La Herradura

CAPITULO 24

La final estaba aquí, claro que estuvo en las vegas, pero jamás como participante de una final mundial, no ganaría, Elena lo sabía, seria Mauney quien levantaría el premio o quizá Silva, o alguien más, pero ella estaba ahí, entre los 10 mejores jinetes en el número 5.

Las fotografías de su persona estaban por todos lados y niñas gritaban su nombre cuando la vieron entrar al estadio, estaba aturdida, pero Mauney no la soltó en ningún momento, camino con ella por el lugar tomando su mano con firmeza, todos sabían que participaban por el mismo equipo y después de casi un año verlos juntos era más lógico que llamativo.

JB antes de un rodeo era fuego puro, se paraba con ambas manos en la cintura escuchando todas las indicaciones con atención, atendía todo lo que el fisioterapeuta le decía y sonreía amable a su persona de tanto en tanto.

-Llego el momento Elena- se recargo en el inicio del pasillo mirándola de pie como si no pudiera distinguir la realidad de la ficción- Eres la novata del año de Barretas, esto no es nada, es un simple requisito, de aquí en adelante nada más te detendrá, la NFR tiene un contrato listo, me lo han dicho, y la PBR claro que dejara sus puertas abiertas para ti.

-Supongo que estoy soñando-

-Supones mal- tomo el casco para después tomar su mano

En cuanto salió las luces le aturdieron, pero JB caminaba detrás de ella, fue la primera en salir, deseo no serlo, pero conocía este tipo de trampas por parte de los organizadores, era el último día, así que era el todo o la nada.

Tadeo la vio desde las gradas, Rosita estaba unos pasos abajo junto con la madre de Elena y su hermano. Todos estaban esperando que saliera.

"ELENA HERRERA"

Su nombre trono en los altavoces y su cuerpo se disparó con el toro debajo de ella, Clayton era parte de su equipo, ese año no logro calificar después de todo, pero estaba dentro de su equipo de choque, Elena levanto la mano y sostuvo la rienda, el suelo lo toco apenas y girando de las patas del toro logro salir casi intacta, al quitarse el casco se vio con la nariz sangrando, pero eso poco le importo, aun tenía el protector bocal cuando la cámara la enfoco, estaba hecha una furia, y al ver su puntaje en el marcador arrojo el casco victoriosa mientras Mauney del otro lado aplaudía y gritaba emocionado.

Ese par eran las estrellas de la noche, Mauney salió como siempre, sin casco y con la gloria en su espalda, los ocho segundos le pasaron de largo y su salto completamente limpio brillo, corrió arrojando el sombrero a donde Elena festejaba con un hielo en el rostro.

Ese mundo era de ellos, no de Tadeo, y el solo verlos le hizo merma en su pecho. Pero aun así este era el final del camino, después de esto Elena seguramente regresaría a casa, con el sueño cumplido y ahora sería su turno, ahora sería el quien retomaría con ella nuevamente el camino.

Todos en ese lugar eran festejo, JB era el campeón del mundo por tercera vez y Elena, Elena tenía el tercer lugar, fue más de lo que esperaron, fue mucho más de lo que pudieron si quiera imaginar, todos querían hablar con ellos, los reporteros se amontonaban y JB compartía la emoción con Elena, quien a su vez se sentía tan feliz por él.

-Te lo prometí-se fundieron en un abrazo cuando entraron al vestidor- te prometí que iríamos a la luna- le susurro inundándose de su aroma sintiendo la correspondencia en la necesidad de ese abrazo.

-Eres increíble. No sería nada sin ti-

-Tu siempre has tenido alas muñeca, solo necesitabas que te empujaran a volar -se separaron sin dejar de mirarse- ese golpe se ve feo- Mauney reviso su nariz ligeramente con los dedos

-Ahora soy más ruda que antes- Elena seguía prensada al chaleco de su compañero incapaz de soltarle

Mauney acomodo los cabellos revueltos de Elena detrás de su oreja, repaso su rostro acaricio sus labios, el mundo se hizo pequeño y entonces la beso...