LARISSA ―Charles Leclerc, Pedri González

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Jugo de naranja..

El sevillano conducía a gran velocidad por las calles de la ciudad, Larissa quién iba revisando sus apuntes ni siquiera era consciente de las miradas que el chico le daba de vez en cuando.

---¿Que haces? ---preguntó logrando hacer que la pelinegra elevé su mirada para verlo.

---Nada importante ---respondió volviendo a lo suyo.

Habían muchas personas esperando a las afueras del campo para ver a los jugadores entrar, algunas sosteniendo carteles gigantes o camisetas para ser firmadas.

Pablo bajo la ventanilla para firmar algunas rápido, Larissa aprovecho ese tiempo para acomodarse el cabello en el retrovisor.

---Esperarme a que salga ---fue lo último que dijo antes de subir la ventanilla.

El silencio en el automóvil se volvió incómodo por lo que la chica se atrevió a hablar después de un rato.

---He comprado un departamento, pronto me iré a vivir a el ---soltó haciendo que Pablo la mire enseguida.

---No tienes que hacerlo, somos novios únicamente ante los medios pero tú sigues siendo alguien importante para mí ---añadio, su relación había acabado hace ya algunos días.

Al llegar la primera en bajar fue ella, Pablo le puso seguro al auto y rodeó su cintura para que así camira junto a él.

---Pedri amigo, ¿Como estás? ---se acercó al chico que estaba junto a uno de los autos estacionados.

---Bien, muy bien ---sonrió dándole una ligera mirada a la chica que venía con el.

---Ella es Larissa ---la presentó, el canario le dio un beso en la mejilla en manera de saludo.

Los tres caminaron hasta adentro, la pelinegra pudo sentir la fuerte mirada por parte del amigo de Pablo a sus espaldas.

---Voy a estar arriba ---señaló el palco superior, Pablo negó rápido.

---Es mejor que te quedes cerca, así te puedo estar mirando desde el campo, no es seguro que estés sola con tanta gente ---sugirió tomándola de la mano.

---Disculpa que me meta, pero mi hermano ha venido se puede quedar con el ---opinó el canario.

---Genial, ve con Fer entonces ---dijo mirándola, ella asintió aunque no tenía idea de quién era Fer.

Pedri los guío hasta donde se encontraba un chico bastante parecido a el, fue muy amable al aceptar que se quedará junto a el.

---¿Como te llamas? ---preguntó interesado una vez los dos futbolistas se habían marchado.

---Larissa ---respondió con amabilidad, el muchacho le dedicó una sonrisa.

---Bonito nombre, yo soy Fernando ---le tendió su mano, la pelinegra la tomó enseguida.

---Hace una bonita tarde, ¿No crees? ---preguntó poniéndose sus lentes oscuros.

---Muy bonita, ojalá que esta vez sí les vaya bien ---respondió.

---Este clima es perfecto para prepararte un vaso de limonada..

---¿Te gusta cocinar? ---preguntó emocionado el muchacho.

---Me encanta, mi padre era chef de un restaurante local y siempre le ayudaba a preparar la cena, mi gusto por la cocina lo herede de el ---explico dando un suspiro, recordar a su padre aún le traía nostalgia.

Rodrigo Valencia, había muerto cuando ella tenía tan solo doce años a causa de el hundimiento del barco en el que viajaba, todavía le era difícil visitar el mar y no recordarlo, desde que el murió no había tenido el valor suficiente como para siquiera entrar al agua.