HARD TO SAY GOODBYE | MARVEL

05. ¿Lágrimas de tristeza o de alegría?

Wanda no salía de su habitación para nada, se quedaba tumbada en su cama, apenas se movía, los demás pensaban que estaba durmiendo pero no era así, se quedaba mirando a la nada. De vez en cuando se ponía a ver series en su televisor, gracias al sonido que producía fuera se descubrió que le encantaban las comedias.

De vez en cuando Visión entraba en la habitación, seguía sin entender a la chica pero por algo que estaba fuera de su alcance, le gustaba estar a su lado. Suponía que era porque no sabía cómo eran los sentimientos, ver a alguien que los tenía a raudales era un buen aprendizaje pero nunca nadie se lo preguntó, así que no lo sabía.

La habitación de Wanda estaba limpia, no había nada que se hubiera movido de su sitio, algo bueno para una madre pero en este caso, no era bueno, lo que significaba que el movimiento era mínimo. Solo la cama y el baño estaban desordenados, este último por obvias razones primarias pero la cama lo estaba porque era el único lugar donde ella se encontraba. Y aunque los demás vengadores intentaban entrar para arreglar un poco la cama, no era posible, parecía que la adolescente solo se movía por inercia, era como un muerto en vida.

Hubo un día en que, sorprendentemente, salió de su habitación, pero nadie la vio, era de noche, cuando todos dormían. Fue a uno de los tejados del complejo.

Estuvo un buen rato mirando al cielo, tumbada en el frío suelo. No se durmió ni nada, pero no parecía que hubiera nadie allí, excepto por ver un cuerpo en medio del suelo. Sus movimientos eran lentos, sentía el cuerpo entumecido.

Se levantó de donde estaba y se acercó al balcón, se quedó mirando el suelo, sus músculos seguían algo dormidos aunque no entendía por qué no había hecho nada.

Tanto las estrellas como la hierba del suelo tienen un compañero a su lado, cómo van a poder estar juntos para siempre. Tal vez debería intentar llegar al cielo.

Empezó a trepar por la barandilla del lugar donde se encontraba, le estaba costando un poco pero consiguió pararse allí, sentía todo el aire dentro de ella y le traía recuerdos de cuando se encontró cayendo del tren en sokovia. Pensó que ese fue el momento en el que no sintió nada, un momento en el que se sintió liberada.

Cerró los ojos y dejó que el aire se hiciera uno con ella, en pocas palabras, saltó desde donde estaba. El momento de la caida para ella fue largo, fue el unico momento en el que no sintio nada, su cuerpo no estaba dormido, su mente no pensaba y solo oia el sonido del viento, algo que no le molestaba.

Cayó

Cayó

Cayó

Y se cayó

Pero nunca llegó al suelo, nunca notó el golpe que le hubiera gustado, sólo notó algo de metal. Al principio pensó que era el suelo, porque era bastante duro, pero luego, cuando vio una cara, supo que no era el suelo con seguridad.

Vio quién le había agarrado antes de caer al suelo, supo que sólo podía haber sido alguien que pudiera volar y sólo había una persona u objeto o tostadora, no sabía cómo decirle, que pudiera volar.

-Señorita, quiero decir Wanda, ¿estás bien? - Ella no contestó pero es sintheoid no sabía por qué, ¿quizás tenía que hacer un cambio en su maquinaria para hablar? No creía que fuera eso porque cuando buscaba información en la red y los humanos no podían hacer esos cambios porque tenían algo llamado tendones pero no sabía si eso se podía cambiar, tendría que mirar. - ¿Quieres que traiga a alguien?

Wanda negó con la cabeza, no quería que nadie hiciera nada, no la dejarían ir con su hermano. Pero esto nadie lo entendería, nadie sentía el dolor que ella sentía, todos tenían sus sentimientos pero ninguno se parecía al que ella sentía porque no estaban en su piel.

-Entonces, ¿qué puedo hacer? - visión en realidad quería ayudar, no sabía por qué pero no le gustaba que la chica estuviera en ese estado, no entendía el estado ya que no tenía sentimientos pero había algo en él que hacía que no le gustara la situación aunque tampoco podía sentir asco, era algo que no entendía.

-Puedes dejarme en el suelo e irte, me gustaría estar solo. - una voz débil salió.

-No puedo hacer eso, su cuerpo se enfriaría y un humano no aguanta mucho el frío, su constitución no lo soporta.

-No me importa, ni siquiera quiero sentir nada, solo quiero estar con mi hermano. Él debería haber sobrevivido, no yo, él era el extrovertido, divertido y el que sabía controlar sus poderes, no yo. Ni siquiera merezco ser un vengador, solo soy una carga para todos aquí. No he entrenado, no he hecho nada. 

Incluso Clint se fue porque ya no me soportaba. - De repente se dio cuenta de lo que había hecho, no debería haber aguantado oírle hablar, empezó a morderse las uñas sin importarle que le sangraran por lo profundo que estaba llegando pero no llegó a ese punto.

Visión lo detuvo y lo abrazó, sintió que era lo correcto. No hablaban, ella solo lo abrazaba.

-Para lo que necesites, digo necesites, estaré por aquí, no sé qué significa eso de los sentimientos pero según lo que he podido encontrar, es bueno estar con alguien cuando se siente mal, ¿no? - También había leído que necesitáis la aprobación del otro.

Wanda empezó a reír levemente y luego soltó unas lágrimas, lo que hizo que Visión se asustara, las lágrimas no eran buenas en los humanos.

-Visión, no son lágrimas de tristeza, o tal vez sí, yo tampoco entiendo qué me pasa, pero es bueno que alguien aquí no sienta pena por mí cuando yo siento aún más pena por mí misma. - se secó las lágrimas de los ojos. - ¿Me acompañas a mi habitación?

Los dos fueron a la habitación de la chica, y aunque no hablaron en absoluto, Vision se quedó allí un rato y luego atravesó las paredes y dejó a la adolescente sola. Ella no sabía qué pensar de lo que había pensado, sólo pensó que al hablar con él, no estaba pensando tanto en su hermano.