Hiccup Y HTTYD one-shots

No me sonrojé - Astrid Centric

Resumen: Astrid comienza a ser la crush de alguien gracias a los azares de la vida, a ella le gusta hacerlo sonrojar.

AU Moderno

Parejas: Astrid Hofferson x ¿?

Advertencias: Ninguna.

Notas: Este oneshot fue un reto de escritura. La idea es no saber quien es la persona que tiene un crush con Astrid hasta el final, espero haber cumplido con el reto.
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Todo comenzó en un local de pizzas, el mejor en Berk y el más famoso "Dragon Pizza". El lugar era el sueño de todo niño y niña, de adultos y adolescentes, además de funcionar como centro de reuniones y bueno, no mentiría es su lugar favorito para comer ¡adora los premios en el paquete infantil! Fue ahí en donde su crush por la rubia con mucha actitud comenzó.

Ya se conocían desde niños e incluso podría decirse que ahora eran amigos o conocidos. No habían hablado nada personal entre ellos ni siquiera habían tenido la oportunidad de encontrarse solos y ellos tampoco hacían el esfuerzo por contactarse aparte, a pesar de tener su número celular y perfiles en redes sociales... Bueno, al menos por su parte de él, si la tenía entre sus contactos.

Esa tarde, se festejaba el día del niño por lo que Dragon Pizza estaba atiborrado de niños por todos lados. Él estaba de mal humor, al igual que ella, ya que esperaban por su turno en la fila. Ambos se dieron la espalda al percatarse de la presencia del otro, no querían tener que hablarse así que fingirían que no se vieron. Los niños corrían y gritaban, los empujaban, jalaban, lloraban, se quejaban, preguntaban una y otra vez lo mismo, ya estaban al borde de la desesperación.

Al fin llegó el turno de ambos para ordenar.

- Buenas tardes señor o señora, bienvenido o bienvenida a Dragon Pizza ¿qué desea ordenar? - a él, le tocó un empleado con tono algo monótono y sin expresión alguna, a lo que levantó una ceja.

- Si, como sea... Quiero ordenar una pizza grande con peperoni, jalapeño, salchicha, piña y pimientos, con orilla de queso - dijo indiferente sacando la cartera de su bolsillo trasero.

- ¡Hola, amiga! ¡Me encanta tu blusa!¡Bienvenida a Dragon Pizza! ¿Qué deseas ordenar? - una muy energética muchacha atendió a Astrid, quien levantó una ceja, sacudió su cabeza.

- Gracias. Quiero una tamaño grande de peperoni, jalapeño, salchicha, piña y pimientos, con orilla de queso - justo cuando ella decía su orden, también él.

Ambos se miraron con ojos grandes, sorprendidos de pedir exactamente lo mismo cuando no tenían ni idea.

- Hey... - algo nervioso habló el joven - Astrid, hola. Hola, Astrid ¡vaya sorpresa! No te vi... - mentiroso.

- Hey... - la muchacha se rascó la nuca - Yo si te vi pero no quise hablarte - se cruzó de brazos sonriendo victoriosa, haciendo que el otro le mirara sorprendido. Honestidad brutal - Aunque admito que es una sorpresa verte aquí y ordenando lo mismo que yo.

- ¿Por qué? Me gustan los dragones y la pizza, ¿ordenando lo mismo que tú? ¿Disculpa? Tu eres la que ordenó lo mis o que yo - le vio mal.

- Claro que no. Bueno, de la pizza no sé pero no sabes tanto de dragones y puedo retarte - levantó una ceja queriendo provocarlo.

- ¡Amigos! - llamó la empleada - Tengo una mala noticia, no sé si fue el destino pero ambos pidieron lo mismo y ya no tenemos ingredientes suficientes para preparar ambas, sólo podemos hacer una.

- ¡La mía! - los dos le gritaron al mismo tiempo, se vieron furiosos, enseñando sus dientes.

- ¡Yo la merezco más! - gruñó Astrid.