Tener sirvientas seria algo bueno y que te ayudaría bastante, pero ese no es mi caso ni mi situación
Pero mi vida es lo que cualquier hombre soñaría, todo por ese grial me encuentro metido entre tantos problemas
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Meda chibi: ¿Así que aprendiste la lección por fin?
-Delante de mi estaba el pequeño Meda, yo estaba realmente golpeado, mis extremidades completamente aplastadas-
Meda chibi: Ey ya deja de hacer narración en primera persona, tu te buscaste esto
-MI cuerpo ardía, mis sueños no se harían realidad, parece que luche hasta la muerte, con esos animales... pero ellos me vencieron-
Meda chibi: Imbécil, literalmente acabas de insultarlos, tu te buscaste que te puteen así
-Mis parpadas cada vez eran mas pesados, la muerte soplaba el delicado y fúnebre aliento que me quitaba la vida-
Medachi: Esto puede ayudar
-Y antes de irme, quisiera decirles...-
Medachi: Gay el que se muere
-De pronto mis energías empezaron a recobrar, mi cuerpo empezó a sentirse cada vez mejor, creo que no es el final para mi-
Medachi: Nunca falla, ahora levántate que te buscan otros 20 lectores enfadados y un loco con escopeta
Meda: Wuaaaaa no es hora de pensar es hora de correr
Meda chibi: Se fue por allá
Meda: Ayuda!!!!!!!
Ling: ...
Meda chibi: No mames ¿como apareció este dragón?
Medachi: Silencio parece que esta buscando a Meda
Habitación de Bell
En la habitación del chico el pobre seguía recostado, solo que sobre el había una hermosa mujer, y eso era decir poco
Ante Bell era bellísima, unos ojos rojo cereza con un brillo casi divinos, un rostro bien delicado y tan fino que parecía porcelana, de esos que son piezas de arte que su tía le había contado, ademas de una larga cabellera
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Lo malo es que ella ahora parecía querer quitarse de lo que estaba sobre el, parecía bastante satisfecha estando sentada en su pecho
Aunque se le hacia raro no sentir tanto peso de parte de ella, era como tener 2 o 3 platos sobre el, nada que no lo pudiera soportar
