Una nueva diosa en el Olimpo

Dejamos los problemas para encontrar más problemas

Después de mi pequeña reunión con el Olimpo, cuando dormía (odio cuando pasa eso) me despertó Jason gritando a media noche.
Eso fue mi culpa, por seguridad deje una pequeña trampita a mitad del pasadizo de la casa, solo por seguridad.
Me levanté corriendo y salí del cuarto, gracias a los dioses el grito de Jason solo despertó a Percy, Anabeth y Piper. Los demás estaban durmiendo de lo más tranquilo.
-¡Aria! Tú tienes que ver con esto-me dice Jason mostrando sus manos de color azul
Al menos no se topó con la otra trampa que puse, eso hubiera sido más divertida, cabello morado (ya sé que no son las mejores bromas, pero que puedo hacer, yo no soy experta)
Todos nos empezamos a reír
-¿Qué te pasó, Grace?-dice Percy aguantando la risa
-Ni una palabra, Jackson... ¿Por qué has puesto esto?
-Por seguridad...-digo
Piper le ayuda a levantarse
-¿Se quita esta pintura?-me pregunta
-Bueno, quitarse, sí, solo si te lavas las manos con agua de mar.. ¿Y a dónde te ibas?
-Solo quería conversar con Piper...
Miro a Piper
-No me mires a mí, yo estaba durmiendo, si quieres pregúntale a Anabeth.
-Así que estabas despierta...- le pregunto
-Estaba leyendo el libro-se excusa
-Ya chicos, mañana tenemos que llevar a Sydney y a Maya, así que a dormir...-dice Percy
Todos se retiran, pero detengo a Jason
-Contigo quería hablar...
-Soy inocente-dice levantando las manos, luego se da cuenta que siguen azules y las oculta
-¿Qué pasa con Nico?
-¿Por qué?
-Es que lo vi un poco disgustado cuando le dije que tenía que compartir cuarto con Percy y contigo. ¿Tiene algo que ver con Percy, verdad?
-Sí, pero no te lo puedo decir, se lo prometí.
-Está bien, bueno hasta mañana-le digo y regreso al cuarto.
Me acuesto y concilio el sueño rápidamente
Creía que mi pequeña junta con los Olímpicos era todo de dioses por esta noche, tengo muy mala suerte, pues no fue así.
Esta vez fue con una de mis ¿tías?, como sea que ella venga a ser, menos favoritas.
-Hola querida-me dice Afrodita
-Hola-digo entre dientes
-El amor es algo que no se puede evitar...-comienza a decir pero yo la interrumpo
-¡¿Por qué te tienes que meter en la vida amorosa de todos?!
-Cálmate sobrina, ¿vienes a ser mi sobrina?, yo no soy la culpable, fue mi hijo Eros.
-Es casi igual-reclamo
-Por eso venía a disculparme
-¿¡Disculparte!?
-Sí, todos conocemos a Apolo, será el dios de la música y todo eso bla bla bla, pero no es muy romántico que digamos, así que mi hijo le dio un empujoncito para que confiese todo el amor que siente por ti.
-Sabes que después de esto Apolo te va a odiar aún más-digo
-Ya sé, pero el amor lo merece, y bueno, no salió como nos lo esperamos... ¿Podrías darle una segunda oportunidad?
Entro en estado de shock
Afrodita me mira con dulzura
-Está bien- digo rindiéndome- siempre y cuando que tú ni Eros se metan en nuestros asuntos.
-Eso es imposible-suspira- lo haremos.
-Júralo por el río Estigio
-No confías en...-le doy una mirada de porfavornosoytonta-¡Lo juro por el río Estigio!
Wow, Afrodita jurando no meterse en asuntos románticos, no me lo esperaba
-Y si eso es todo, quisiera dormir en paz.-digo
-Sabes que no duermes-me contradice
-¿Descansar al menos?
-Está bien, suerte con lo de mañana...
-¿Zeus ya se entero?-le pregunto
-¡Sí y fue una discusión épica!-dice fascinada
-Te pareces más a Ares...
-Aria querida, sabes que el amor se relaciona con la guerra y como siempre digo del odio al amor hay un paso.
Y con eso desaparece, y por fin puedo descansar.
(...)
Cuando me levanto, Sydney ya estaba despierta y tratando de levantar a Maya, bajo y las chicas ya estaban tomando desayuno (si a las sobras del almuerzo de le puede llamar desayuno)
Una vez que todos estuvimos listos, me concentré para ubicar donde estaba Ronald (así se llama mi protegido, yo no escogí el nombre) estaba con su esposa en un restaurante cerca de la casa donde estábamos.
Lo que íbamos a hacer solo era momentáneo hasta que los dioses nos dijeran que las podemos llevar al campamento.
Así que marchamos hasta ese lugar, un grupo de siete adolescentes no llama mucho la atención por estos lares.
