𝓢𝓸𝓵𝓸 𝓽ú 𝔂 𝔂𝓸 (Bakugou Katsuki y tú)

36

Ya estaba anocheciendo, estábamos en mi habitación asignada en aquel hospital.

Estaba recostada en aquella cama y mi esposo estaba en el sofá de un lado

-Estoy muy feliz, cariño- volteé a verlo

-Yo también, todo mejorará.

-Estoy emocionada, por todos los planes que tenemos.

Él se puso de pie, se acercó cuidadosamente a mi y besó mi frente mientras acariciaba mi mano.

-Todo estará bien. Te amo demasiado, cielo

-Yo más...mucho más

Nuestro momento nuevamente fue interrumpido por nuestros increíbles amigos

Ashido, Hanta, Ejiro y Denki

-¡Hola, chicos!- entraron alegres

-¿Chicos?- hablé confundida, no sabría que vendrían

-Hola Sao- saludaron al par

-¿Qué hacen aquí...?- le pregunté a mi esposo

-Oh...¿no nos quieren con ustedes?- hizo una cara de indignación y tristeza Kaminari, recargándose en el hombro de Hanta

-No, no los queremos aquí- afirmó mi esposo, sacando unas cuantas risas

-Por su puesto que agradecemos que estén aquí...solo que me sorprendí...- hablé sonriendo

-Estaremos aquí hasta mañana, en la operación y hasta que salgas de aquí, Sao- habló mi amiga, Mina

-Muchas gracias, chicos. Gracias, Ashi- ella se acercó a mi y yo la abracé

No pude evitar llorar

-Eso es lo que hacen los amigos, ¿no?- volteó a verme Hanta

-No encuentro las palabras suficientes para agradecerles

-No hay nada que agradecer, Sao- se acercó Kaminari

-No se como es que me consideran una amiga...no los merezco

-Una amistad no necesita conversaciones a diario, no siempre se necesita estar juntos. Mientras la amistad viva en los corazones, los verdaderos amigos siempre estarán- me abrazó Ejiro

Y yo comencé a llorar con aún más fuerza

Nosotros seis comenzamos a platicar, contar chistes, burlarnos una que otra vez de algunas anécdotas y a jugar un juego de "uno" que Kaminari trajo en su chamarra de mezclilla

-Estoy muy ansiosa por la operación, tengo miedo, chicos- les confesé

-Todo estará bien, chica, ten confianza.- mi amiga me apoyó

-Debes estar tranquila Sao, todo estará bien- decían los chicos

-Tranquila, ¿si?- se acercó mi esposo a mi, acariciando mi mejilla delicadamente -Salgan- se dirigió mi esposo a los chicos y ellos inmediatamente asintieron y lo hicieron

-Cada vez que me preguntó el por qué nos conocimos, llego a la conclusión de que el amor y la vida me debía tanto que decidió pagarme contigo.- recargó su frente en mi frente -Te amo demasiado, nunca lo olvides. ¿Si?

-Yo igual te amo muchísimo a ti, amor, mucho.

-Nunca olvides lo mucho que te amo, Saori Takahashi.

-Tú nunca me olvides...- lo miraba y nuestros ojos se cristalizaban -siento que moriré, Kats. Así que, por favor, consíguete otra esposa si lo hago

-No- contestó y su voz se escuchaba entrecortada

-¿Por qué no?- acaricié su rubio y puntiagudo cabello

-Porque sería no complir con la petición que me hiciste

-¿Petición? ¿qué petición?- hablé dudosa

-Sobre que serías mi último amor.