Capítulo 63

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- Tienes como regresar ¿No es así?

Jinsol bajó la vista de su celular y miró a la rubia a su lado - Lo tengo todo bajo control - sonrió mostrando sus dientes.

Jungeun rio - ¿Dónde está tu auto?

Jinsol rodó los ojos, y soltando una enorme cantidad de aire resopló - No planeo conducir en un largo tiempo - Jungeun golpeó su rostro sonriendo - Llamé a un taxi, no estaba segura si terminaría ebria.

- Sin embargo te comportaste como toda una señora de tu edad.

- Hey, idiota. Soy mayor que tú pero aún soy joven - acusó - Pero es verdad, ahora soy vieja y con más responsabilidades, no puedo solo embriagarme y perder los sentidos como en el pasado.

Jungeun sonrió - Vamos, yo te llevaré.

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Esa era la última noche.

Lo había conversado con Chaewon. No podía abandonar tanto tiempo su negocio, ni tampoco a Yerim. Además, cada minuto que pasaba en la ciudad, sintiéndose fuera de lugar, le decía que Jiwoo no regresaría y lo único que ocasionaba era herir profundamente a su corazón.

Sintió temor y vergüenza con la ropa de Chaewon le regaló, no sabía si sería del agrado de Jiwoo, pero cuando la miró después de tanto tiempo, con ese precioso vestido y esas enormes botas negras, fue como si estuviera frente a otra persona.

Esa era su última noche en la ciudad. Lo tenía claro y debía decírselo a Jiwoo.

A pesar de todo Sooyoung era una persona de valores, y comprendía que Jiwoo estaba comprometida y la rubia con quién compartió la mesa, pronto sería su esposa. Así que cumpliría con lo que le dijo a Chaewon, hablaría con Jiwoo para despedirse de ella.

- Sooyo - Jiwoo habló rápidamente cuando llegaron al balcón, sientiendo el viento helado recorre sus cuerpos.

- Dime qué no aceptaste de nuevo su mano - Sooyoung la interrumpió - Por favor, dime que me esperaste a mí.

Jiwoo bajó la mirada. Lo sabía, Sooyoung estaba enterada de su boda.

Sintió las lágrimas comenzar a empañarla y las gotas frescas del exterior también se presentaron.

- ¿Vas a casarte? - preguntó con temor.

Jiwoo no respondió, limitándose a esconder su rostro entre sus manos bañadas de llanto.

Sooyoung suspiró, echando la cabeza hacia atrás mientras sentía la tristeza acumularse en su mirar.

Dió un paso más cerca, tomando sus manos entre las suyas.

- Mírame Chuu - la mencionada negó - Mírame por favor - alzó la mirada entre lágrimas.

No se atrevía a mirarle, sentía pena, se sentía infiel, desleal y no quería ver su rostro destrozado por su culpa

- Cuando te conocí, no descubrí lo que necesitaba, sino lo que me hacía falta - acarició su mejilla y limpió sus lágrimas. Sooyoung no la haría llorar, no permitiría que sufriera por su culpa - Tú llenaste espacios en vida que no sabía que podía llenar, me completaste - avanzó - Pero ahora que no estás, sé lo que necesito. A quién necesito.

Limpió todo rastro que había de lágrimas en ella. Chuu inhaló con fuerza, si era la última noche juntas, no quería recordarlo así.

- Yo sé que no tengo nada que ofrecerte Chuu, no puedo pedirte que regreses conmigo. Solo quería verte y asegurarme que estuvieras a salvo. No tuve la oportunidad de despedirme de ti.

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