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Los años seguian pasando, y el pequeño Eli estaba a pocos dias de cumplir 11 años. Laia era una de las mas emocionadas por el tema, estaba armando una gran fiesta para su hijo, y Derek le seguia el juego, por lo que todo iba a salir perfecto.

—No amor, debe ser rojo— Dijo Laia tomando el pote de pintura

—Pero va a quedar mejor en azul, si queremos luego quitar el rojo va a ser un martirio

—Pero a Eli le gusta el rojo

Estaban hace 30 minutos dando vueltas, pues Eli queria pintar su habitacion, y ellos le habian dicho que comprarian la pintura. Pero como el pequeño no les habia dicho el color, ambos adultos estaban dando miles de vueltas para decidirse.

—¡Derek!— Se quejaba Laia al ver que el lobo no la dejaba tomar la pintura roja

—Laia ya te dije que n...— Fue interrumpido por los labios de Laia sobre los suyos

Mientras los años pasaban, la menor sabia como manipular y chantajear al Hale, para hacer lo que ella queria, y una de sus formas favoritas era besandolo y no dejar que hable, logrando que se olvide de todo.

—¿Vamos, amor?

—Si, vamos—Laia con felicidad puso los grandes tarros de pintura roja en el carro y fueron a pagar.

Durante el camino la loba observaba la lista donde tenia anotadas todas las cosas que debia comprar para el cumpleaños de Eli, la mayoria ya estaban tachadas, pues ya la habia comprado, solo faltaba el pastel. Mientras tanto Derek tenia una de sus manos en el volante y otra en el muslo de su novia, dejando dulce caricias.

Al llegar a la escuela donde debia ir a buscar a Eli, la menor fue la primera en bajar, seguida de Derek, quien paso su brazo por la cintura de Laia mientras caminaban hacia la escuela. Al llegar a la entrada tambien habian algunos padres esperando a sus hijos. 
La gran cantidad de niños no tardo mucho en salir, y entre ellos venia un niño hablando con otros 3, un niño muy guapo de cabello oscuro y ojos verdes, y gran sonrisa.

—¡Eli!—El niño giro su cabeza, viendo a su madre quien lo habia llamado, le hizo un pequeño gesto de que lo esperara y se despidio de sus amigos, antes de correr hacias sus padres— Hola, cachorrito— Dijo Laia besando la frente de su hijo

—Hola, mamá

...

La casa Hale era un completo desastre, al menos eso creia Laia, la menor se encontraba cocinando el pastel de cumpleaños de Eli, habia decidido hacerlo de chocolate y crema, y cubrirla de crema color rojo. 
La mesa estaba llena de cupcakes decorados delicadamente por la castaña. La cara de la Stilinski estaba un poco manchada por la harina, el colorante y la crema, pues habia estado toda la mañana horneando, mientras Derek decoraba en gran jardin que tenian, para la fiesta de cumpleaños de Eli, que era esa misma noche.

—¡Diablos!—Se quejaba la castaña ya que la crema no quedaba del color que ella queria

—Tranquila—Le susurro Derek llegando detras de ella

—Estoy muy estresada— Lloriqueo las castaña dandose vuelta para ocultar su rostro en el cuello de su pareja

—Lo se— Le contesto el mayor, ya que se podia sentir por toda la casa como la loba apestaba a estres y ansiedad— Debes mantener la calma, lo haces genial

A pesar de que estaban hablando de la fiesta de Eli, Derek le decia que su trabajo de madre lo estaba haciendo genial.

—Quiero que todo sea perfecto

—Y lo va a ser, tranquila— Derek dejo un beso en la mejilla de Laia, y la menor cerro sus ojos apoyando su cabeza en el hombro de su pareja, sintiendo la calidez que le brindaba.

Labyrinth_ Derek HaleDonde viven las historias. Descúbrelo ahora