Llegamos al restaurante, y allí estaba, Ronald y su esposa, me acerqué esperando que me reconociera
-Hola Ronald
-No puede ser-murmura
-Hola cariño, ¿cómo te llamas?-me pregunta su esposa
-Amor, ellas es sobre la que te estado diciendo
-Pero no es que ella es una...-empezó a decir su esposa pero Ronald la interrumpió
-Es un honor conocerla, ¿qué le trae por aquí?
Volteo y miro a Jason y Percy riéndose, estos chicos me la van a pagar, luego, muy caro.
-Es un encargo directamente de los superiores, se habrán enterado que ayer hubo un accidente..
-Sin sobrevivientes, una pena-dice Ronald
-No, hubo dos sobrevivientes, las rescatamos, pero se han quedado huérfanas
-Pobres chicas, ¿quiénes son?-dice su esposa
Hago una seña con mi mano para que los chicos se acerquen
-Hola me llamo Sydney, tengo 14 años, y ella es Maya solo tiene tres.
-Esto solo va a ser temporal hasta que nos den otras órdenes-empiezo a decir pero su esposa me interrumpe
-Hay que ternuras, si solo es temporal, por mí no hay problema, ¿qué dices amor?
-Ya, solo temporal, ¿pero son, ya sabes, eso?
-Sí, no creo que les den muchos problemas a demás los tipos malos ya no rondan mucho por estos tiempos...
-Entonces nos vamos a quedar con ustedes, ¿los podemos llamar papás?-pregunta Sydney
-Mamá-dice Maya con su tierna vocecita
-Qué ricura de niña, bueno hoy mismo nos vamos así que nos tiene que acompañar para tomar el avión...-empieza a decir su esposa
-¡No!-grita Percy
-¿Por qué?-dice Ronald
-No, no es nada, si pueden ir por avión-digo
-Pero...-dice Percy
Anabeth lo codea
-¿Antes me puedo despedir de mis amigos?-pregunta Sydney
Ronald asiente
Nos reunimos a un lado
-Gracias, chicos, por todo; lamento haberlos llamado locos-dice Sydney
-Lo mismo pasó con Aria-dice Jason y Piper lo codea- y con otros semidioses que recién se dan cuenta de la verdad.
-Al menos sé que no estoy sola, tengo el más grande semidiós de esta generación-dice mirando a Percy-y a una gran diosa que quiere cambiar las reglas de los dioses como hermanos, y a grandes personas como amigos.-concluye Sydney
-Qué dulce eres...-dice Piper
-Te vamos a extrañar-dice Anabeth - aunque solo nos hayamos conocido por un día, parece más tiempo.
Nos abrazamos
Luego Sydney y Maya se van con sus nuevos tutores temporales
-¿Cómo que el más grande semidiós de esta generación?-se queja Jason
-Acéptalo, por una buena vez, Grace.
Nico rueda los ojos
Jason iba a hablar pero Anabeth los detiene
-Si vuelven a pelear, yo mismo le pido a Aria que les de un castigo peor que las manos azules de Jason
-Hablando de mis manos, ¿cómo me las quito?
-Agua de mar ya te dije
-No creo que Jason soporte estar en contacto con agua-dice Nico
Nos empezamos a reír, todos claro menos Jason
(...)
Y por eso nos dirigimos nuevamente a la playa, Jason se lavó las manos mientras que Percy nadó un poco.
Nos quedamos en la playa hasta que Nico se despidió
-Pero puedes venir con nosotros al campamento-dice Piper
-No, pero gracias, esta vez voy a ir al campamento Júpiter para hablar con mi hermana.
-Igual sabes que el campamento Mestizo tiene las puertas abiertas-dice Anabeth
-Sí lo sé, hasta otra chicos
Y con eso Nico realiza un viaje por las sombras. (No sé de donde encontró sombras, pues todavía está claro)
-¿Cómo regresamos al campamento?-pregunta Percy
Se me ocurre una idea
-¡No, ese taxi, no! Igual no vamos a caber, somos cinco-se queja Percy
-Sabes muy bien que ese "taxi" solo va por Nueva York y sus alrededores-dice Anabeth
-Si no es eso, ¿qué es?-pregunta Jason
-Tu transporte favorito-digo-solo revisa en tu bolsillo
Jason busca en su bolsillo y saca cinco boletos de avión, se los da a Anabeth y se pone a bailar
-Esto es peor que el taxi-se queja Percy
-¿El aeropuerto esta cerca?-pregunta Piper
Tomamos un taxi hasta el aeropuerto, los boletos fueron regalo de Zeus, creo que por fin se compadeció de su hijo.
Solo nos dio el tiempo exacto para llegar y abordar el avión
(...)
El viaje no fue muy largo, pero lo que sí fue que llegamos de noche.
Al bajar del avión, Percy gritó "¡Amo la tierra!"
