«REYES O DIOSES, LA LINEA ES DEMASIADO FINA»
Luego de la destrucción completa de la Tierra, Lyanna y su pueblo viajaron por 125 años a través de las estrellas en sueño criogénico despertando con el regalo de una nueva oportunidad. Un lugar donde pue...
Aqui otro cap como el otro tuvo muchos comentarios
"No nos hemos presentado; soy Isabelle Lightbourne."
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Fuego y sangre
Las palabras resonaban en su mente una y otra vez, el chip o en realidad el Huevo estaba oculto ahora como su abuela le había enseñado. Ahora se hallaba en un laberinto de pasillos que reconoció como la primera planta de la Torre de Polis. Al frente de ella estaba el ascensor y en las paredes habían una serie de puertas diferentes que no recordaba que estuvieran ahí, como si su mente las hubiera puesto. Estaba exactamente igual que la última vez que había estado allí, su hogar, su palacio, donde quería que Rhaegar se criara, donde quería vivir con su familia, lo raro si, era que no había ventanas, pero de cierta forma parecía que fuera de día puesto que estaba bien iluminado. Caminó por el pasillo preguntándose que puerta tendría que abrir para enfrentar a su usurpadora. Una le llamó la atención porque era diferente de la otras, era de color verde pálido y de madera con detalles dorados elegantes y tenía un signo que decía "No Molestar". Curiosa por nunca haber visto esa puerta antes tomo el pomo y la abrió un poco. Una brillante luz la hizo retroceder y casi caer de espaldas.
— ¡Lyanna Valjean! ¡Dios, como he querido conocerte!— una chica apareció en la esquina doblando, el cabello dorado lo tenía en ondas y traía coloridas ropas; amarillas y naranjas, al contrario de Lyanna que ahora tenía la apariencia que tenía en el presente, antes de que la trataran de matar —. No nos hemos presentado; soy Isabelle Lightbourne.
— Eres tú— Lyanna frunció el ceño.
— La misma.— ella hizo una reverencia con burla.
— Entonces tú eres la hermana de Josephine, la que te dio mi cuerpo— la joven reina recordó—. Como tu padre te dio el cuerpo de mi mejor amiga.
— Sip. Aun que debo admitir que han pasado varios años desde que falló el borrado de conciencia— la chica vio a su alrededor a la serie de puertas y luego vio hacia el techo, rio como si la otra fuera un chiste—. Dios santo tu espacio mental si que es un caos.
Lyanna se fijo mejor en el techo y vio que en este también habían puertas, además las puertas en las paredes cambiaban de lugar a veces, y las murallas se agrietaban antes de aparecer lisa d de nuevo, una puerta desaparecía y luego aparecía otra distinta en su lugar. Luego cualquier luz que había se fue y ahora parecía que fuera de noche, algunas antorchas que no habían antes se iluminaron a su alrededor.
— El cerebro lo crea cuando dos mentes comparten un cuerpo— Isabelle explicó viendo alrededor las puertas cambiantes—. Como un sueño lucido, se trata de mantener las mentes separadas y el cuerpo no muera. Pero al abrir esa puerta nos dejaste aun peor, y duele bastante así que gracias, reina homicida.
— ¿Ya te ha pasado esto?— Lyanna preguntó curiosa.
— Si, pero debo decir que tu mente es la peor que he visto. Y esto— la apuntó a ella—. Es un problema. ¿Asi que por que mejor no me dices como estas viva y nos ahorramos el deterioro mental?
