Tras un episodio depresivo, la madre de Lara decide mudarse de regreso a Forks. Allí se reencontrará con su prima, Bella y su tío, Charlie.
Pronto Lara descubrirá por qué todos actúan tan raro y tras un evento inesperado, terminará metida en el medi...
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Paul apareció antes de que se cumplieran las tres semanas. Por supuesto, ella ya sabía que él había regresado, pero por alguna increíble casualidad no se habían cruzado nunca, (la estaba evitando), lo cual, si le preguntaban a Lara, era una estupidez. Pero bueno, entendía que para él, el... vínculo, era más fuerte, así que debía ser duro para él, mas teniendo en cuenta que parecía ser un mujeriego. Lara no le dio importancia, fingió que no había ocurrido nada, y continuó con sus actividades normales. Pero Paul había aparecido, y no precisamente de la mejor manera. Ella sentía su mirada siempre, pero no de una buena forma, de la... coqueta o seductora, sino como si él le tuviera tanto asco y odio que no podía evitar sorprenderse por lo asquerosa que ella podía llegar a ser. A ese punto.
Olivia lo había descripto perfectamente aquel martes en el almuerzo: "Te mira como yo miro a mi hermano devorar sus albóndigas en el spaghetti... asqueada, pero al mismo tiempo no puedo dejar de verlo. Es algo fascinante, si me preguntas". Cuando terminó su oración, Paul se levantó abruptamente de su mesa y se alejó de sus amigos, saliendo por el pasillo. Lara sabía que él había escuchado todo, por su conveniente oído super desarrollado, y por aquella misma razón le incomodaba tanto hablar de Paul en el almuerzo cada vez que sus amigos le preguntaban.
La desgracia es que sus encuentros eran también fuera de clases, porque ahora Lara frecuentaba mucho más seguido a la manada. Ellos le agradaban, y Jake, Seth y Leah eran parte de eso, así que ella de alguna forma entró. No pasaba un día en donde Seth no le insistiera a Lara con ir a casa de Emily, porque ella la extrañaba.
Un viernes luego de clases, Lara y la manada se encontraban almorzando en lo de Emily. Allí estaba también Paul, que por supuesto, fue el primero en irse.
El atardecer estaba cayendo y Lara y Jake eran los últimos en quedar allí junto a Sam y Emily. Antes de despedirse, cuando Lara estaba a punto de cruzar el umbral de la puerta, Sam la detiene.
—Lara... —llamó Sam, ella giró sobre sus talones y lo miró, esperando a que continuara. Sam se aclaró la garganta, parecía un poco incómodo. —Le di la orden a Paul de que te acompañara a clases y a tu casa luego de la escuela —informa. Lara se queda unos segundos en silencio, procesando aquello.
—¿Por qué? Estoy segura de que es lo último que él quiere, y para ser honesta, creo que yo también.
Sam frunce los labios.
—Es cierto, protestó bastante cuando se lo dije, pero no se trata de lo que quieran, sino de lo que necesitan, y tal vez tú no, pero Paul ha empezado a pasarla bastante mal.
