cap 12. ¡un pájaro enorme!

21 1 0
                                    

No puedo evitar gritar cuando mi vida está en riesgo, pero pronto escucho movimiento y abro mis ojos para darme cuenta de que Zeus está frente a mi, recibiendo el golpe por mi. ¡No puedo creerlo!

¿Cuando llegó?, Lo miro atónita viendo su espalda y pronto lo veo toser e imagino que fue duro el golpe, Zeus se repone enseguida para atacarlo y usar una espada que sacó de repente de su mano, la encaja en el pájaro haciendo que emita un sonido de dolor. Abro mi boca sorprendida por ver esa acción tan irreal, tanto como cuando lo ví pelear con esa bestia. Él pájaro enorme empieza a desaparecer, haciéndose polvo.

- ¿Qué fue eso? - preguntó Afrodita y me doy cuenta que estaba observando la escena igual que yo, igual que Hans. Zeus baja hacia nosotros, tocando el suelo y parece desequilibrado - ¿Nunca había visto algo tan fuerte?, ¿Cómo es eso posible?

- es verdad, ¡Ni siquiera nosotras pudimos con ese pájaro! - protesto Hans, realmente confundido

Zeus se repone enseguida para portar su cara de seriedad y voltear a verme, se acerca a mi para ayudarme a ponerme de pie. Noto que está un poco herido, no puedo evitar mirarlo enternecida porque él siempre me salva, se acerca a mi un poco más con confusión.

Me mira detenidamente y yo no sé qué me pasa pero sus ojos negros me parecen muy bellos de repente, no puedo dejar de verlo y no entiendo que me pasa. Él toca mi frente con su mano, verificando que esté bien y entonces él aleja su mano para verme también.

Zeus me ayuda a ponerme en pie de pronto, para alejarse de mi enseguida como si entendiera lo que pasa, reaccionó molesta al darme cuenta. ¡No debo caer en sus encantos!, ¡Zeus ya me advirtió!. Gruño molesta en mis pensamientos

- ayuden a Holly a volver a su habitación - les pide a ambos justo cuando viene Sonia hacia nosotros - lleva a Holly a su habitación y no dejes que salga, Sonia - le pide a ella quién asiente enseguida pero no me muevo hasta obtener respuestas

- ¿Me vas a decir que fue eso?, ¿Por qué siempre parece que están dispuestos a atacarme?, Ya van tres veces con este - hablé molesta

- porque ahora eres una debilidad para mí, por el bebé y lo que quieren es destruirme para poder gobernar - informó cuando pensé que no lo haría

- ¿Y si lo logran? - pregunté con miedo y Zeus niega para tomar mi mano con gentileza, y otra vez esa culpa en su mirada aparece

- no lo harán, yo los protegeré - me asegura y sonrío porque algo dentro de mi se emociona, creyendo que es real

- tiene razón, nosotros también lo haremos aunque ese pájaro fue demasiado fuerte - indicó Afrodita

- ¿Y quién es esa persona que quiere acabar contigo? - pregunté y Zeus me mira nuevamente

- es una bruja que antes era Diosa pero ella quería gobernar y se volvió mala. Ahora envía a su ejército para atacarme - explicó y asentí con la cabeza - iré a investigar un poco, por favor ve a descansar. Iré pronto a verte al igual que el doctor - Zeus se va junto con Afrodita y Hans detrás

Dejo de mirar para seguir a Sonia quien me acompaña a mi habitación.

Tomo asiento en el pequeño sofá gris, pero muy cómodo apenas llegando, me siento agotada con tantas emociones.

- le traeré un té para que se relaje, señorita - me dice Sonia y asiento sin ganas de pronunciar palabras

Cierro los ojos un momento pensando en lo que sucedió momentos atrás, ¿Debo preocuparme por estar involucrada?.

- aquí tiene, intenté relajarse o podría afectar al bebé - me pide Sonia, con preocupación y sonrío al ver que realmente lo está. Entonces tocó mi vientre al no darme cuenta del bebé, (espero que no hayas sufrido por ese susto, yo lo hice un poco). Pienso mientras me toco y veo que aún no crece

Me preguntó si el crecimiento del bebé será igual que con los mortales.

- gracias, Sonia - le agradezco para tomar él té con mis manos temblorosas, intentando relajarme, dejo la cucharita a un lado para beber con lentitud, con cuidado de no quemarme - ¿Siempre pasa eso?

