ꪔ̤̮ milk & cookies; kth + jjk

x

—un poco de pomada...enrollamos por aquí y aquí también... ¡y listo!— exclamó el alfa alzando al bebé al aire. —listo yeyo, ahora sí eres un bebé limpio y bonito.

besos esquimales fueron dejados en los cachetes del pequeño yeonjun en cuanto su padre lo bajo de nuevo a la seguridad de sus brazos. el bebé rió contento por la atención y las cosquillas que le producía su papá, mas taehyung estaba satisfecho de encontrar solo el olor a limpio y no a pañal sucio en su bebé.

—gracias por cambiarlo, tae.— escuchó tras de él. jungkook salía del baño de la habitación después de haber tomado una merecida ducha.

—no es nada.— respondió sin despegar la vista del bebé, sonriendo en cuanto notó que yeonjun abrió más los ojos al percibir la presencia de su otro padre, con un brillo bonito en ellos que decían más de lo que podía expresar con balbuceos.

—parece que alguien quiere que lo cargues.

no tuvo que decirlo dos veces, pues de inmediato jungkook se acercó a tomar al cachorro por debajo de las axilas y elevarlo a su pecho, tratando de acomodarlo contra sí.

hizo un mal movimiento.

creyó estarlo sosteniendo bien y con firmeza, pero en el momento en que intentó acomodarlo mejor algo pasó.

de pronto la respiración se le cortó y su pulso se incrementó al sentir como el agarre se aflojaba y el bebé resbaló de sus manos.

fueron solo unos cuantos segundos en los que todo pasó demasiado rápido. con el corazón en la garganta, intentó volver a sostenerlo antes de que cayera fuera de su alcance pero no logró afianzarlo.

taehyung fue más rápido.

pudo reaccionar a tiempo y agacharse lo suficiente para tomar al bebé antes de que éste cayera, evitando así que se hiciera daño.

un llanto se escuchó luego de eso.

el movimiento tan brusco y el repentino ambiente sumamente tenso hicieron llorar estruendosamente a yeonjun, y tal vez que taehyung lo tomara con fuerza no servía en realidad para ayudarlo a relajarse, pues apenas salió del susto lo meció sin la delicadeza de siempre en un intento de apaciguar su llanto.

el olor a miedo inundó la antes cálida habitación, y taehyung no sabía si era por él, por jungkook, el bebé o una combinación de todos.

—estás bien, estás bien. no pasó nada, estás a salvó.— recitó como un mantra, aunque era más un intento de convencerse a él mismo de que no le había pasado nada.

-—kook, ¿estás bien?— pero nadie le respondió. el sonido de los llantos de cachorro era lo único que resonaba en aquel cuarto y jungkook seguía parado con los ojos fijos en el bebé, luciendo asustado y claramente aún en estado de shock.

—amor, ¿estás bien?— repitió estaba vez más suave, tomando con una mano su barbilla para hacer que lo mirara directamente. —el bebé está bien, no pasó nada.

y cuando le quiso acercar al bebé para asegurarle que no había salido lastimado jungkook se alejó, repeliendo la cercanía a yeonjun. sus ojos se tornaron púrpuras y brillosos en un indicio de que estaba retenido sus emociones, tal vez no queriendo alterar más al bebé.

"otra vez lo dejaste caer jungkook, ¡mira todo el desastre que hiciste!, limpiaras todo tú solo. ¿¡acaso no puedes hacer algo bien!?"

—n-no, fue mi culpa...debí agarrarlo bien.— taehyung negó de inmediato, queriendo acercarse de nuevo. jungkook no lo dejó. —s-se pudo lastimar, si se hubiera lastimado-

—pero está bien.— lo interrumpió. —fue un accidente, me pudo haber pasado a mi también. lo importante es que no pasó a mayores y yeyo está bien.

pero el omega no estaba convencido de ello.

