GREED | Kim Jungwoo

EPÍLOGO

Se contaba una leyenda entre los humanos, que pasaba de lengua en lengua, con modificaciones y susurros en noches de cuna a los niños.

Hace cientos de años atrás, existió un ángel que tenía un par de alas tan grandes y brillantes, que llamaban la atención a cualquiera. Junto a unos ojos cafés sin ningún gramo de maldad, que ni los mismos arcángeles podían presumir.

Y eso fue lo que llamó la atención de ese pobre demonio.

No fue por el capricho ni la soberbia, de la que él tanto presumía tener. Él se enamoró.

Se enamoró tanto, que puso en riesgo toda su vida para mantenerla a su lado, y no dejar que nadie la lastime.

Pero ese ángel tenía a alguien detrás, alguien que no la dejaría ir tan fácilmente.

¿Quién era el malo de esta historia?

Un hombre que si lo veías, podías sentir la bondad saliendo de sus poros, con una sonrisa que te daba tranquilidad. Un ángel de mayor rango, que no podía soltar, y menos perder contra un demonio.

Ese ángel de grandes alas y figura delicada, se había enamorado del demonio, porque para eso fue creada, para amar. Y quiso dedicarle toda su vida al chico de ojos oscuros que la llevó al infierno.

Oh, pobre de ti, inocente y bello ángel, que por tu pureza, caíste en las mentiras de un demonio.

Fue un amor imposible, porque no pudieron estar juntos, a pesar de que lo intentaron muchas veces y gastaron todas sus posibilidades.

¿Quién era el villano aquí?

Desde un principio, se puso a Jungwoo como el malo de la historia, el que secuestró a Mila y fue egoísta con todos los demás.

Era cuestión de perspectiva, porque Mila era la que siempre vio a Kun bajo una luz diferente, sin notar lo que escondía.

Mila cayó en las mentiras de Kun.

Y así fue, como el ángel de rango Dominación terminó ganando.

O eso creía él.

En el cielo, Mila era resguardada, cumpliendo misiones sin bajar a la tierra, volviendo a ser el ángel amado por todos, ella brillaba y sonreía con amabilidad, disfrutando de su vida, y alabando incansablemente al Creador.

En el infierno, estaba el demonio, trabajando día tras día sin parar, movido por su corazón herido, y la rabia de haberla perdido.

Esta vez sería diferente, ahora tenía más ayuda y nadie lo pararía.

Jungwoo era un príncipe, heredero al trono, y nacido del pecado y la codicia. No descansaría hasta tener a Mila de vuelta con él.

"—Mataré a quien se atreva a interferir . "

Después de todo, Mila era su ángel.

N/A

Ahora sí, terminamos con Greed.

Espero que se hayan aclarado algunas pequeñas cosas con el epílogo, y también decirles que no hay más partes, ni segundo libro, con esto lo cierro oficialmente, y solo editaré algunos capítulos.

Es un final abierto, pueden tomarlo como quieran, a lo mejor Jungwoo si vuelve a estar con Mila👀.

Gracias otra vez por haberme acompañado en este trayecto, espero poder encontrarles en mis otras obras y que sigan disfrutando conmigo💕.

Gracias por el apoyo.

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