¡Esto no puede estar pasando...!

Hermanos Nie.

- ¡Lan Zhan, Lan Zhan! - exclama Wei WuXian con la voz quebrada - ¿por qué? - llora - ¿por qué creaste algo tan monstruoso? ¿cómo fue que salió a las calles? ¿qué hiciste mal?

- la fuga fue por culpa de Su She, él lo hizo... ¡Wei Ying, perdóname! estuvo fuera de mis manos.

- ¡Su She...! él te odia... - dice aun con lágrimas rodando por su rostro.

- mucho.

- y aun así dejaste que estuviera cerca. Que se involucrara con tu trabajo.

- ....

- ahora voy por nuestro bebé, llevo a JingYi conmigo, lo encontré.

- ¿JingYi...? - pregunta Lan Zhan confundido.

- si él está bien – responde sorbeteando.

- Wei Ying, vuelve...- escucha que le dicen con tristeza.

-no puedo... - responde echando andar el auto - voy por mi bebé.

- él está bien, fuera de peligro - insisten desde el otro lado del telefono.

- quiero verlo con mis propios ojos, no me quedare tranquilo hasta no verlo personalmente y tenerlo entre mis brazos.

- no vayas, no sigas ¡por favor, regresa! - ruega Lan Zhan - ¡si puedes escucharme, regresa, te extraño! - se escucha la voz quebrada de su esposo - ¡te extraño mucho!

- también te extraño, pero no puedo regresar, no aun... - responde Wei WuXian - ¡lo siento Lan Zhan! - cuelga la llamada antes de que su esposo tenga la oportunidad de decir algo más.

Sin contratiempo y a toda la velocidad que pudo, llego al fin con sus suegros quienes salieron a recibirlo con los brazos abiertos y emocionados.

- Nos hemos encerrado en la mansión desde que todo empezó - dice su suegra recibiendo a JingYi en sus brazos.

- ¿y A'yuan cómo está? - pregunta ansioso Wei WuXian.

- ¿A'yuan? - pregunta confundido su suegro.

- Si ¡¿A'yuan?! - Wei WuXian siente profunda preocupación.

- ¡el niño no está aquí! - responde su suegra apegando aún más a Jingyi contra su cuerpo.

- ¿cómo? - pregunta nervioso - ¡A'yuan me dijo que estaba jugando en el patio de la casa de los tatas...?

- no somos sus únicos tatas... - dice su suegra.

- mis padres están fuera del país.... - dice con un intento de risa.

- bueno, era una sorpresa de cumpleaños, pero llegaron ayer y se supone que dentro de unos días se unirían en la cena de tu cumpleaños... - dice su suegro.

De pronto Wei WuXian se empieza a reír histérico - hijo cálmate - le pide su suegro.

- viaje por varias horas obstaculizadas para descubrir que mi hijo estaba con mis padres... me tengo que ir en este momento – dice haciendo ejercicios de respiración para recuperar la calma.

- quédate y come algo primero – dice su suegra.

- comeré en el camino - dice Wei WuXian, subiendo al auto para partir.

Antes de llegar a la ciudad, Wei WuXian se detuvo en un pueblo para cambiar de vehículo, pero antes tenía que buscar algo para comer. Para nada le costó encontrar un local y siempre con cautela, la estancia está completamente vacía, su bolso lo llena de suministros. Un fuerte ruido llama su atención, ansioso y por reflejo saco dos de sus armas y apunto a quien sea se le apareció.