Ada Wilson no podía estar más encantada, fascinada y maravillada con aquellos ojos que la hipnotizaron. Sin embargo, su estadía en Forks comienza a tornarse tortuosa tras descubrir la verdad sobre aquel lobo que la sigue a todos lados, y la idea no...
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CONNER MARKS.
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Seth y yo compartimos una mirada aguantando un risa, mientras Joy parecía a punto de explotar de la ira, podía imaginar al humo saliendo de su cabeza como en las películas.
ㅡ ¡¿Cómo se les pudo ocurrir vagar afuera con este clima?!
Su grito hizo eco en mis tímpanos y cerré los ojos buscando que el impacto disminuyera. Quería esconderme en el fondo de mi cama y acurrucarme por el frío que sentía. Henry lo notó, le acarició el cabello a mi hermana que se relajó un poco por su tacto, pero siguió mirándome rabiosa.
Como yo no sabía el camino a casa, Seth se ofreció a acompañarme. La lluvia había aumentado, Joy ya estaba en la puerta esperándome preocupada, pero al verme, su expresión se deformó y ahí estaba, en la sala de estar, empapada de agua con Seth a mi lado bajo los ojos que ardían de Joy.
ㅡ Lo siento. ㅡ murmuré con la voz temblorosa. Aunque a pesar de estar muriendo de frío, no me arrepentía de la diversión que tuve junto a Seth entre los charcos de agua.
ㅡ ¡Pudo haberte pasado algo terrible! ㅡ chilló Joy, cruzándose de brazos, un poco más relajada, pero igual de molesta.
Seth carraspeó, incómodo.
ㅡ Yo... debería volver.
Henry torció el gesto cuando lo miré suplicante. Había una tormenta ahí afuera y Seth quería volver caminando hasta la reserva, era muy tonto hacer eso.
ㅡ Deberías quedarte ㅡ sugirió Henry con calma. Joy lo miró confundida, porque sabíamos que a ella no le agradaba ningún chico de la reserva ㅡ, está lloviendo mucho afuera ㅡ explicó, más para Joy que para Seth ㅡ. En cuanto se calme te llevaré hasta allá, por ahora lo mejor es que te quedes.
Joy no era una mala persona. Respiró profundo calmando su acelerada respiración y asintió.
ㅡ Puedes llamar a tu familia, Seth ㅡ dijo, con una voz relajada que me sorprendió. Estaba siendo amable. ㅡ, el teléfono está en la cocina. Explícales qué ocurrió y que Henry y yo te llevaremos a casa.