-Es muy tarde y peligroso para ir al campamento-dijo Jason
-Podemos quedarnos en casa de Percy-sugiere Anabeth
-O pedir el taxi-digo tratando de molestar a Percy
Logro mi acometido
-Vamos a mi casa-se apresura a decir
Pedimos un taxi normal para que nos lleve hasta la casa de Percy, y todo el trayecto Piper dice una y otra vez que está emocionada por conocer a la mamá de Percy. Le pagué al chofer lo correspondiente, creo que no notó nada raro que cinco adolescentes pidieran sus servicios, del aeropuerto a una casa.
Percy tocó la puerta, una mujer nos abrió, quien pienso que debe ser su madre ya que se parecen (soy la diosa de lo obvio, sarcásticamente)
-Percy, que alegría verte de nuevo-dice su madre abrazándolo.
Percy se separa un poco del abrazo de su madre
-Mamá, ellos son mis amigos, ya conoces a Anabeth
-Como no voy a conocerla si desde que la conociste no parado de hablarme de ella
-¡Mamá!-reclama Percy- Chicos, ella es mi mamá Sally Jackson
Saludamos
-Y ella es mi media hermana Aria-añade Percy
-Mucho gusto en conocerla señora-digo
-Hija de Poseidón...-empezó a decir pero Percy la interrumpió
-Sí, pero ella es una diosa
-Pasen chicos, que está haciendo un poco de frío.-nos dice y entramos
Nos sentamos en la sala
Percy habla con su mamá, mientras que nosotros vemos un poco de televisión.
Luego de un rato la señora Sally nos acomoda en las habitaciones, Anabeth, Piper y yo dormiremos en la habitación de Percy, bueno ex-habitación, mientras que los chicos dormirán en la sala.
El cuarto está un poco empolvado por el desuso pero la cama es cómoda, que con solo cerrar si ojos, me quedé dormida.
Les conté que tengo muy mala suerte cuando "duermo" por así decirlo, ¿sí? Por eso no soy la diosa de la suerte o al menos de la buena.
Esta vez, me tocó reunirme con mi madre Hera
-Hola madre-digo no tan alegre
-Aria, no te preocupes por tu pasado-dice ella
Y eso fue la gota que derramó mi vaso de muy malas reuniones
-¡Que no me preocupe por mi pasado! ¡Sabes el vacío que siento!
-Es por eso que quiero hablar contigo, te falta tu otra mitad, hija, tienes que hacer caso a tu corazón y concentrarte en el presente
-Ah eso era, te pareces a Afrodita-digo
(¿Por qué todo el mundo me pregunta y me habla sobre eso?)
-Apolo es un buen dios, es justo para ti...
-¿Quién te ha dicho que quiero tener novio? ¿No puedo ser como Artemisa o Hestia?
-Las dos sabemos lo que sientes por Apolo, y él siente lo mismo por ti
-Acaso Zeus no te castigó por lo ya sabes qué...
Hera iba a hablar pero se detuvo, como si me estuviera ocultando algo
-¿Le darás otra oportunidad a Apolo?-me pregunta
No le iba a sonsacar sobre el otro tema así que me rendí
-Sí lo voy a hacer,como le había dicho a Afrodita, y a Percy y a casi todos los dioses-digo (exagero)
-Tienen que regresar al campamento-dice
-No, si me muero ayer no lo sabía-digo sarcásticamente
-No podemos morir, somos inmortales...-ruedo los ojos-Y sigue molestando a ese semidiós con el "taxi"-dice burlonamente
-Es mi hermano
-Pero es divertido verlo
Le lanzó el agua que está en el vaso, pero antes que la logre mojar ella desaparece
-¡HERA!-grito
Me despierta Piper
-¿Esta vez que hizo esa diosa?-dice Jason
-Nada... Ya nos vamos?-digo
Nos despedimos de la señora Sally, bajamos y pedimos el famoso taxi.
A mí me da más seguridad viajar allí, que en un taxi normal.
(Un consejo, si eres un semidiós que ama su vida, usa un taxi normal para llegar al campamento o busca a un sátiro en tu escuela, son mejores que un taxi conducido por la moiras)
(...)
Llegamos al campamento, y al pasar de la casa grande encontramos a Mauro perseguido por toda la cabaña de Ares liderado por Clarisse quien estaba empapada de pintura amarilla de cabeza a los pies...
Espera, ¿de pintura amarilla? Yo diría que eso es una broma de los hermanos Stoll, pero no son tan tontos como para meterse con Clarisse, con otro de la cabaña de Ares si podría ser, pero con Clarisse, nop.
Para ser honesta, el amarillo no le favorece
-¡Por Júpiter!-dice Jason
-¿Qué habrá hecho nuestro nuevo semidiós?-exclama Percy
-Hay que ayudarlo-sugiere Anabeth
Jason y Percy se miran nerviosos
-Que gallinas son chicos, lucharon contra titanes y una diosa principal, y quien mas sabes otras cosas más, y le tienen miedo a Clarisse La Rue-dice Piper
-Pues nos encargamos nosotras chicas, ¿verdad?-dice Anabeth
-Manos a la obra-digo