un alfa enamorado

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─ ¡YAMIIIIII!

─ ¡KACCHAAAN!

Ambos jóvenes corrieron por el otro ni bien se encontraron, los dos tenían una gran sonrisa en el rostro.

Se abrazaron con fuerza, hace muchísimos años estuvieron alejados del otro. Aún así siguieron en contacto

Mikumo estaba tan feliz de poder volver a su mejor amigo de la infancia, cada día que pasaba solo lo extrañaba más. Cuando lo sintió envolver su cuerpo, se sintió tan cálido y cómodo, extrañaba todo, sus abrazos, su voz, su sonrisa, todo.

Y Gogo estaba aún más feliz, su alfa se removía en su interior de felicidad por por fin ver y sentir a su amado pecoso. Él estuvo enamorado de Yami desde que tenía conciencia, y su alfa había amado y encariñado también con el pecoso, cosa que no sabía explicar.

Al estar aún abrazados, Katsuki arrimó su nariz al cuello ajeno por inercia, donde percibía el pequeño aroma a menta que le encantaba.

─ te extrañé muchísimo hijo de puta.

─ yo también pedazo de imbécil.

─ yo también pedazo de imbécil

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─ woah, lindo departamento. ─ dijo Mikumo, viendo el interior del hogar temporal del ceniza.

─ gracias, ahora que estás me ayudarás a pagarlo. ─ mencionó mientras tomaba los equipajes del menor y los llevaba a su habitación.

─ ¿No me ibas a mantener? ─ bromeó Akatani mientras lo seguía.

─ cálmate, aún no tengo un trabajo estable.

El beta no lo notaba, pero la casa estaba llena de feromonas dulces de felicidad del más alto.

Mikumo se acostó en la cama del él, extendiendo sus brazos. ─ ¿Podré dormir aquí? Estoy cansaaado~

El ojirubi se acostó a su lado, mirándolo con una sonrisa. ─ pero dormirás conmigo, no pienso dormir en el piso ni en el sofá.

─ está bien, pero quiero el lado de la pared.

Pasados los minutos, Yamikumo se quedó dormido allí, ya que estaba exhausto por el largo viaje que había echo.

Gogo estaba al borde de la cama, admirando el rostro calmado de Mikumo.

Estaba contando sus pecas.

« siguen siendo ocho.. »

Para aquellos ojos rojos, Yami era simplemente hermoso, en su rostro habían estrellas, en sus ojos una selva y en su reboltoso cabello un habitad donde solo él quería estar.

está aquí

Su alfa ronroneó suavemente ante la vista.

Su alfa..

Siempre será algo que no puede describir, el como él y su animal aman a aquel chico es inentendible, Yamikumo es un beta normal, no tiene un olor dulce o llamativo, tampoco tiene un cuerpo donde resalten curvas o algo parecido, cosas así son características de un Omega.

Novio De Un AlfaWhere stories live. Discover now