- hace mucho no sucedían tragedias y menos aquí, suelen ocurrir más fuera del palacio - explicó Sonia de pie frente a mi

- ¡Vaya!, Voy a hacer todo un escándalo - expresé en voz baja, dejo la taza de té en la mesita, para mirar a la nada pensativa, mordiendo mi dedo como concentración

- ¿Todo bien? - preguntó Sonia y dejo de morder mi pobre dedo para mirar a Sonia

- me siento mal, Zeus salva mi vida una y otra vez aunque él es el causante de todo esto, pero aún así le debo una - dije lo que me tenía pensativa y ella asiente

- Entonces porque no le da un regalo - arrugo mi frente confundida - no digo algo costoso pero si algo, que usted pueda elaborar con sus propias manos como un postre

- ¿Tu crees? - pregunté con emoción y ella sonríe - pero seguro no le gustará

- claro que sí, a todo el mundo le encanta y sobre todo a su majestad el dios del cielo, porque vendrá de usted - asegura para animarme

- pero yo no sé hacer postres, muy apenas si sé preparar una avena sin quemarla, corrección, si la quemó - dije frustrada y ella niega

- yo le ayudo, soy muy buena haciendo y enseñando, seguro que le sale delicioso - se ofrece y me pongo de pie emocionada por la idea

- ¿De verdad?, Muchas gracias Sonia y ya te dije, llámame Holly - le pido y ella sonríe apenada - ¡Vamos!

- primero debemos esperar al doctor - me recuerda y asiento resignada para esperar, tomo de mi té nuevamente cuando la puerta se abre dejando ver a Zeus quién entra acompañado del doctor que lleva un maletín

- pasé, por aquí doctor - le pide y él hace lo que le pide en silencio. Zeus voltea a mi cruzándome con sus ojos oscuros - él doctor te revisara, sólo es para asegurarse que él bebé este bien - explicó Zeus y asiento mirando con un poco de miedo al doctor

- tome asiento señorita - me pide con suma amabilidad, así que lo hago sentándome al borde de la cama. Él señor viene a mi y lo miro pensando que esto cada vez se hace más real, ¡Seré una madre soltera!, ¡Una madre joven!. Mis pensamientos son interrumpidos por el doctor - ¿Me permite? - preguntó y asiento cuando él sostiene mi muñeca y siente mi pulso, arrugó mi frente confundida porque no sabía que los dioses revisaban así, él deja mi pulso para tocar mi vientre con su mano y respiro hondo para relajarme, tengo miedo de que por mi culpa muera o pase algo y todo por un momento de debilidad, ¡Nunca debí tomar!, Pienso arrepentida.

Mis ojos van a los de Zeus quién me mira tranquilizador, como diciendo con la mirada que confíe en él y que todo estará bien. Así que eso hago porque funciona.

- todo está en orden - dice el doctor que se aleja de mi, viendo a Zeus - él bebé crece sano y fuerte, sólo debe comer más saludable y no deprimirse tanto ya que podría afectar al bebé - informó y lo miro en sorpresa, con sólo tocar mi estómago y mi pulso pudo saber todo eso, hasta incluso que estoy deprimida - él helado es un buen remedio para la depresión, señorita - me aconseja guiñando el ojo y sonrío

- gracias, muy amable doctor - le agradezco y él se despide para salir del cuarto

- yo.. los dejo solos - dijo Sonia enseguida, saliendo del cuarto y entonces sólo quedamos Zeus y yo, en este incómodo silencio

- tranquila, todo va a estar bien - me pide acercándose a mi, poniéndose de rodillas frente a mi para tomar mi rostro con su mano - Yo sé que estás asustada y preocupada por la última vez que pasó, no te culpo de nada - su caricia en mi mejilla y sus dulces palabras me hacen sentir bien, me hacen creer que estoy en un sueño

- tú mamá no me acepta, ¿seguro que estaré bien? - pregunté

- estarás bien, ella no te hará nada sabiendo que tienes un hijo mío y no es tan mala una vez que la conoces - asegura y sonrío para asentir y ver su rostro a unos pocos centímetros lejos de mi, siento como si quisiera acortar la distancia pero sé que no me lo permitirá

- entonces confiaré en ti - le digo y él sonríe dónde otra vez noto ese brillo en sus ojos, como un safiro.

Mi mundo eres tú Donde viven las historias. Descúbrelo ahora