Me gusta todo

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El reflejo es claro. Lo puede confirmar cuando baja la mirada y ve las cicatrices en todo su cuerpo. El pasar su mano por su piel es encontrarse con cicatrices planas, hundidas y abultadas. No encuentra nada atractivo en su cuerpo. No puede catalogarlo como algo bonito. Y es así que no entiende que es lo que ve Doffy en él.

Su hermano mayor siempre ha sido atractivo, aún cuando tiene una personalidad retorcida y pareciera ver a los demás como objetos. Tiene un aire elegante que atrae a mujeres y hombres, mayormente a las primeras, quienes lucen hermosas con sus cuerpos limpios de imperfecciones y rostros resplandecientes de vida.

Siempre hermosas.

Siempre bonitas.

Agarra su camisa que esta sobre la cama y botón a botón cubre el pasado tatuado en su piel.











[...]

Fuma un cigarrillo mientras observa a la distancia a Doflamingo que habla con una chica de cabellos rojizos. Aun a la distancia puede notar el cuerpo curvilíneo que se mece cada que ella cambia su peso de un pie a otro en un nerviosismo al querer llamar la atención del hombre.

Suelta el aire pensando si es buena idea adelantarse a regresar a casa.

Unos minutos después la mujer se va y Doflamingo camina hacia él.

- Vamos -

Dice sin detenerse al pasar a su lado.

Doflamingo no dice nada sobre la conversación que recién ha tenido, en su lugar le pregunta sobre si desea comer algo o si deberían comprar y llevarlo.

Niega como respuesta tirando el cigarrillo.

Al llegar al almacén donde se están quedando y usando como la actual base, ven a Lao G entrenando. El hombre avienta patadas y puñetazos al aire hasta que ve a ambos.

- Bienvenidos -

Les recibe, pero luego vuelve su mirada atrás donde está un pequeño cuerpo.

- Ahora repite lo que hice -

Law intenta copiar lo mejor posible cada movimiento.

Doflamingo hace una señal con su mano para que Rosinante le siga adentro. Pasan de largo de la cocina donde Giolla está bebiendo su té de la tarde en compañía de Diamante, quién luce aburrido.

La habitación a la que entran es la de Doflamingo. El mencionado abre la ventana al ver a su menor sacar otro cigarro.

- Haré una llamada -

Dice al acercarse al Den den mushi que descansa sobre la mesita.

Rosinante se sienta en la cama escuchando la conversación que tiene con uno de sus espías. En un momento se distrae y deja de escucharlo. Ha alcanzado a ver su reflejo en un pequeño espejo recargado en la pared. En su mente vuelve a recordar los pensamientos que tuvo hace unos días. La inseguridad vuelve a él de una manera que lo hace sentir incómodo.

Escucha unos pasos y luego una mano que le roba su cigarrillo. Doflamingo le da una calada y suelta el humo. Sus ojos se encuentran, o al menos eso supone ya que el mayor sigue con sus lentes puestos. El rostro de este se acerca hasta que siente sus labios sobre los suyos. Es un beso corto que interrumpe cuando voltea la cara rechazando el ir más allá.

Con algo de rudeza Doflamingo le hace mirarle, sostiene su rostro por la barbilla para evitar que repita la acción.

- ¿Qué sucede? -

Pregunta confundido. Vuelve a dar una calada al cigarro para regresarlo a su dueño. La respuesta no llega así que le suelta sin insistir de la misma forma.

- Acaso estás celoso por la mujer del centro -

Su voz está acompañada de un tono burlón. Se sienta en la cama con la espalda recargada en la cabecera y las piernas extendidas hasta llegar a tocar la pierna de su hermano.

El humo grisáceo es todo lo que ve junto a un movimiento del brazo. Un papel con la palabra "No" aparece.

- Entonces ven aquí -

Rosinante tarda, pero anda sobre la cama hasta quedar sobre las piernas contrarias tal como esté le ha guiado.

- Sabes que tienes la mala costumbre de dejar la puerta abierta -

Le dice cerca del oído cuando deja sus manos viajar hacia el borde del pantalón.

- Así como también sé de esa costumbre de mirar tu cuerpo -

Desliza su mano hacia la mano contraria y quitarle el cigarro para apagarlo en un cenicero.

Observa los ojos de Rosinante quién se deja hacer sin oponerse. Desabotona la camisa y observa las cicatrices en abdomen y pecho. Acerca su rostro notando cómo el cuerpo sobre él se tensa al sentir su respirar tan cerca. Deposita un beso en una de las heridas.

Lo conoce tan bien que pareciera adivinar lo que debe pasar por su mente cada que se ve en un espejo.

- Me gusta cada parte de ti -

Euforia  (Donquixote)Where stories live. Discover now