Mí Mujer (Vos y Enzo Fernández 💕)

La verdad

/Male/
Me desperté y estaba acostada encima de Enzo mientras el me abrazaba por la cintura.
No me acordaba bien de cómo había llegado ahí, lo me acuerdo de mi hermano pegándole a alguien y que cuando llegamos Enzo me dió una remera suya para que me cambie y nos fuéramos a dormir.
Abrí los ojos y miré el reloj, eran las 10:30 am, cerré los ojos para volver a dormirme cuando sentí que Enzo apretaba su agarre en mi cintura.
-Buen día linda- nunca iba a dejar de sorprenderme y encantarme su voz de recién despierto.
-No es bueno, quiero seguir durmiendo- me quejé.
-Si me despierto con vos encima mío como no va a ser un buen día.
Sentí mi cara ponerse totalmente roja. Miré a Enzo y el se rió de mí.
-¿Que es ese comentario Jeremías? Por favor.
Hundí mi cara en su pecho para ocultar mi vergüenza.
-Eu, nada más soy sincero.
Empezó a acariciar mi espalda.
-Me gusta como te queda mi ropa- dijo jugando con la tela de la remera que tenía puesta -deberias usarla más seguido.
Sonreí.
Volví a quedarme dormida y cuando me desperté estaba sola en la cama.
Miré para todos lados y ví la puerta el baño cerrada, por lo que supuse que Enzo estaba adentro. Me quedé acostada mirando la puerta del baño hasta que el anteriormente nombrado salió por la puerta solo con una toalla en la cadera. No voy a negarlo, mi vista no se apartó de su marcado torso. <Ay Malena controlate> en ese momento escuché la risa de Enzo.
-Me decís a mi por mis comentarios pero ¿Y tus miradas? Desubicada.
Agarró ropa y volvió al baño. Cuando salió tenía una bermuda blanca y una remera básica negra.
<Me gustaba más antes> MALENA mente sucia.
Enzo se sentó al lado mío.
-¿Te duele la cabeza? ¿Tenés resaca? ¿Que te acordás de anoche?
-Me duele un poco la cabeza, no estoy segura de que tenga resaca, me acuerdo de Rodri pegándole a alguien y vos trayendome al hotel. ¿Que pasó?
-¿Te acordás como vinimos hast acá?
Pensé por unos segundos.
-No, pero supongo que en taxi.
Por su cara pasó una expresión de ¿Tristeza? ¿Alivio?
-Ayer en la joda había un chabón que se quiso desubicar con vos y no lo dejamos, por eso tú hermano le pegó.
Me sorprendí un poco.
-Fua, gracias.
-De nada linda.
Enzo se paró de la cama y agarró su celular. Miró la pantalla un poco confundido y después miró el reloj.
-Tu hermano me llamó hace media hora 4 veces.
Me asusté y agarré mi celular. Tenía 7 llamadas perdidas de el.
-La puta madre- Me senté en la cama y lo llamé -¿Hola?... ¿Que pasó?... ¿Y para eso me llamas 7 veces a mi y 4 a Enzo?... Me asustaste pelotudo... Recién me despierto... Bueno, ahí voy... Más te vale que sea importante... Te odio- le corté.
-¿Que pasó?- preguntó Enzo.
-Nada, dice que me tiene que contar algo ahora sí o sí y que está abajo esperándome.
Me paré.
-Parece que es importante así que bajo ahora, en un toque subo- agarré una colita para el pelo y me hice un rodete despeinado -despues te cuento el chisme.
Ví como Enzo se acercaba para darme un beso y me alejé un poco, me miró mal.
-No me lavé los dientes.
-¿Crees que me importa?
Me reí y le dí un beso.
-Que Rodrigo se banque mi mal aliento.
Estaba por abrir la puerta y me di vuelta.
-¿Hoy a la tarde vamos a pasear?
-¿Es una cita?- preguntó sonriendo.
