Cap. 3: La Gala (pt. 1)

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– POV: Charles –

Estoy realizando la última serie de abdominales. Ya no siento la parte superior de mi cuerpo, pero sigo entrenando hasta terminar la rutina.

El sol pega en mi rostro y escucho como la puerta principal de mi casa se abre dejando ver a mi hermano menor, Arthur.

Viene con una botella de agua. No dice nada hasta que termino con el último abdominal.

– Ten –me tiende la botella–. Hidrátate.

– Gracias –le respondo luego de tomar la botella.

Tomo un sorbo de agua.

Arthur sigue conmigo y está callado.

– ¿Qué sucede? –pregunto.

– Le escuché decir a Lorenzo que parte de la gala es en el casino –asiento esperando que continúe–. No entras ahí desde lo de Jules. ¿Estás seguro de querer ir?

Me río un poco.

– Bueno, primero, tampoco es que Lorenzo me esté dejando opciones.

– Lo sé. Está un poco intenso con el tema. No sé por qué –menciona.

Lorenzo siempre ha sido así.

Solo que Arthur no lo ha vivido como yo, porque yo me he encargado más de estar pendiente de la carrera de Arthur que el propio Lorenzo, que solo está enfocado en mí y en lo que hago.

– Estoy acostumbrado –digo–. Y segundo, entré hace poco cuando le hice un tour por Mónaco a una amiga.

– ¿Y qué tal? –pregunta interesado.

– Pues, fue extraño al principio. Extraño a Jules, sin embargo, pensé que sería peor entrar. Me trajo buenos recuerdos de él malgastando su dinero ahí -nos reímos-. Así que no te preocupes, Arthur.

Él asiente.

Me levanto para recoger mis cosas y entrar a la casa.

– ¿Ya sabes qué te vas a poner?

– Iré con Pierre hoy en la noche para comprar el traje, de hecho –respondo.

– Escoge un traje bonito.

Me río.

– ¿Por qué exactamente? Pensaba ponerme algo horrible -bromeo.

– No seas idiota –bromea de vuelta–. Tengo la intuición de que habrá gente importante en la gala benéfica.

– Está bien, brujito.

– Qué insoportable eres –se queja.

– Soy tu hermano mayor, ese es mi deber. Molestarte.

Rodea los ojos y suelto unas risas mientras entramos a la casa.

Dejo la botella de agua en la cocina y mientras subo a mi habitación, Lorenzo me llama:

– ¡Charles!

Me giro hacia él.

– ¿Dime? –pregunto.

– Antes de la gala, habrá una presentación de ballet en el Auditorium Rainier III.

– Perfecto, estaré ahí entonces –digo terminando de subir las escaleras para ir a mi habitación.

Lorenzo me sigue.

– Espera, Charles.

– ¿Qué sucede? Quiero ir a darme una ducha.

Gran Premio Real - Charles LeclercWhere stories live. Discover now