Todo por un beso (Mechoa)

Engaños

Las noticias seguían inundadas del triunfo del Tri sobre la Scaloneta, lo hinchas mexicanos no paraban la fiesta tanto en México, cómo en Qatar e inclusive en países donde los mexicanos vivían o estaban.

_Bendito sea San Memo_ una persona hablo mientras tomaba una cerveza en un bar en Barcelona, por su asentó era claro que era mexicano.

_Lo se, atajarle de esa forma a los argentinos y wey, a Messi_ su acompañante tomo de su trago_ además de el triunfó Paco Memo también se llevó su premió _ soltó una risita.

La persona a un lado de aquellos dos escuchaba atentamente la conversación, había salido para distraerse de todas las notificaciones y llamadas que recibía de conocidos y amigos para contarle sobre el triunfó de México, no había visto el partido por temor de sufrir de un ataqué de coraje por el desempeño de los jugadores, pero después de que le dijeron que ganaron decidió celebrar a su manera, sólo con un trago en su vaso, después de todo y lo último que paso con la selección sabía que no sería nuevamente bienvenido, ni él ni sus felicitaciones.

_Oye si, tremendo becerro que se hecharon Messi y Ochoa_ soltaron una risa.

Su mirada subió de inmediato y miró a los dos platicadores.

_Disculpen_ les llamo y estos voltearon_ ¿a qué se refieren con el "becerro" de Messi y Gui...Ochoa?_ pregunto.

_Ay compa, pues de que más _ uno de ellos tomo su celular y mostró una publicación, justamente una foto del choque que terminó en beso entre ambos jugadores_ fue accidental pero la gente es pues_ soltó una risita_ intensa, ya hasta hay un grupo de gente que los empareja_ explicó.

El alfa se quedó mirando atentamente la foto, esa imagen y las que seguían de cuando ambos cayeron al suelo mirándose, el rostro de ambos sonrojados y al final una de Messi sonriendo tocándose los labios lo hicieron sentir un nudo en su estómago.

_Oiga, ¿Usted es Rafa Márquez?_ cuestiono uno mirándolo fijamente.

El mencionado rápido se puso de pie y acomodo su gorra y lentes negros, pagó sin ver si dejaba de más y salió de inmediato.

Sus ojos se iban cristalizando con cada paso que daba en dirección a su auto, su mente era un revoltijo de pensamientos y recuerdos.

_Esta camisa me gusta, se parece mucho a la que tienes_

_Lo hiciste bien cariño, solo hay que esforzarnos más_

_Ganes o pierdas, te amo_

_Si, quiero pasar toda mi vida contigo_

_Rafa, quiero hablar_

_No nos hemos visto desde hace siete meses, ¿No tienes tiempo o no quieres?_

_No es mi culpa que hayamos perdido, somos un equipo, no solo yo contra el rival_

_Te amo pero tú actitud no me está gustando_

_¡Solo quiero que hablemos!_

_¿¡Si me ibas a engañar para que me pediste matrimonio!?_

_Adios Rafael, espero esa persona si sea alguien a tú altura_

Las lágrimas ya corrían sin control por sus mejillas cuando subió a su auto, golpeó el volante con fuerza apretando sus labios en un intento de que su grito no saliera.

_Te extraño Memo, te extraño mi amor, perdón, perdoname_ suplicaba en agonía por el dolor en su pecho.

Dolía, dolía mucho ese error del que fue el principal autor.