<<𝙼𝚎𝚖𝚘𝚛𝚒𝚎𝚜>>

26 3 0
                                    

-No, no le haremos eso- Negó Jeremy.

-¡No tenemos alternativa!

Norman y Jeremy llevaban horas buscando una solución, querían acabar con aquella familia que les había arrebatado todo: su padre, su vida, su inocencia... Obligándolos a crecer demasiado rápido.

-Ya lo oíste- Norman se levantó tan brusco de la silla que ésta cayó al suelo- Necesitamos un cuerpo vivo para esos demonios si queremos matarlos...

-¿Por qué no hacerlo nosotros, eh? ¿Tienes miedo a caso?- Jeremy se cruzó de brazos, Norman se dirigió hacia él velo, agarrando el cuello de su chaqueta y estampando lo contra la pared de manera brusca.

-No le temo a nada, pero ya sabes que yo no puedo ser el recipiente... Lo será ella y no hay más discusión.

-Temes de lo que te pueda pasar a ti, pero no de lo que le pueda pasar a tu hermana- gruñó el rubio mientras su hermano mayor lo soltaba finalmente- Es nuestra hermana pequeña, Norman, prometimos cuidarla y protegerla... No vamos a ponerla en ese riesgo.

-No tenemos opción- suspiró más relajado- Lo escuchamos todos, la quiere a ella como recipiente.

-Me ofreceré yo para esos demonios.

-No, Jeremy, tiene que ser ella- Comenzó a caminar lentamente hacia su cama, sentándose en la misma.

-¿Por qué?- Jeremy notó como sus ojos amenazaban con soltar lágrimas... Su hermana, se trataba de la vida su hermana menor y parecía que al mayor no le importaba en absoluto.

-Mae guardaba muchísimo rencor en su interior y odio hacia los Winchester... Un odio tan fuerte que ninguno de los dos guardamos... Por eso la quiere, sabe que ese sentimiento le puede ayudar y ser más fuerte- Guardó silencio unos segundos- ¿Has visto su colección? Tiene una jodida colección de colmillos de las criaturas que cazaba desde pequeña.

Jeremy ya había dejado que las lágrimas salieran, su pequeña se había convertido en una máquina de matar. Mae había cambiado, ya tenía 16 años, era una hermosa adolescente rebelde y cabezota, pero también la mejor persona que podías conocer... Una chica divertida, la cual nunca sabías por dónde te iba a salir, era una caja de sorpresas rebosante de alegría. Ella daba color a sus días grises.

Y justo estaban planeando ofrecerla como recipiente.

Actualmente:

Despertó en el Impala, vio que apenas amanecía. Al mirar hacia delante observó cómo Sam conducía y Dean dormía con la cabeza hacia atrás, unas gafas oscuras puestas y su boca levemente abierta. Sonrió levemente al verlo.

-Buenos días- Habló bajo Sam viéndola por el retrovisor.

-Buenos días- Se acercó un poco al asiento del conductor y colocó sus manos sobre los hombros del menor de los Winchester.- ¿Has estado conduciendo toda la noche?

-Una parte- Contestó- Obligué a Dean que parase.

-Entonces tú no has dormido- Resumió.

-Sí, dormí un par de horas.

-Mentiroso- Le pellizco suave, haciéndolo reír- ¿A dónde vamos?

-Rockford, Illinois- Siguió con la mirada al frente- Un agente de policía asesinó a su mujer y después se suicidó tras hacer una ronda nocturna en un manicomio abandonado.

-¿El manicomio Roosevelt?- Preguntó ganándose una mirada confusa del chico.

-¿Cómo sabes su nombre?

HUNTERWhere stories live. Discover now