Capítulo 51

71 11 2
                                    

» FINAL «

Pov Mina

Una vez más Jeongyeon no había asistido a clases — ¡Mierda Mina deja de pensar en ella! —cada vez que ella llegaba a mis pensamientos, mi voz interna me reprendía. Pero me era completamente imposible sacarla de mi mente.

—Myoui —cerré la puerta de mi casillero para poder ver quién me llamaba. Era la idiota de Jihyo. 

— ¿Qué quieres? —le pregunté de mala gana, y ganas para partirle la cara me sobraban.

—Es Jeongyeon—dijo agitada, seguramente venía corriendo.

—Jihyo... —dije con fastidio —No estoy de humor y mucho menos si se trata de ella —me di la media vuelta.

—Se irá... —escuché que decía a lo lejos.

—Qué le vaya bien —dije sin detenerme.

—Tú no entiendes, ¿Cierto? Ella te necesita —me detuve y regresé hacia ella.

— ¿Para qué? ¿Apostaron de nuevo? —pasé mi mano por mi cabello con desespero —No me interesa nada relacionado con ella, me da lo mismo si me necesita o no. Le dejé muy claro que no la quería cerca de mí —me miraba con rabia y puedo jurar que yo a ella también.

—Perfecto —miró hacia abajo y luego volvió a subir la mirada —En dos horas se va del país —rebuscó en su mochila y sacó un sobre blanco. Me lo lanzó y por reflejo lo atrapé —Yo me alejé cuando más me necesitaba y tú fuiste la única que estuvo ahí con ella, créeme que no jugó contigo —se dio la media vuelta dejándome en medio del pasillo con el sobre blanco en mis manos. Lo miré y al ver su letra el coraje me inundó y con ambas manos lo arrugué haciéndolo una bola de papel que terminaría en el primer basurero que encontrara.

Me acerqué al basurero y miré una vez más la bola de papel. Se iba del país, tal vez sería lo último que sabría de ella. No pude hacerlo. Guardé la bola de papel en un bolsillo de mi chaqueta. Regresé a mi casillero y dejé los libros, no tenía ganas de entrar a clases.

Llegué a casa, estaba vacía. Últimamente parecía que nadie vivía ahí. Hyejoo seguía resentida, ya que un par de veces más le grité por constantemente preguntarme por Jeongyeon, al igual Minho. Nunca les había hablado de ese modo, pero tampoco nunca me había sentido así de destrozada, así de dolida. Ellos no podrían entenderme por más que quiera.

Me dejé caer en el sillón central de la sala mirando hacia la televisión apagada. Eché la cabeza hacia atrás viendo el techo, tratando de organizar mis pensamientos. Metí mis manos a los bolsillos de la chaqueta y nuevamente sentí la bola de papel. La saqué, la extendí y nuevamente leí mi nombre con bolígrafo rosado. Ella sabía cuanto detestaba que usara esa tinta incómoda para leer —Vamos Mina, ¿Qué puedes perder? —mi mente me animó a leerla, ya no podía sentirme peor. Rompí el sobre por uno de los costados para sacar la hoja blanca doblada en tres y ahora también arrugada. Tinta negra abarcaba más de la mitad de la hoja.

"Mina:

Sé que detestas que escriba con bolígrafo rosado, lo siento no tenía otro sobre. No sé si leerás esto, tal vez no lo hagas y terminará en el basurero, pero no pierdo nada intentándolo.

Fui una estúpida, jamás debí haber jugado contigo. Sé que estuve mal y es algo que jamás me podré perdonar... Pero quiero que sepas que todas las cosas que te dije nunca fueron falsas. Todo lo que te decía salía de mi corazón.

Al principio lo vi como un reto, me decían que era completamente imposible que tú te fijaras en mí. Qué era imposible que siquiera me dijeras tu nombre... y vaya que lo fue. Pero valió la pena, las últimas semanas que estuvimos juntas fueron... ¡Increíbles!

Ahora me doy cuenta de que a Joy nunca la amé, sólo fue un capricho que me negaba a perder. Supe que no la amaba cuando conocí a la verdadera Mina, y ahí fue cuando me enamoré de verdad y por primera vez. Te amo tanto Minari y entiendo que no quieras verme ni saber nada de mí, pero tenías que saber esto, tenía que hacerte saber que te amo y lo seguiré haciendo.

