Libre hasta que tú apareciste en mi vida | BrightWin | Adaptación ✔️

| Capítulo 27

Otra noche nos encontrábamos frente a la web cam y de un momento a otro tras diferentes temas de conversación llegamos a hablar de ser padres, de inmediato noté su cara de angustia, jugaba con sus manos y evitaba mirarme. Me sonreía, pero sus ojos lucían apagados.

— Winnie, ¿qué te sucede? — Pregunté preocupado.

— Nada, ¿por qué? — Respondió evasivo sin fijar sus ojos marrones en mí.

— Porque estás visiblemente nervioso y asustado, ¿qué pasa? Dímelo con confianza.

— Es que... — Guardó silencio y se mordió el labio. — Baii... Tengo un miedo, ¿sabes lo que significa adoptar? No es solo el rechazo que podamos recibir como sociedad, sino que el niño necesita un hogar feliz y tranquilo, ¿no lo crees? No me mal entiendas, no es que no quiera tener una familia a tu lado pero...

— Bebé, bebé. Entiendo, entiendo perfectamente lo que quieres decirme, no hay de que preocuparse, somos jóvenes y tenemos mucho tiempo para pensarlo, ¿no lo crees? Tal vez en un futuro lo veamos de un panorama diferente y podremos tomar la decisión juntos. — Exclamé sonriendole.

— Sí... Lo sé, pero eso no quita que sienta miedo.

— Tranquilo corazón, no tienes nada de qué preocuparte, no estás solo, me tienes a mí, yo no voy a dejarte solo, un hijo nuestro sería lindo, pero esperemos el tiempo necesario para cuando estés listo. Si en algún momento cambias de opinión y para ese entonces tenemos una hermosa casa con dos perros, un gato y un conejo, podremos ir de compras y remodelar un habitación muy linda con muchos juguetitos para nuestro hijito o hijita y escoger la ropita para él o ella.

— Que cosas dices, Bright. — Exclamó sonrojado.

— Es la verdad, ¿no te gusta la idea? Gastaremos mucho dinero para cumplir sus caprichos. En fin, bebé, no quiero presionarte con el tema, creo que volé imaginando todo, yo te entiendo, de verdad.

— No es eso... Aún no me siento preparado para esa responsabilidad, un hijo no es un juguete, es algo para toda la vida y siento que todavía no soy capaz de cuidar ni siquiera de mí como para educar a una personita.

— Nadie nace sabiendo eso, amor, se aprende con el tiempo. No puedes estar angustiado pensando en ello cuando aún falta mucho para tomar esta importante decisión, sino te van a salir antenitas. — Le dije en broma para lograr una sonrisa en él. No me gusta que esté preocupado o pensativo. —  Además, piensa que yo te apoyaré al 100% en todo, ¿okay? Jamás evadiré mi responsabilidad si tenemos un bebito.

Él me dio una preciosa sonrisa y cambiamos de tema para que deje de estar tan tenso. Entendí que le preocupaba el tema por lo de sus padres. Cuando investigué de él me di cuenta que algo pasó con sus progenitores, aunque no sabía qué.

Esa noche casi no pude dormir pensando en esa posibilidad, hasta pensé en Boss, la cara que pondría al enterarse que yo sería papá. En cambio, él seguía sin heredero, pero todos en la familia esperábamos pronto un bebé de Boss y Pear. Una sonrisa traviesa se dibujó en mi rostro imaginando su reacción. Mis padres seguro nos apoyarían y Earn sería la más feliz, a cada rato le preguntaba a Boss y Pear cuando la harían tía, así que su sueño se vería cumplido por mí también.

Me encantaría casarme con Win, aunque fuera algo sencillo e íntimo. Moví la cabeza, ¿en qué momento mi vida y mis pensamientos habían cambiado tanto? Hace no muchos meses yo era todo un Don Juan, un Casanova, un Valentino y ahora estaba pensando en comprar pañales y juguetitos. En efecto, Win había llegado a voltear mi vida de cabeza y había sido lo mejor que me había pasado, él había descongelado mi corazón y logrado que volviera a latir por amor.