[...]

taehyung lo encontró durante la tarde hecho una bolita en su nido.

terminó pidiendo el día en el trabajo, pues sabía que jungkook no estaba bien y, aunque el omega no quiso explicarle el por qué, no podía dejarlo solo después de lo que había pasado en la mañana.

para alivio de ambos aquello no pasó más allá de un terrible susto para los tres. durante el resto del día el bebé actuó como si nada hubiera pasado, pero jungkook era otra historia.

—¿puedo?— preguntó taehyung antes de entrar en el desordenado nido. vió mover lo que suponía era la cabeza del omega debajo de las sábanas y lo tomó como una afirmación.

subió con cuidado de no mover mucho las prendas en la cama y se acomodó abrazando la espalda del bulto en que se encontraba jungkook.

—bonito, has estado triste todo el día, ¿quieres hablar de lo de la mañana?

jungkook se volteo, encogiéndose así contra el pecho de su alfa aún entre las mantas, buscando sentir su aroma en una forma de intentar relajarse a si mismo. no respondió verbalmente la pregunta, solo negó con la cabeza.

—¿puedo saber por qué?— pero de nuevo solo le respondió el silencio. —¿sabes que no fue tu culpa, cierto? no fue intencional.

—fue mi culpa.— dijo bajito. taehyung juro sentirlo temblar bajo de él. —se supone que sé hacer algo tan básico como cargarlo. no lo hice bien, eso casi nos cuesta que yeonjun se lastimará.

—si me hubiera pasado a mí, si se hubiera caído de mis brazos, ¿me habrías hecho la culpa?

jungkook salió del refugio de su pecho y las mantas, viéndolo a los ojos en cuanto terminó de formular la pregunta. el alfa solo apretó los labios, apreciando triste las esquinas rojizas de aquellos ojos que lo miraban evidenciando que había llorado, su nariz tan colorada como podría estarlo y sus labios en su puchero que solo quiso abrazarlo fuerte hasta quitarle la tristeza y culpa a su novio.

—no, nunca lo haría. nunca te culparía de algo así.

—yo tampoco lo hago. no pienso que tengas la culpa del accidente de la mañana. fue solo eso, un accidente. nos pasarán más seguido de lo que querramos y debemos aprender a reaccionar de la mejor forma para poder cuidar de yeyo.

—¿pero cómo sé que puede estar seguro conmigo, tae?— y ahí estaba otra vez ese nudo en la garganta que tanto odiaba. —cuando tú no estás...cuando estoy solo, y-yo solo quiero que llegues pronto a casa por que todo el tiempo quiero llorar. desde que yeonjun nació, solo tengo un maldito nudo que no termino de tragar y s-siento que soy una carga más para tí...¿cómo sé que no lo voy a arruinar de nuevo, tae?

supo que estaba llorando cuando sintió las manos de taehyung limpiar su rostro.

—no lo vas a arruinar, kook. lo has estado haciendo muy bien desde el día en que nació yeonjun, ¿lo sabías? cambiaste todo tu mundo desde el primer instante en que supiste de su existencia.— le dijo con ternura. —te huelo triste cuando llego del trabajo y aún así has cuidado muy bien de nuestro hijo todos los días. yo estoy muy orgulloso de tí y no hay nadie con quien podría estar más seguro yeyo que contigo.

fue lo que necesitaba.

aún no terminaba de sacar esa espina de su corazón, pero fue suficiente para darle la confianza de desahogarse un poco más y llorar sin pena frente al alfa, algo que era muy regular últimamente.

taehyung tenía algo especial, él sabía.

desde que se conocieron fue así, había algo en él que le hacía saber que no lo juzgaria, que podía contarle todo lo que acribillaba su mente y él lo escucharía. también sabía que taehyung era muy bueno leyendo entre líneas, que lo conocía tan bien que entendía cuando no le estaba diciendo completamente la verdad y que la mayor parte del tiempo era por que no sabía cómo decírselo.

por eso no le sorprendió lo que el alfa le dijo cuando terminó de llorar.

—amor, tenemos que hablar.