También para decirte que me iré. Nadie (tú, mi madre y Jihyo) sabe a dónde iré, sólo les avisé que saldría del país. Después de todo aquí no hay nada que me retenga. Tenías razón... estaba sola y estoy sola, excepto en el tiempo que estuve contigo, la palabra soledad desaparecía de mi vocabulario. Cuando estaba con ustedes, contigo, Hyejoo y Minho, me sentía tan querida. Me sentía tan importante y es algo que les agradezco de sobremanera.

Por favor dile a Hyejoo que me perdone por haberle mentido, seguro estará molesta conmigo. Pero que no se le olvide que ella, Minho y tú, Mina, fueron lo más importante que tuve.

Te amo Mina, y una vez más perdóname...

Yoo Jeongyeon."

Doblé nuevamente la carta en tres para después prácticamente desintegrarla, rompiéndola en cientos de pedazos. Me puse de pie con una rabia incontenible. No sabía qué hacer, no sabía si gritar, no sabía si creerle o si enojarme conmigo misma. 

Pateé la mesa del centro con tanta fuerza que sólo se escuchó el cristal romperse en mil pedazos.

Respiré profundamente tratando de controlarme, no tenía por que ponerme así. Ella se lo había ganado. Ella había jugado conmigo y no se lo perdonaría nunca.

Pov Jeongyeon

Llegué al aeropuerto, le pagué al taxi y bajé mis maletas. Sólo eran las dos maletas que traía. Caminé hacia el mostrador y puse mis maletas en la báscula. Entregué mi pasaporte y boleto, me entregaron mi pase de abordar.

—Puerta A-3 —indicó el joven frente al mostrador.

—Gracias —hablé tratando de que mi voz no se escuchara nasal.

— ¿Todo bien señorita? —preguntó y rápidamente limpié la lágrima que se había deslizado por mi mejilla, ni siquiera las grandes gafas oscuras habían logrado detenerla.

—Sí, todo bien —dije tomando rápido mi pase y limpiando con brusquedad la lágrima. Caminé rápidamente. Extrañamente, ya que aún faltaba media hora para comenzar a abordar.

Me senté mirando hacia el gran ventanal y no pude evitarlo... comencé a llorar. Puse mi bolso en mis piernas y oculté mi rostro en ésta. ¿Por qué lo había arruinado así? ¿Por qué había jugado con ella? No sólo me sentía la peor persona del universo... era la peor persona. Mina jamás me lo perdonaría. Seguramente la carta había terminado en un basurero. Pero bueno, me iría lejos. Tanto como Mina y yo empezaríamos de cero.

Me formé ya que estaban abordando. La fila avanzaba lentamente porque revisaban pasaporte y el pase, quería subir ya. ¿Qué iba a hacer al llegar allá? No tengo ni la menor idea. Sólo quería alejarme. No tenía el valor de ver a Mina a la cara. Sólo quedaban dos personas delante de mí. Inhalé profundamente y avancé al ver que la persona delante de mí avanzó también.

— ¿Te vas a ir? ¿Así de simple? —escuché detrás de mí y mi pulso comenzó a acelerarse. Era ella. Me di la media vuelta y ahí estaba, gotas de sudor resbalaban por su mejilla. Su pecho se expandía y contraía con rapidez dado a la agitación.

—M-Mina... —me saqué las gafas y una vez más exploté en lágrimas.

—No me contestaste —dijo duramente — ¿Así solucionarás las cosas? —miré hacia abajo avergonzada —Si peleamos de nuevo, tan siquiera dime a donde planeas irte —sonrió —Llevo veinte minutos corriendo de un lado a otro tratando de encontrarte —dejé caer mi bolso al piso para correr hacia ella. Me recibió entre sus brazos.

—Perdóname, perdóname... —repetía mientras llenaba su camiseta con mis lágrimas. Tomó mi barbilla y me hizo verla. Sonrió y emitió un "Shh" para después unir nuestros labios en un perfecto beso.

Fin...

Me, Myself & I || JeongMi Where stories live. Discover now