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cuando javier se desliza en el silencio oscuro de su apartamento, escucha tus suaves ronquidos de inmediato, y su cuerpo se relaja con el sonido. estás aquí, estás a salvo, y ahora que él está en casa contigo, él se siente seguro también.
había sido un día difícil lleno de callejones sin salida y palmadas en las muñecas de los altos mandos. estaba demasiado cansado para tomar una ducha, se dirige al dormitorio de inmediato, se desnuda antes de unirse a tí bajo el edredón ridículamente esponjoso que lo convenció de comprar. cosas suaves. comodidad. te lo mereces javi.
había aceptado a regañadientes aunque no estaba seguro, nada de eso era cierto. cierto es que duerme mejor en estos días, pero tal vez eso es porque estás a su lado.
yodo lo que puede hacer es mirarte, mirando con asombro mientras duermes en paz. estás completamente desnuda y su cuerpo no puede simplemente ignorar eso, especialmente cuando te estremeces, dándote la vuelta para presionarte contra su calor. Él te acerca más, usando una mano fuerte para levantar tu pierna sobre su cadera, su erección anidada entre la sedosidad flexible de tus muslos. tiene hambre de ti, y aunque le encantaría saltarse el preámbulo y hundirse en ti, él sabe que tiene que esperar a que estés lista.
su boca encuentra tú cuello y tú gimes suavemente cuando sus dientes se hunden en la piel allí, su lengua calmando el lugar después.
pone una mano en tu pecho, lo palpa con un sonido de necesidad en la parte posterior de su garganta. su boca muerde y besa tu cuello mientras toma tu pezón entre sus dedos, haciéndolo rodar suavemente. él conoce tu cuerpo, y que con solo un poco de esto estarás mojada para él en poco tiempo, incluso mientras duermes. pero tocarte es un lujo y él se toma su tiempo, saboreando el sabor y el tacto de tu piel con tanta ternura que te permite seguir durmiendo, relajándote más en él. ─ eres tan perfecta, querida ─ susurra cuando su mano se desliza entre tus piernas, dos dedos deslizándose fácilmente en tu coño mojado y resbaladizo.
con cuidado, te da la vuelta, manteniéndote abierta para él y se entierra en su apretado calor. él no puede contener el fuerte gemido que se acumula en su pecho cuando tus paredes revolotean a su alrededor. el te sostiene apretada, se mece en ti suavemente un par de veces, enterrando su nariz en la nuca de tu cuello para inhalar tu olor. y cuando revuelves, el placer floreciendo en la parte baja de tu vientre sacándote del sueño espolvorea besos por tu piel. ─ javi ─respiras somnoliento, tú mano alcanzando volver a tocar su cadera. ─ hola, bebé ─ murmura contra tú garganta, empujando dentro de ti más fuerte ahora que estás despierto. ─ ¿me necesitabas? ─ es una pregunta burlona que ambos de ustedes ya saben la respuesta y gritan suavemente cuando sus dientes muerden tu piel. ─ siempre te necesito, cariño, a ti y a tu pequeño perfecto coño ─ ─ joder, javi, sí ─ te quejas, moviendo la mano hacia arriba. cuerpo para conseguir su mano firmemente plantada en su pelo. ─ mira lo bien que me tomas. incluso mientras duermes. me dejaste entrar tan fácilmente ─ susurra pecaminosamente en tu oreja, y todo lo que puedes hacer es asentir febrilmente. empujando tu trasero contra él para trabajarlo más profundo en ti.
el te da la vuelta sobre tu estómago, trayendo sus caderas completamente hacia atrás para golpearte con un aspereza que hace que tus ojos se pongan en blanco, ─ fuiste hecha para mí, ¿no es así? puedo follarte cuando quiera porque estás hecho para tomar mi polla ─ ─ sí, bebé, hecho para que te corras. Para que me uses ─ jadeas, con los dedos buscando una almohada en el oscuridad para anclarte mientras te folla casi brutalmente. ─ eres tan bonita, hueles tan bien, te sientes tan bien ─ el alaba, su respiración rápida y áspera. ─ todo para ti, javi. siempre para ti, te quiero ─ ─ también te amo bebé, te mostraré, llenará tu coño conmigo ─ rechina entre dientes, un sutil brillo de sudor cubriendo su piel desde el fuerza y longitud de sus movimientos.
debe estar cerca porque con esas palabras desliza su mano entre tú y el colchón, comienza a frotar círculos perfectos en tu clítoris que hacen que te aprietes alrededor de él. su ritmo no se detiene y pronto, tu orgasmo inunda tu cuerpo, un suave grito sale de tus labios mientras te lleva a la cima. javi hace lo mismo, clavándose en ti para no desperdiciar ni una sola gota, te había prometido llenarte.
mientras la habitación se queda en silencio, nada más que el sonido de respiraciones profundas y reguladoras y los sonidos de la noche entrando a raudales a través de una ventana abierta, javi dice algo que te sorprende.
─ múdate conmigo ─ ─ ¿qué? ─ te mueves debajo de él lo mejor que puedes, girando para mirarlo.
sus ojos están muy abiertos, llenos de vacilación pero repite sus palabras anteriores, incluso agrega algún razonamiento.
─ múdate conmigo. ¿cuándo fue la última vez que dormiste en tu propio departamento, mi amor? ¿la última vez que lavaste la ropa allí? Apuesto a que tus plantas penden de un hilo ─ oo estudias por un momento, ─ ¿estás seguro? ─ él asiente lentamente, acercándote más, ─ ¿te preguntaría si no fuera así? ─ nunca envejece, el concepto de él amando y elegirte a pesar de la forma en que vivió antes, y tu corazón se acelera cuando respondes: ─ está bien, sí, lo haré, me mudare contigo ─ s regañadientes agregregas ─ y mis plantas están bien ─ él sonríe, con un brillo travieso en sus ojos, ─ conozco la forma perfecta para celebrar ─ ─ mmm, ¿qué es eso? ─ el te inmoviliza de nuevo, besando su camino hacia abajo tu cuerpo hasta que su lengua encuentre tu vagina. y el se queda allí por lo que se siente como horas, a fondo celebrando el próximo paso en su relación llevándote a la cima de los orgasmos múltiples.
