Capítulo 7

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Jaffner

Luego de perderla unos minutos de vista, mi mente comenzó a gritar su nombre. He intentado en los últimos minutos evocar su presencia, pero todo parece imposible cuando la he perdido escaleras abajo.

Busco en la caja de excusas de mi cabeza algo que sea lo suficientemente creíble. Algo que haga que Kathevlin se quede aquí. No puedo bajar con ella mientras intento investigar sobre Arley y Raybon.

Muerto de cólera, con los celos crispando en mis mente, no puedo detener las imágenes violentas que llegan a mi cabeza. Ella besando otros labios, Raybon tocando su piel. No puedo tolerarlo. No quiero tolerarlo. La rabia me carcome y la impotencia se vuelve un veneno letal.

—Iré al baño —suelto lo primero que se me ocurre.

—Bien, deja que busque mi camiseta por algún lado —maldigo en lo profundo cuando Kathevlin insiste en acompañarme.

—Prefiero que te quedes aquí con Kalie y Brecko, temo que te pueda perder abajo mientras esperas por mí detrás de alguna puerta —sonrío buscando su aprobación, pero en el interior tiemblo ante la idea de tener que forzar mi mentira.

Miento de forma despreciable. Cualquier ser humano sabría que llevaría a mi novia a cualquier lado. Kathevlin ya me ha visto desnudo, ha visto mi cuerpo intoxicado de alcohol, y en mis momentos más oscuros cuando moría por Arley en esa playa, no debería tener intención de dejarla aquí. Pero se trata de Arley y aunque quiera ocultarlo con garras y dientes, la amo más allá de mi cuerpo, de mi carne, de mis propios huesos.

—Está bien —Kathevlin besa mis labios y en el camino en que se aleja deja un vacío que solo hace que me sienta sucio.

Me alejo en dirección a las escaleras y cuando finalmente pierdo de vista el jacuzzi, ahí es cuando acelero mi paso.

Me vuelvo un neurótico en busca de su rostro en la medida que mis pies descienden por los escalones la tengo tan fija en mi cabeza y la imagen de sus labios besando a Raybon no dejan mis pensamientos. El recuerdo me tortura haciendo que pruebe de la misma mierda que le he dado.

Maldito karma del universo.

Al bajar lo primero que veo es a Raybon al pie de la escalera con una lata de cerveza en su mano en medio de dos chicas. Su sonrisa y sus aires de macho alfa solo me demuestran que se encuentra en medio de una conquista, pero eso no es lo que importa.

— ¿Dónde está, Arley? —Es lo primero que digo al enfrentarme al chico de ojos azules.

—Podrías saludar primero, "hola mi nombre es Jaffner", por ejemplo. Pero como estoy de muy buen humor, deja que lo haga yo. Ellas son —comienza Raybon y su voz no es devota de un estado de lucidez completa. Está más ebrio de lo que recordaba.

—No tengo tiempo para esto ,Raybon, necesito saber dónde está Arley.

—Juro que no lo sé, estaba aquí, me perdí unos segundos y cuando volví ya no estaba aquí ¿tú la has visto? —Pregunta a la chica a su lado.

—Ni siquiera sé de quién hablas, he visto a muchas personas bajar por esas escaleras y no nos dejan entrar —pronuncia la chica.

—Ojos cafés, estatura pequeña, camiseta roja, llevaba ojotas negras y rizos rubios mojados, tiene un tatuaje en su brazo derecho.

—Recuerdo su camiseta, podría jurar que se ha ido por allí —cuando creí que mi suerte no podía cambiar, algo llega como un tono de esperanza.

—Gracias —pronuncio y finalmente me interno en el tumulto de personas en mitad de la sala. Observo en todos los sentidos pero no puedo verla. La reconocería en cualquier extremo, es inconfundible a mis ojos.

Change This Heart - FOR YOU (libro 3 CTH)Kde žijí příběhy. Začni objevovat