Bajo El Roble

cap 14

DESGARRADO (2)

—¿Qué?

—Te lo quité y lo rompí en el proceso.

—Oh… eh, ¿cómo? ¿Como lo has quitado? —Max no pudo evitar preguntarle.

La pregunta le pareció un poco desconcertante. Girando su asiento, la miró y vio su figura agarrarse a la sábana como un escudo, y luego gritó.

—¿Qué se supone que haga? No podías respirar porque… incluso te estabas poniendo azul, debido a tus cajones. ¡Estaba tratando de desatar el nudo porque la terrible ropa interior te apretaba demasiado! No importa cuánto lo intenté, el nudo no se soltó, ¡así que lo arranqué! Maldición. ¡Ni siquiera sabía que se podía subir y bajar!

El rostro de Maximiliana enrojeció hasta el punto de humear. Estaba muerta de mortificación, pensando que él había visto su ropa interior y la carne debajo de ella.

Su niñera la obligó a usar calzones ajustados en ausencia de su esposo. Ella dijo que la mantendría casta.

Max se ve obligado a usar esa cosa horrible en su cuerpo, pero ella nunca pensó que alguien lo vería. Mientras apretó su rostro, un deseo atravesó por saltar por la ventana inmediatamente, Riftan dijo con un pequeño suspiro.

—Te conseguiré una nueva ropa interior mañana, así que no luzcas así. ¿O quieres que te preste el mío?

—¡Oh no! Está bien….

Max negó con la cabeza con fervor. No tenía la menor intención de usar la ropa interior de otra persona, o la de un hombre para el caso. Además, llevar solo una túnica de hombre holgada ya la hacía sentir incómoda. Riftan examinó sus ojos y la vio hurgar en la sopa con su cuchara.

—¿Cuándo terminarás de revolver eso? Date prisa y come. Ni siquiera tocaste el pan .

Se metió algunas cucharadas más en la boca. Sin embargo, la boca corta de su cuerpo original y su estómago abultado la hicieron perder el apetito pronto. Ni siquiera pensó en tocar el pan duro, solo tragó un poco más de sopa y luego dejó el cuenco a un lado.

—¿Qué? No has comido la mitad —, comenzó Riftan.

—No tengo apetito, así que ...

—No seas tan dura conmigo. No puedes soñar con comida lujosa hasta que lleguemos a casa. Incluso si no se adapta a tu gusto, tu cuerpo no resistirá si no lo tolera .

Max se sonrojó al oírlo, parecido a amonestar a un niño mimado.

—¿O vas a ser tan quisquillosa y molesta durante todo el viaje?— Añadió irritado.

—Yo ... tendré ...

Terminó tomando algunos sorbos más, pero estaba tan enferma que no pudo comer más. El hombre hizo una expresión sin conexión cuando ella dejó la cuchara. Afortunadamente, y en lugar de obligarla a comer más, suspiró y aceptó la bandeja con el cuenco.

—Te vas a quedar calva si sigues siendo quisquillosa.

Chasqueó la lengua y se dio la vuelta. Max se encogió de hombros, incapaz de adaptarse a su estado de ánimo en constante cambio como un clima poco confiable. Parecía lo suficientemente amable como para ocuparse de su comida, pero luego se enojaba rápidamente al momento siguiente.

'¿Son mis palabras y acciones tan incriminatorias?' Ella sintió que por dentro, él ya se estaba arrepintiendo de haberla llevado con él. '¿Por qué él…?'

Algunos pensamientos negativos y serviles llenaron su cabeza. Max, que lo miró a los ojos, no pudo soportarlo más y pronunció la pregunta por impulso.

—Bueno, ¿por qué, eh, por qué me llevas?

—¿Qué?

El hombre, que salía con el cuenco, se detuvo y la miró.

—¿Qué significa eso?

—Bueno, yo, uh, en mi contra, casarme… Ja, ja, lo hiciste porque querías hacerlo. Oh, no lo hiciste ... ¿Por qué me llevas contigo? Yo… no entiendo…

Su rostro se puso visiblemente rígido. Ella tragó saliva. Era difícil saber si el tartamudeo le estaba causando una mala impresión o si su propia pregunta le molestaba. Aunque llena de vacilación, agregó:

—En primer lugar ... somos, eh, no ... Tú y yo somos parejas casadas ricas, eres demasiado mejor para mí ... apenas nos conocemos ... eso y ... tú , me vas a llevar a algún lado, p-pero ... tanto como quieras ...

—¡Cállate la mierda!

Riftan dejó escapar un rugido repentino, mirándola furiosamente. Dejó la bandeja y regresó a la cama.

—¡Se honesta! ¡¿No quieres venir conmigo ?!

—¡E-eso no es lo que es, es ...!

—¡No, no es! Aunque no es tan grande como el de tu padre, ¡mi castillo es lo suficientemente grande como para que viva una niña como tú! Maldita sea, tengo suficiente dinero. Si te preocupa no poder vivir en el lujo como antes, ¡déjalo!

Ella se encogió como un niño regañado. ¿Por qué demonios cree que ella se preocupa por vivir como la realeza cuando ha vivido una vida pobre todo el tiempo en el castillo de su padre? Ella respondió con una ráfaga de palabras y agitó las manos desesperadamente, como si la mera acción borrara sus declaraciones anteriores.

—¡No! Ese tipo de cosas no me preocupan. Es solo ... ¿por qué, por qué me llevas? Solo tengo curiosidad…

—¡Naturalmente, eres mi esposa! ¡Nuestro matrimonio es real, oficialmente reconocido por la iglesia! ¡Es de sentido común llevarte a mi casa! ¡Hiciste mal al vivir en la casa de tu padre incluso después de casarte!

—Ja, pero ... pensé que querrías el divorcio ...

—... ¿Qué?

Él apretó las manos sobre sus hombros con severidad. Max se puso azul como un ratón frente a una serpiente. La ira en su rostro la asfixió. Quizás aquí era donde la violencia, derivada de la impaciencia de comprender un tartamudeo, sobrevendría. Cerró los ojos con miedo, como siempre hacía cuando el duque de Croix la golpeaba.

Pero no importa cuánto tiempo esperó, el dolor no llegó. Cuando abrió los ojos, fue recibida con sus orbes oscuros mirándola ferozmente. Sus manos, aferrándose a sus hombros, temblaban levemente, mientras se las arreglaba para controlar su ira latente.

—¿Divorcio? ¿Quieres divorciarte de mí ahora?

____________________________________________________________

Ya enserio… calzones ajustados para mantenerse ...casta?? por dios!! jjaajaj como me rei con eso…

Créditos:

Traducción y edición: Niella014