Cap 5: "Confabulación"

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        Narra el narrador

El día de hoy la prometida del joven Rey Damián Desmond, tendrá el honor de conocer a todos en la jerarquía de la realeza Ostaniana es decir: duques, condes, vizcondes, barones, caballeros etc.

—Ella es; La Duquesa Donna Schlang—presento Henry Henderson el mayordomo del rey.

La mujer dió un paso adelante parándose en frente de su monarca y su prometida.

—Larga vida al Rey y mi cordial saludo a su futura reina—declaro con cortesía  haciendo una reverencia delante del Rey y su prometida.

El pequeño Rey con su cuerpo infantil estaba sentado en su trono,con su corona, capa y centro en su mano a su lado sentada en un trono más pequeño que el suyo, la jovial princesa Anya Forger.

—Ahora el Conde Murdoch Swan de un paso al frente—pronuncio el elegante anciano, la duquesa volvió a su lugar junto a los demás nobiliarios.

El corpulento conde se paró frente a sus majestades.

—Prospera vida y salud al Rey
mi cordial saludo también a la hermosa princesa Anya—hizo una reverencia.

Anya y Damián asintieron con la cabeza.

—Princesa ¿Me permitiría decir algo más?—se atrevió a preguntar.

Anya se sorprendió vio de reojo a su prometido y este sólo frunció el ceño.

—Mmm adelante Conde Swan diga—

El hombre sonrió.

—Princesa Anya Forger, perdone mi osadía al decir tal cosa pero no puedo simplemente callar lo que siento al mirarla, Princesa déjeme decirle que de todas las Royal que e visto usted es la más hermosa que he tenido el placer de contemplar con mis propios ojos—

Anya levantó sus cejas sorprendida.

~Este viejo lesbiano ¡ES DECIR! este conde ¿En serio creé que soy la princesa más hermosa de todas?~

—Pues...me alaga escuchar eso Conde Murdoch—dijo cortésmente la peli rosa.

El conde se ruborizo levemente y sonrió aún más.

—Por favor princesa Anya
llámeme; Murdoch después de todo...—

—LO LAMENTO pero mi prometida no tiene por qué dirigirse a usted por su nombre de pila y usted TAMPOCO puede llamarla por su nombre, recuerde su posición Conde—le reprochó el soberano con seriedad.

El puede parecer un niño ahora pero no hay que olvidar que en realidad es un hombre, uno que puede ser bastante celoso con lo suyo.

—Ya veo...usted tiene toda la razón su excelencia—se inclinó en señal de disculpa.

El pequeño Rey chasqueo su lengua e hizo un ademán con su mano para que continuara el protocolo de presentación. Henry captando su orden siguió anunciando a las demás personas presentes con sus respectivos títulos nobiliarios.

(...)

La joven princesa caminaba por el pasillo acompañada de su pequeño prometido, la presentación de la jerarquía Ostaniana había terminado.

—Psf jajaja—carcajeo la peli rosa.

Su novio la miró curioso.

—¿Por qué te ríes?—

—Por nada jeje—ella no podía evitar sonreír divertida.

La poca paciencia del soberano se agotó, se paró en frente de ella deteniendo su pasó.

"Mi pequeño Rey"Where stories live. Discover now