Programa de intercambio (Hermione Y Tú)

Capítulo 31

-¿Todo lo has hecho tú?

-No, el árbol de limón y aguacate los sembró mi abuela, ella siempre dice "los limones y los aguacates jamás deben faltar" y pues- señalé ambos árboles- también varias plantas ella me ayudó a cultivarlas, antes era todo más grande pero era espacio que no necesitaba así que lo redujeron

-Es asombroso, ahora entiendo porque eres tan buena en herbología

-Por eso y porque soy genial en todo

-Tonta- me dió un golpe suave en el estómago

-Pues te tengo noticias, esta tonta te gusta- tomé su mano con la que me había golpeado y la acerque hacia mi- y también a esta tonta le gustas mucho- lo dije en un tono suave por la cercanía y cerré la poca distancia que había entre nuestros labios, habían pasado varios minutos y seguíamos besándonos hasta que a cierto perro se le ocurrió interrumpir- ¿Es enserio? Vuelves a hacer eso y te llevaré a qué te castren

-No seas mala, tal vez solo quiere algo. Es una ternurita, no puedes regañarlo

-Envidioso es lo que es, solo porque la cara de sapo me prohibió sacarlo está así

-Pobrecito- el perro se estaba haciendo el sufrido mientras Hermione lo acariciaba- ¿Te quedarás a dormir?

-Solo hay una cama, no quiero molestar

-No molestas y ahí adentro tienes una, pero si quieres podemos compartir la mía- la vez anterior pude escaparme con una buena excusa pero está vez sería imposible, no era que no quisiera dormir junto a ella, es solo que me ponía muy nerviosa solo pensarlo

-Esta bien...¿Puede ser en tu cama? La de ahí no es muy cómoda- si lo es, es Jodidamente cómoda pero como había mencionado, no he vuelto a dormir ahí desde la muerte de mi madre y no era algo de lo que aún podía hablar con Hermione

-Seguro, iré arriba y dejaré que te pongas el pijama- me dió un beso rápido antes de irse. Con un hechizo puse a lavar lo que había usado para cocinar, caminé hasta la cama y abrí unos gabinetes que están debajo, al no haber mucho espacio había instalado unos gabinetes bajo la cama donde tenía un poco de ropa...uno nunca sabe cuándo puede necesitarlo. Ya me había vestido pero no sabía si debía subir o esperar hasta que Hermione me hablara

-¿No subes?

-Si, voy- me levanté rápido para subir, al salir cerré la maleta con un hechizo. Por seguridad el hechizo desaparecía luego de un tiempo para que cualquiera pudiera entrar y sacar a Capitán y a sunshine si algo me pasaba- lindas trenzas

-No mientas, las tengo que hacer para dormír o mi cabello en la mañana será un desastre

-No miento, te ves hermosa... siempre te ves hermosa- se estaba sonrojado, caminé hacia ella y la besé- me iré a lavar los dientes, ya vuelvo - hice lo que dije y al regresar Hermione ya estaba acostada así que ocupé el lado que había dejado vacío, mis nervios regresaron al sentirla tan cerca de mi

-¿Que pasa?

-Nada- ella se giró y yo seguía viendo el techo

-Parece que si pasa algo

-¿Si te lo digo no te reiras?

-No lo haré, cuéntame

-Estoy nerviosa...no me gusta dormir junto a nadie. Me gusta tener toda la cama para mí...pero me agrada estar aquí contigo y mi mente a entrado en conflicto por eso- giré mi cabeza para verla y estaba sonriendo- dijiste que no te ibas a reír

-No me estoy riendo, eres tan adorable, nunca había visto a ningún slytherin ser adorable- me giré y oculte mi cara en la almohada- me gustas, me gustas mucho

-Tú también me gustas- hablé aún con la cara contra la almohada

-Vamos a dormir, así que deja de esconderte

-No me estoy escondiendo, así duermo

-Si claro, muy creíble

-De verdad, duermo así- seguía con la espalda hacia el techo pero giré la cabeza y poder ver a Hermione- es cómodo- le sonreí

-jajajajaja bien- se acercó a mi y me dió un beso rápido- descansa

-Descansa- restregue mi rostro en la almohada encontrando una posición cómoda, escuché a Hermione soltar una leve risita - eres cruel

-Y tú una ternura

-Claro que no, soy un ser de maldad

-Buenas noches ser de maldad, duérmete que mañana tenemos clases

-Bien bien, buenas noches - fué lo último que escuché antes de quedarme dormida con el inconfundible aroma del perfume de Hermione

*              *            *

Hace varios minutos me había despertado, siempre era a la misma hora por la costumbre de ir a correr pero esta vez no había podido, ¿La razón? Hermione estaba abrazada a mi como si su vida dependiera de ello y no tenía el corazón para despertarla, se veía preciosa incluso dormida. De pronto se empezó a mover, lo que significaba que estaba por despertar y no me equivoqué ¡Merlin! Su cara de recién despertada, agradezco a quien quiera que sea por lo que mis ojos están viendo

-Buen día- ¡Oh joder! Su voz era aún mejor, bendito sean mis oidos al poder escucharla

-Buen día

-Creí que estarías corriendo a esta hora

-Si, lo intente pero alguien no me soltaba- cuando se dió cuenta que su brazo estaba sobre mi estómago y su pierna sobre las mías se puso muy roja

-Lo lamento- intentó separarse pero se lo impedí

-No lo lamentas, y la verdad, yo tampoco

-¿Que horas son?- miro hacia el reloj - ya es tarde, tenemos clases

-5 minutos más

-No, tenemos clases de pociones y no quiero llegar tarde, además no hemos desayunado

-Bien- estaba por levantarme y ella se acercó para besarme pero me aparté - no, tengo que lavarme los dientes primero

-No me importa

-A mí si- bese su frente y caminé hacia el baño- pido primero- cerré la puerta y me lavé los dientes mientras me bañaba para ahorrar tiempo. Al salir intenté besar a Hermione pero ella se movió

-Si yo no puedo, tú tampoco hasta que también me haya cepillado- entró al baño con una sonrisa

-Bien jugado, Granger, bien jugado