El Afecto del Rey Demonio

Parte 1

Luo Binghe cerró los ojos.

El poderoso rey demonio había escuchado con atención todo lo que su antiguo maestro tenía que decir. Todo lo que le había pasado, todo lo que había tenido que pasar para llegar a ser el señor de Qing Jing.

No eran tan diferentes, pero a la vez eran completos opuestos.

Shen Qingqiu había pasado por grandes vejaciones que justificaban lo que había hecho a la familia Qiu. Ahora Luo Binghe entendía todo, entendía por qué Shen Qingqiu no dormía en casa, por qué frecuentaba los burdeles, por qué no quería estar cerca de los discípulos o jóvenes maestros varones.

"¿Por qué no dijiste nada?"

Shen Qingqiu resopló con sorna.

"En ese entonces, ¿me hubieras creído?" Shen Qingqiu alzó una ceja, Luo Binghe guardó silencio. "Eso pensé, nadie lo habría creído. Nadie lo creía. Y me sorprende que lo creas ahora, ¿acaso haber visto a ese otro Binghe ser tratado con cariño por su shizun te hizo pensar que yo seré así? Ese otro maestro seguramente no pasó por lo mismo que yo."

"No, no, no puede ser, tiene que haber otra razón por la que las cosas allá son diferentes. Otra razón por la que tú..." Luo Binghe se levantó de su trono y comenzó a caminar por la estancia como una fiera encerrada. Shen Qingqiu lo miraba algo entretenido.

De pronto el rey demonio se detuvo, se giró hacia Shen Qingqiu y avanzó hacia la vasija donde estaba encerrado.

"Ya tengo la solución."

"¿Qué?"

Luo Binghe lo tomó del mentón y con rudeza lo hizo abrir la boca, algo resbaló por su garganta y Shen Qingqiu perdió el conocimiento.

***

Liu Mingyan se sentó en su sofá, su dama de compañía estaba de pie a su lado.

Una a una, las esposas del rey demonio llegaron a su estancia a presentar sus respetos a la Noble Consorte Liu, que era por el momento la consorte principal hasta que una Reina Demonio fuera nombrada.

Lo cual podría no suceder nunca, considerando que nadie se atrevía a desafiar a Liu Mingyan excepto la Espléndida Consorte Sha Hualing. Uno pensaría que un día terminarían matándose la una a la otra con su rivalidad.

Hablando de la Consorte Espléndida, fue la primera en llegar al Palacio de Violetas, hizo una exagerada reverencia y se sentó en su sitio, sin mirar ni dirigirle la palabra a la Consorte Noble.

La segunda de las consortes reales, la Consorte Pura Ning YingYing llegó después. Saludó educadamente a ambas y tomó su sitio frente a la Consorte Espléndida, a la derecha de la Consorte Noble.

Después llegó la Consorte Agraciada, Qin Wanyue, y la Consorte Elegante, su hermana menor Qin Wanrong. Ambas saludaron a la Consorte Noble y a las Consortes superiores antes de tomar sus lugares.

Qiu Haitang llegó después. Ella ostentaba el título de Esposa Virtuosa, siendo la cabeza de las concubinas menores, que llegaron tras ella en grupo. Después de las concubinas menores seguían las Damas Hermosas, luego las Damas Talentosas, las Damas Florecientes y las Damas Inocentes, que eran jóvenes esposas que aun no habían dado un hijo a Su Majestad o pasado la noche con él.

Todas llegaron y presentaron sus respetos a la Consorte Noble y a las Cuatro Consortes Reales. Haciendo reverencias y hablando todas al mismo tiempo.

"Saludos Consorte Noble, Consortes Reales. Que tengan larga vida y prosperidad."

La Consorte Noble Liu sonrió bajo su velo.

"De pie, todas."

"Sí." Dijeron al mismo tiempo. Todas las consortes tomaron asiento. Té fue servido para todas y refrigerios para que pudieran escuchar los anuncios de esta reunión.