De visita en azkaban

963 113 19
                                    

Su primer año había transcurrido con la mayor normalidad posible, ganó buenas alianzas con casas importantes como la Zabini, Greengrass, Parkinson, Nott, Longbottom, etc. Ahora se estaba preparando par su siguiente movimiento, uno que posiblemente le causaría mucho dolor.

— ¿Estas segura de esto? — pregunto bastante preocupada Narcissa Malfoy

— Sí — su respuesta sonó más tosca de lo que debería pero ahora eso no era lo importante — Necesito conocer al ser que contribuyó a mi nacimiento, debo de verlo cara a cara, mi principal propósito es atormentar más su miserable vida, se lo debo a mi madre

La mujer no se encontraba muy segura de lo que se sobrina estaba haciendo, pero una parte de ella sabía que era necesario hacer esto, finalmente padre e hija se verían a los ojos después de mucho tiempo. ¿Cuál sería la reacción de ambos?, ¿Qué pasara en esa reunión?.

Sus preguntas se vieron interrumpidas cuando el auror les dio el permiso para entrar a la prisión.

— El permiso solo es para la señorita Lyra Katherine Black Grindelwald — Narcissa abrió los ojos alarmada — Usted no puede pasar más allá, lo siento mucho, Madame Malfoy

— No te preocupes tía, se cuidarme sola — miro hacía los ojos de la rubia y la tranquilizo — Nada malo me ocurrirá, guíe el camino, por favor

Uno de los aurores de guardia la encamino entre varias celdas, cuando llegó a la 568 se detuvo.

— Aquí es — aviso — Les daré algo de privacidad, la de Bellatrix Lestrange es cuatro celdas más adelante, tienes 45 minutos para visitar a ambos

Después de decir aquello se marchó.

Trago seco y se acerco a los barrotes.

— Hola — su voz hizo que el prisionero se acercara y la pudiera observar mejor — ¿Me recuerdas?

— Katy — susurro impresionado

— Por lo visto no lo haces — la amargura lleno las palabras de la niña — Soy Lyra, mucho gusto padre

La boca de Sirius se seco.

— ¿Debería de seguir llamándote así? — cuestiono — Yo creo que no hay necesidad de eso ¿verdad?

— Lyra, ¿Cómo?, ¿Qué haces aquí? — pregunto viéndola estupefacto

— Conocer al donador de esperma que me dio la vida — respondió sin dudar — Ya sabes, algo muy normal hoy en día, creo que si fuera Harry Potter el que te visitara hubieras reaccionado muy diferente, tal vez más efusivo, yo solo soy tu hija, nadie importante comparado con el elegido

— ¿Qué sabes de él? — pregunto desesperado — ¿Él esta bien?

— Por el momento lo esta — informo sonriendo — Pero quien sabe, los accidentes ocurren más a menudo de lo que te puedas imaginar

— Lyra lo lamento...— la niña no lo dejo terminar

— ¿Qué lamentas?, el haber sido un maldito con mi madre, oh ya se, el haber preferido salir corriendo a auxiliar a los Potter cuando mi madre y yo corríamos peligro, ya se, tal vez lamentas el pedirle a Dumbledore dejarme en un maldito orfanato muggle...donde me trataban como la mierda — el reclamo era duro de oír y de decir — ¿Cuál de esas cosas lamentas?, creo que debes sentirte de lo peor al saber que de que cualquier forma no lograste salvar a nadie, ni a los Potter, ni a mi madre, y por lo visto, tampoco pudiste hacer algo por ti

《Nada de lo que hiciste valió la pena, ¿Cuánto fue lo que perdiste y cuanto lo que ganaste?, pero ve el lado bueno, tenemos una cosa en común, ambos vivimos un completo infierno al mismo tiempo...tú en azkaban y yo en el orfanato, no te puedes imaginar todo lo me hicieron ahí, todo lo que sufrí》

La Última Black (En Edición)Where stories live. Discover now