¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
El sombrero de la pobre mamá oso salió volando por el aire y el pequeño Gordi corrió por él lo más rápido que su pequeño cuerpo le permitía.
Pero el sombrero acabo dentro del bosque, llevado por la brisa del aire, gordi estaba triste, no pudo traer de vuelta el sombrero de mami.
Al darse la vuelta derrotado por su miedo al bosque un ruido sonó del fondo de los arbustos, el corazón de Gordi empezó a latir fuerte del miedo, sus piernas temblaron, pero él no se movía, no gritaba.
El ruido estaba más cercas, y se escuchó que algo salto hacia él desde dentro de los arbustos.
Gordi estaba asustado, sus ojos cerrados y su nariz arrugada por el miedo, las lágrimas estaban a punto de salir, pero sintió algo en su cabeza.
Algo grande, pero liviano que se caía de su cabeza por el tamaño, abrió los ojos para verse con el sombrero de mami oso.
Estaba impresionado, subió el sombrero para ver quién lo trajo y se encontró con una pequeña osa de pelaje color _____, era esponjoso y buen cuidado aunque con ramas y hojas pegadas a él.
- uy perdona si te he asustado - te alejaste un poco del el pequeño oso rosado.
Este solo se quedó viendo un poco más - ¿cómo es que has salido del bosque?- este dejo de lado el tema del sombrero y se concentró en ti - oh dios, ¿estás lastimada?, ¿¡Te has encontrado con un unicornio!?, Debería de llevarte con mamá, ella sabrá que hacer -.
Este tomo tu mano, pero no te moviste.
- Jajaja, no te preocupes, no es nada de eso, yo vivo dentro del bosque.-
Gordi tomo tu mano con cuidado, estaba asustado, ¿cómo es que sigues viva? Él sabía que el bosque era un lugar celestial, pero le daban miedo los unicornios.
-Por cierto pequeño rosita, ¿de quién es ese sombrero? O ¿no es tuyo?-.
-no me llamo pequeño rosita, y el sombrero es de mi mami, se le ha volado con el aire-.
-oh bueno y ¿como te llamas?-
-me llamo gordi, un gusto-
- un gusto, soy ____ -
Gordi y tú se sentaron a hablar de cosas que les gustan como los arándanos salvajes, eran sus preferidas, ya que eran mucho más jugosas que las plantadas.
Pero un grito llamo su atención - ¡¡Gordi Querido ver a comer!!- gordi se levantó rápido y miro que su mamá era quien gritaba.
- ow me tengo que ir ____ -
-está bien gordi, nos veremos luego, pero antes - pusiste el sombrero en su cabeza - que no se te olvide, que el aire se lo puede llevar -.
Los 2 se despidieron y se fueron por caminos separados, tú por el bosque y él hacia las casas.
Se siguieron viendo muy seguido, asta que la mala noticia paso y Gordi no quería salir de casa alguna vez.