-Tomalo cómo quieras chiquito lindo- le guiñé un ojo y salí de la pieza.
Fuí hasta el ascensor sonriendo como una tonta, bajé y me dirigí al restaurante. En el momento en que ví a Rodri sentado en una mesa lo recordé <tengo puesta una remera y una bermuda de Enzo> estaba a punto de darme vuelta para volver al ascensor pero en ese momento me vio y me saludó con la mano. Entré en pánico <tal vez si disimulo no lo nota> le sonreí y fuí a la mesa. Me senté y el me miró.
-¿Ni siquiera te lavaste la cara Malena?
-Me apuraste, pensé que era tan urgente como para salir de la cama así nomás.
-Bueno, si es importante, no sé si urgente.
-Hablá.
Quería que fuera rápido, quería estar el menor tiempo posible ahí, tal vez no se daría cuenta de la ropa si me iba rápido.
-Bueno, viste que vos y yo somos hermanos y los hermanos...- se calló unos segundos -los hermanos se cuentan las cosas.
Lo miré confundida.
-Si- dije no muy segura.
-A mi no me gusta esconderte cosas, y menos si lo que te escondo es mi felicidad.
-¿A qué va todo esto?
Estaba tan preocupada por la ropa que no podía intentar adivinar nada.
-Somos hermanos, vos me querés ver feliz a mi y yo a vos ¿No?
-Si Ro ¿Podés decir lo que querés decir de una vez?
-Yo... Soy feliz...- no completó la frase, tampoco siguió hablando.
-Me alegro- dije más confundida que antes.
-Soy feliz porque... Yo... Estoy como... Se podría decir que yo...
-DALE HERMANO HABLÁ- me desesperé.
-ESTOY SALIENDO CON TINI- soltó.
Lo miré sorprendida. Pero sorprendida por lo mucho que le costó decir algo tan simple como eso.
-¿Y tanto te costaba decir eso?
-¿No te molesta?- preguntó confundido.
-No boludo, estoy re feliz por ustedes- sonreí.
-Gracias Male, viste, siempre hay que decir la verdad sin miedo. Cómo decía mamá "si lo ocultas es porque no te importa" y a mi me importan vos y Tini.
<Enzo> fue lo único que vino a mi cabeza. El me importa, y lo estoy escondiendo. Si Rodrigo sale con mi amiga ¿Por qué yo no puedo salir con su amigo?
Lo miré, estaba a punto de decir que me gustaba Enzo, pero algo me hizo no hablar, ese algo fueron mis pensamientos <¿Y si a vos te gusta Enzo pero a Enzo no le gustas vos? Primero deberías hablar con el, después con Rodri> mi cabeza tenía razón. Así que me limité a sonreír.
-Si, mamá siempre tenía razón.
Rodri se paró y caminó hasta mí, yo hice lo mismo y el me abrazó.
<Que no se de cuenta por favor>
-Bueno, yo tengo que volver a la pieza, ni los dientes me lavé- dije riendo.
Me alejé de él y di un par de pasos en dirección al ascensor, cuando me llamó.
-Male.
Me di vuelta.
-¿Que tenés puesto?
<LA PUTA QUE ME PARIÓ perdón mami>
En ese momento alguien abrazó a mi hermano por atrás y el se dió vuelta, era Tini, me miró y me guiñó un ojo <la amo> mi hermano se distrajo con ella y yo me fuí al ascensor.
-Eso estuvo cerca- murmuré mientras el ascensor me llevaba al piso de mi habitación.
Cuando entré lo ví a Enzo en la cama moviendo la pierna rápidamente.
-¿Que te pasa?- le pregunté.
-FUISTE A VER A TU HERMANO CON MI ROPA- se paró al instante que me escuchó hablar.
-Si, me di cuenta abajo recién, pero no dijo nada, no se dió cuenta.
Suspiró.
-¿Y que te quería decir?
Lo miré y caminé hasta donde estaba.
-Tenemos que hablar.