Candy

Capítulo 1

La música sonaba fuertemente en el lugar, todo era un caos y la gente gritaba cada vez que cambiaban de canción no era que le molestará que hubiese bulla al contrario amaba la sensación de sentirse feliz e eufórico tras una dura semana de trabajo.

Ese era como su premio de consolación al dedicarse una semana entera a escribir informes en su computador y aguantar los gritos de su jefe hacía los demás empleados, Harry iba de fiesta cada fin de semana con sus amigos disfrutando el poco tiempo que le quedaba para sentirse libre porque trabajar era como tener una soga atada al cuello o bueno eso creía el quien era el rey del drama.

Zayn y Liam estaban dándole alcohol en exceso al pobre Niall que recién había roto con su novia declarando así que era seguro su mala suerte en el amor, pero vamos que Harry sabía mucho de rupturas amorosas pues era bien sabido que era muy malo escogiendo con quien meterse.

Amaba el desorden, la bulla, el alcohol y el sexo es decir esas cosas podrían sonar lo más básico del mundo pero a él le gustaba distraerse y sentirse feliz momentáneamente, Harry era bueno consiguiendo un acostón siempre que salía de fiesta pero en ese tema era muy selectivo pues no quería terminar con un asesino o aún peor una enfermedad, Jesucristo.

Estaba un poco mareado después de tomar una cantidad considerada de alcohol, le disgustaba el sabor pero le gustaba la sensación de estar mareado y desconectarte de si mismo, era algo que había experimentado en su adolescencia y que ahora practicaba muy seguido.

Bailaba sensualmente al ritmo de una canción con un ritmo muy movido, sentía que las manos sobre su cintura se deslizaban más abajo hacía sus piernas y sentía que el calor se apoderaba de su cuerpo no por el tacto si no porque alguien no tan lejos de él lo observaba sentado en un sillón bebiendo y fumando cómodamente, para ser más específicos su jefe analizaba todos sus movimientos y sonreía arrogante mientras inhalaba de su cigarrillo.

Olvidó que alguien detrás de el cantaba la canción en su oido, quería sentir la respiración de otra persona en él, quería que su jefe fuese quien besara su cuello humedamente, cerro los ojos imaginando que la persona detrás de el era Louis Tomlinson y no Daniel de publicidad.

Harry era ambicioso y jodidamente quería que su jefe lo reclamara frente a quien fuera eso le daría más emoción a la cosa ya que todos sabrían que él tenía dueño y era ese jóven de ojos azules que juraba ser heterosexual ante el mundo y su familia. Harry no tiene mucho que decir acerca de él no más que quedó flechado desde el primer momento en que lo vio algo que resulta muy cliché para él pero no imposible porque vamos, Louis es sexi y más cuando se enoja y grita a los demás y eso sí que excitaba a Harry.

Tenía que admitirlo, desde hace mucho tiempo comenzó a ver la cara de su jefe en los hombres con los que se acostaba solo así sentía que valía la pena entregar su cuerpo a otros que no fuese a quien le pertenecía su corazón, ¿Louis lo sabía?, claro que no lo sabía prefería mil veces cortarse la lengua antes que decirle a su jefe que recién se había casado que lo amaba profundamente y por supuesto que lloró un montón al ver la boda de su jefe por una transmisión de facebook porque el tipo también era un magnate social y el blanco de la prensa.

Era tonto pero estaba enamorado y alguien enamorado perdía la razón, es por eso que ahora estaba en un debate con su mente imaginando otras manos en su cuerpo y otra voz en su oído aún cuando lo que quería estaba a unos metros de él pero lo que no lo dejaba en paz era saber que mierda hacía su jefe heterosexual en un bar gay viéndolo fijamente mientras bailaba con otros hombres.

Estaba acostumbrado a que le dijeran que cambiaba más de novio que de panties pero no quería que Louis pensará lo mismo que los demás porque solo era alguien que disfrutaba de su sexualidad y eso no le quitaba el valor porque se consideraba una buena persona y los demás se lo decían.

Tenía que tomar un respiro así que se separó de su acompañante y fue a otro lugar en dónde podía tomar aire libre o se iba a ahogar, el lugar en donde estaba tenía un pequeño patio en el cual se podía fumar con tranquilidad sin ruido o muchas personas alrededor es por eso que ahora estaba sentado en una banca mirando a las otras personas hablar o pasarse el humo del cigarrillo.

-¿Pensé que te habías ido?.-Esa voz le causaba un millón de sensaciones, su piel se herizo y su estómago cosquilleo dándole deseos de vomitar.

-Oh hola.-No sabía que decir o como saludar a su jefe.-Yo aún no me voy.-Dios mío que alguien le diera un golpe.

-Claro.-Dijo Louis con una pequeña risa.-Te estoy viendo en estos momentos.

Louis tenía que dejar de sonreír de esa forma o seguramente Harry se abalanzara sobre el a besarlo hasta quedar sin aire.

-Um si.-Desvio sus ojos sin querer hacer contacto visual pues ya estaba muy nervioso por tenerlo frente a el hablándole cuando en la oficina solía darle órdenes de forma tosca "Harry trae mi maldito café", "Harry te dije que cancelaras mi cita", ser el secretario de Tomlinson era difícil.

-¿No quieres hablar conmigo?.-Preguntó Louis desvaneciendo la tonta sonrisa que tenía.-Yo lo siento si te estoy incomodando.

-¡No!-Gritó fuertemente Harry ganándose la mirada curiosa de los que estaban allí.-Digo es que no sé cómo tratarte tengo miedo de que me despidas.-Louis comenzo a reír fuertemente mientras sacaba otro cigarrillo de su bolsillo y Harry ya se estaba preocupando por la cantidad exagerada de cigarrillos que su jefe fumaba en menos de una hora.

-No te voy a despedir por hablarme.-Aspiro el humo y se quedó mirándolo fijamente.-Es decir, no hay una razón justificante para hacerlo.

-Supongo que tienes razón.-Louis se sentó a su lado y se recostó en la pared fumando su cigarrillo bajo los ojos encantadores de Harry.

-¿Quieres un poco?.-Extendió su cigarrillo hacía el chico de rizos y este negó con una sonrisa.

-No fumo gracias.

-¿Por qué no?.-Preguntó curioso observando el brillo de aquellos ojos verdes.

-Nunca aprendí hacerlo además el olor es desagradable.

-Puedo enseñarte.-Aseguró con una sonrisa encantadora y Harry no se pudo negar.

Ahora se encontraba tosiendo exageradamente por no haber inhalado el humo correctamente pero es que no sabía cómo se llevaba el humo hacía los pulmones, el caso es que Louis se la paso burlándose de él cada vez que intentaba dar una calada y se ahogaba.

Sin duda está noche sería buena.