2

253 22 0
                                    

Viernes a la noche.

El partido estaba a punto de culminar, con el Ajax teniendo una ventaja de 2 a 0 vs el Feyenoord Rotterdam, su clásico rival.

Con un gol de Antony de por medio.

Y Lisandro obviamente había aprovechado para tirarse sobre los brazos de su amigo, rodear sus piernas en su cintura y estrujarlo con fuerza. Cosa que Antony acepto con gusto.

Era de mucha importancia ganar este partido, sacando el hecho de que era su clásico rival y nunca estaba demás demostrar que eran mejores que ellos, este partido servia para ponerlos primeros en la tabla de posición, dejando por debajo al equipo contrario y humillándolos en el transcurso.

El vestuario era puro festejo, tal vez un poco exagerado pero de igual manera la felicidad junto a los gritos no faltaban.

Habían ganado con mucha ventaja siendo notablemente superiores a su rival.

Lisandro tomaba de una botella de cerveza sentado en un banco observando a sus compañeros saltar revoleando sus remeras de un lado a otro, de arriba abajo. Una sonrisa formada en su rostro.

- Vamos para o duchas amigo? - sintió una mano en su hombro acompañada de la voz de cierto rubio.

Dirigió su mirada hacia la voz, donde un Antony sin remera con una toalla colgada en su hombro lo miraba desde arriba.

Embobado asintió.

Ambos caminaron a las duchas esquivando a sus compañeros y a cualquier objeto que estos tiraran contra la pared o suelo. Estaban desacatados.

Lisandro siempre se ponía nervioso al momento de ir a las duchas, claro, si se trataba de Antony. Y más ahora que eran los únicos dos.

Observó cómo el contrario comenzaba a bajarse los pantalones, podía sentir como las piernas le empezaban a fallar, se iba a caer desmayado ahí nomás, frente a su amigo semidesnudo.

Antony se giro notando que su acompañante no hacía ningún movimiento.

Río divertido
- Tudo bem?

Licha asintió, rápidamente comenzando a sacarse la remera mientras sentía la penetrante mirada de su amigo en el, en su torso.

Eso a veces lo confundía de Antony, las miradas intensas que le solía dedicar, no entendía a que se debían pero siempre lograban ponerlo nervioso.

Antony encendió la ducha, y Licha estaba dispuesto a hacer lo mismo con una ducha a dos de distancia de la del otro rubio.

- No no - Antony negó con la cabeza mirando la acción de su amigo.

Licha lo miro confundido.
- Qué pasa?

El rubio a pocos metros de el hizo señas con su mano, el gesto decía que se acercará a él.

- Venha comigo - Antony continuaba haciendo el mismo gesto sin parar.

Dios. Pensó Lisandro, acaso Antony le estaba diciendo que se bañaran juntos, o la cerveza le había pegado demasiado y estaba flasheando fuerte.

Imposible porque Lisandro no se ponía en pedo muy fácil que digamos.

- Eh?

- Duchemonos juntos - las palabras salieron de la boca de Antony como si fuera súper normal lo que le estaba diciendo.

Capaz si lo era y Lisandro sobrepensaba todo.

O capaz Antony sabía muy bien lo que hacía.

Martínez abría y cerraba la boca sin saber muy bien que decir o como reaccionar, todo bajo la atenta mirada de Santos que no le transmitía nada.

Usualmente podía leer a su amigo, cuando estaba enojado, feliz o triste. Cuando hablaba de verdad o solo estaba jodiendo.

Pero ahora nada. No sabía lo que Tony estaba pensando, era como una hoja en blanco, y eso lo ponía más nervioso.



Capítulo cortito

Labios rotos - Lisandro x AntonyWhere stories live. Discover now