La Forma en que Nuestros Horizontes se Encuentran - Larry

Capítulo 3

Aunque hubiera pasado todo el día anterior con Louis, Harry aún siente nervios por verlo. Lo pasa a buscar a su Airbnb en transporte público, entusiasmado. Lleva una mochila llena de cosas esenciales porque sería un día largo.

Louis sale del departamento. Está muy ansioso, estar con Harry había sido muy especial, y no puede esperar a pasar otro día con él. Se saludan con un abrazo y Harry le da un beso en la mejilla. Louis se muere por besarlo pero siente que tiene que contenerse. Se recuerda a sí mismo que no tiene que parecer tan raro frente al omega que le gusta.

Harry había planeado ese día visitar el Central Park, un parque artificial extenso el cual Louis estaba muy emocionado por ver. Viajan en transporte público, y Louis sin darse cuenta busca proteger a Harry de otros alfas. Harry había visitado el lugar varias veces, por lo tanto lo guiaría por el mejor camino para ahorrar tiempo.

Cuando llegan al lugar, Louis sonríe ampliamente, no podía creer que estaba allí. El omega los dirige hacia la zona del lago para comenzar.

–¿Empezamos? –pregunta él, extendiendo la mano.

Louis la toma y entrelaza sus dedos. Siente que su piel cosquillea. Al omega le encanta tomar su mano. Aunque fuera alfa, la de él es pequeña y encaja con la suya perfectamente. El ojiazul asiente.

–Sí, hoy estaremos todo el día aquí, ¿no? Había visto que es inmenso... –comenta, caminando con él, observando todo el lugar. Cualquiera pensaría que son una pareja.

Harry le acaricia la piel con el pulgar y asiente con la cabeza.

–Sí, llevará tiempo, así que no creo que podamos ir a otro lado –explica.

El alfa le da un leve apretón a su mano para llamar su atención.

–Esto es muy lindo... –dice mientras saca su teléfono para tomar algunas fotos. –¿Quieres que nos saquemos una foto antes de seguir? –pregunta.

–Está bien. Podemos sacarnos una al final también para ver cuánto nos cansamos –dice riendo.

Busca un lugar adecuado para que no les diera el sol directamente en los ojos y que tampoco tenga mucha gente de fondo. Le rodea los hombros con un brazo, ladeando la cabeza hacia él y le sonríe al lente de la cámara. Para Louis la diferencia de altura no es un problema. Le rodea la cintura con el brazo que tiene libre y toma algunas fotos, dando una sonrisa sincera.

–Nos vemos muy bien –comenta Louis.

–¿Sí? –pregunta Harry mordiéndose el labio. A veces no entiende si Louis le está coqueteando o no.

Louis se moja los labios y asiente. No sabe cómo actuar frente a Harry y se siente pésimo para coquetear.

Harry le explica que tienen dos caminos para elegir. En uno, hay una cancha de baseball y un carrusel, en el otro pueden seguir avanzando por el parque.

–Eso del baseball... Sinceramente no me llama la atención. Demasiado americano para mi gusto –responde en broma. Louis es el típico inglés que sólo conoce de fútbol y no encuentra atractivo ningún otro deporte.

–Tienes razón. Además, seguro habrá niños jugando. Eso quiere decir que estará lleno de padres –dice riendo levemente.

–Si voy, solo iría para burlarme de ellos por desesperarse por partidos de niños.

Ríe, lo mira a los ojos y le sonríe, marcando sus hoyuelos. El alfa de Louis siente que se remueve al verlo sonreír así.

–Entonces vamos.

Harry lo toma de la mano y se dirigen hacia el otro lado. El camino se llama The Mall, donde hay varios artesanos a los costados vendiendo. A medida que van avanzando, escuchan la música que viene de lejos. Siempre hay artistas desparramados por todo el parque. Louis ama estar al aire libre y mira para todos lados con una pequeña sonrisa. Observa los objetos de los artesanos, viendo si alguno le llama la atención.