Tregua Navideña [ Demonios y Humanos ]

VIII

—Genya, no sabía que te salían colmillos a la hora de comer, que impresión —Le dice Muichirou sin dejar de observarlo.

—Oh, no es nada de que preocuparse, me ayuda a comer más rápido.

Himejima escucha eso y voltea su rostro hacia ambos.

—De todas formas no va a pasar nada por mis colmillos así que no hay de que preocuparse —Sonríe

Sanemi opta por no decirle nada a Genya y se levanta de su asiento para hacer que todos lo escucharan  —Con respecto al sorteo que Kamado piensa hacer ¿Quién va a ir a comprar los regalos a esta hora si hacemos eso? —Dice con un poco de molestia —Seria mejor hacerlo mañana.

—Pero así ya no se sentiría este día, vamos —Tanjiro se levanta de igual manera —sólo que cada uno tome un papel y dé lo que tenga —Responde mientras toma la vasija y coge un papel que hay dentro. Grande es su sorpresa al ver que el papel estaba mojado y no se veía nada. —Un momento ¿La vasija tenía agua?

—Ay perdón, ¿la querías vacía? —Pregunta Gyokko algo avegoznado. Se había olvidado por completo de ese pequeño detalle cosa que ocasiona que todos rían por eso. Tanjiro niega con la cabeza en parte de burla.

—Bueno, ahora déjenme pensar en qué podemos hacer —Habla calmado y se vuelve a sentar. En un instante llegan varios vasos llenos de chocolate caliente juntos a un gran pedazo de panetón los cuáles son colocados a un lado de la persona.

—¡Esperaba este momento! —Dice Douma emitiendo un gran brillo en sus ojos —¡Al fin llego mi comida favorita!

—Que no es comida idiota.

—No me importa —Le responde sacándole la lengua y agarra su vaso para darle un gran sorbo a su chocolate. Luego de eso observa al peli rosa con burla y al instante saca su lengua empezando a hacer aire con sus manos al rededor —¿¡Porqué no me dijeron que quemaba?!

—Estaba saliendo humo del vaso ¿No era obvio? —Shinobu ríe junto a Akaza, Kyojuro y Giyuu.

—A mi siempre me pasaba eso de pequeño, me quemaba la boca por estar desesperado —Habla Giyuu.

—Recuerdo que yo también hacía eso, pero ahora sólo tengo problemas con el panetón y esas frutas que hay dentro —Kyojuro se une a la conversación —No sé porque no me gustan, especialmente las pasas

—Son muy raras ¿No? Recuerdo que un día pensé que eran cucarachas y que Douma me las había metido como una de sus estúpidas bromas.

—¡Recuerdo ese día! ¡Gritaste como una nena!

—Cállate ya.

—Yo sólo cómo las frutas —Dice Shinobu —No son tan malas a comparación de las pasas.

—Para mí ambas son ricas —Dice Giyuu en voz baja.

—¿¡Eh?!

—Pero Giyuu, ¿cómo puedes soportarlo?

—No sé.

—¿Seguro que no eres un demonio? —Le dice Douma.

—O tal vez quieres ser uno —Akaza lo mira con una sonrisa—Giyuu, cambiate a-

—No gracias, estoy bien así.

—ª

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—Inosuke te estás comiendo el papel del panetón.

—¡Calla Toritzu! ¡Yo sé lo que como y no!