Sunshine (sunsun)

Noche

Ahora que sus padres sabían sobre la relación que tenía con Sunoo, se sentía diferente invitándolo a quedarse con él, hoy cuando habían llegado su madre no dejaba de lanzarle sonrisas cuando los veía interactuando haciendo que Sunghoon se sintiera observando. Afortunadamente, por la tarde había salido con Yeji, estarían visitando a un familiar durante el fin de semana, su madre iría sola originalmente pero Yeji aprovechó para acompañarla y visitar a sus amigas, su padre llegaría al día siguiente por la mañana después de dejarlas en Gyeonggi.

Sunghoon invitó a Sunoo a quedarse con él, por lo que aprovecharon para utilizar la sala de estar para ver películas de terror, porque por alguna razón que desconocía a Sunoo le parecían entretenidas, él no era tan fan ¿a quién le gustaba asustarse?

-¿Qué esperaba ella que iba a encontrar?

-Obviamente no un espantapájaros poseído.

Ambos se mantenían atentos a la película, Sunoo estaba sentado y cubierto con una manta mientras que Sunghoon había pasado sus piernas sobre su regazo ya que estaba acostado en el sillón, en un par de ocasiones casi había volteado el tazón con palomitas de Sunoo cuando se movía.

Cuando la película estaba en una escena que podría considerarse un poco aburrida, la televisión se apagó al igual que todas las luces de la casa, los chicos se quedaron quietos por unos segundos esperando que la energía volviera pronto pero eso no pasó.

-¿Hyung?

-¿Umh?

-¿Tienes una lámpara?

-Si.

Sunghoon no quería decirle que tenía miedo de ir por ella.

-¿Y podemos usarla?

-¿Para qué?

-¿Cómo que para qué? Para poder ver.

Sunghoon suspiró y por fin se levantó del sillón -bien, iré por ella.

Comenzó a caminar lentamente hacia su habitación en el piso de arriba, tenía una linterna que había conseguido para el viaje escolar y si encontraba unas pilas seguramente también podían usar su lightstick. Conocía su casa perfectamente pero aún así se sentía extraño el caminar en medio de la oscuridad, tardó un poco más de lo que esperaba en encontrar lo que buscaba y volvió abajo.

-Tengo una lightstick también, podemos usar las dos- con la linterna pudo ver que Sunoo ya no estaba en la sala -¿Sunoo?

No hubo respuesta así que lo más lógico para él fue que estuviera en el baño o en la cocina pero mientras pensaba en ello sintió que un par de manos le tocaban la espalda lentamente -¡Sunghoonnie!

El grito que dió Sunghoon hizo que Sunoo comenzara a reír.

-¿Qué te pasa? me asusté- mantenía una mano sobre su corazón.

-Esa era la idea- dejó de reír pero mantuvo una sonrisa triunfal y enredó sus brazos en la cintura de Sunghoon -perdón.

-No te perdono.

-Por favor... - comenzó a hacer pucheros como siempre que quería convencerlo, sin embargo se interrumpió cuando afuera de la casa se comenzaron a escuchar gritos y ambos se miraron con ojos asustados.

-¿Deberíamos revisar?

-No- de todas formas ambos se acercaron a la ventana pero antes de que pudieran asomarse alguien golpeó la puerta haciendo que se asustaran nuevamente.

Sunghoon abrió con mucho cuidado, era el vigilante quién estaba visitando a todos los residentes para avisarles que les tomaría un par de horas restaurar la electricidad y que la mascota de una vecina estaba perdida y había salido a buscarla.

-Bueno, al menos ya sabemos porqué gritaban- dijo Sunoo dejándose caer nuevamente al sillón, aliviado de que no fuera nada grave.

-Pues eligió un muy mal momento para buscar, que miedo.

-¿Qué hacemos mientras vuelve la energía?

Sunghoon subió y bajó la cejas de manera sugerente, lo que hizo reír a Sunoo. -¿Qué te pasa?

-Ven- extendió los brazos para que se acercara.

Sunoo cambió de sitio y se sentó junto a Sunghoon pero él lo levantó para que se sentara sobre su regazo, Sunoo se acercó a su rostro y dejó un beso corto sobre sus labios -te ves muy guapo en medio de la oscuridad.

-Se me ocurrió algo asquerosamente cursi ¿quieres oírlo?

-Sorprendeme.

-Luzco guapo porque estoy reflejando la luz del sol, tú eres el sol- soltó una risa al terminar de hablar de lo avergonzado que se sentía al decir cosas como esas.

-Park Sunghoon, eso definitivamente fue muy cursi, ni siquiera lo dirían en un drama- dejó un beso en su mejilla -ya puedes bajarme.

Lo miró desconcertado -¿por qué?

-Seguro que peso- se removió incómodo.

En lugar de soltarlo, se acomodó sobre el respaldo del sillón y llevó a Sunoo con él sin soltarlo -te he cargado antes y la verdad me hiere el orgullo un poquito que creas que no puedo aguantarte.

Sunoo dejó caer despacio su cabeza sobre el pecho de Sunghoon, otra vez no lo había contradecido ni invalidado lo que pensaba, sin duda siempre encontraba la forma de hacerlo sentir menos agobiado ¿podía quedarselo para siempre? -ay Sunghoon ¿qué voy a hacer contigo?

-No sé, puedes besarme otra vez si quieres.

-No quiero- lo molestó -¿haz ido a uno de sus conciertos?- preguntó levantando el lightstick que mantenían encendido.

-Si, cuando estuvieron en Busan hace un par de años, le rogué a mi papá que me llevara.

-Increíble, mi hermana y yo fuimos a una de las fechas de Seúl, pero no nos habían dado permiso así que después nos castigaron, pero valió totalmente la pena.

Continuaron hablando sobre el grupo y las canciones que más les gustaban de ellos hasta que volvió la electricidad.

-¿Terminamos la película o quieres ver otra cosa?

-Quiero saber en qué termina, pero si te da miedo podemos ver una película de Disney.

-¿Te burlas de mí?- le reclamó al mismo tiempo que le hacía cosquillas.

-Ya, ya, Sunghoonnie, te dejaré elegir a ti ¿si? no me voy a burlar.

-Elijo Disney, pero no porque tenga miedo.

-Aja.

Vieron una película animada el resto de la noche, en algún punto se prepararon algo rápido como cena y cuando terminó la película subieron a dormir. Les gustaba ese tipo de rutina, hacer cosas cotidianas y tranquilas, también hacían planes para salir e ir a lugares divertidos como cualquier adolescente, pero por lo general preferían estar juntos de ese modo.