Chinatsu-kun!"

Él estaba allí, al otro lado de la pared frente a ella, y odiaba esta pared, pero sus mejillas se relajaron ante la felicidad de tener a Chinatsu tan cerca.

Como mencionó antes, si Chinatsu quisiera, podría quedarse aquí todo el tiempo. Madoka pensó que sí, pero se contuvo de decirle a Chinatsu lo que quería. Ella pensó que sería una molestia para Chinatsu si lo obligaba a aceptar sus sentimientos, por lo que decidió comenzar a atacar lentamente.

"...Sí, esto es amor. Quiero tanto pensar en la otra persona, quiero que la otra persona piense en mí, quiero buscar y ser buscada... Quiero dedicarme... ¡Ah, entonces esto es amor!".

Madoka se sintió atraída por la falsa amabilidad que exudaba su ex, pero ahora se había convertido en un pasado que quería olvidar. Ahora, ya no quería pensar tanto en su exnovio, porque había definido sus prioridades.

Primero vino Chinatsu. En segundo lugar vino Chinatsu. En tercer lugar llegó Chinatsu. Y el cuarto vino Chinatsu... Este era el orden de prioridad de Madoka.

"Chinatsu-kun... viviré por ti. Me dedicaré a ti por el resto de mi vida... Así que, por favor, no me abandones. Si me abandonas... ni siquiera sé lo que haría."

Madoka quería poner su confianza en algo, quería confiar en alguien, no era diferente a antes. Eso fue lo que pensó Madoka, pero sus sentimientos ahora son completamente diferentes. Solo pensar en Chinatsu aclaró su mente y eliminó cualquier dolor... Es por eso que Madoka solo podía pensar en Chinatsu.

"Chinatsu-kun... Estaba tan emocionada cuando lo sostuve en mi pecho... Estoy tan feliz♪."

Cuando sostuvo a Chinatsu contra su pecho, sus mejillas estaban rojas y estaba realmente avergonzado.

Madoka definitivamente podía ver que él estaba consciente de ella, y se había dado cuenta de que él había estado mirando su pecho cuando habían estado hablando. Pero nunca se sintió incómoda, y ahora finalmente entendía por qué.

"Lo entiendo. Si así es como se suponía que debía ser, entonces no había forma de que pudiera sentirme incómoda con Chinatsu-kun. Qué diablos, he estado deseando a Chinatsu-kun desde entonces sin siquiera saberlo ♪"

Soy amado por una vecina mayor con el corazón roto después de salvarlaWhere stories live. Discover now