🔮another story🧸

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Rubius amaba las ferias artesanales, los puestitos estilo toldo que vende cosas podríamos decir que son su debilidad y su esposo lo sabía bien. Entonces para su cumpleños decidio llevarlo a la feria más grande de Karmaland, el oso casi se desmaya al ver todo lo que podía ver -y gastar- en las tienditas.

Mientras el peliblanco iba de un lado a otro, Vegetta estaba sentado en un banquito de la zona con el cochecito a su lado, un Spreen bebé descansaba ahi, y esperaba que se mantenga así, era difícil lograr que se duerma si iban de paseo.

Pero la paz duró poco cuando un Rubius energético se acercó a su esposo gritado y mostrandole un enteriso de unicornio violeta que había comprado para su hijo, quien no dudo en llorar al interrumpir su sueño.

-bueno, fue un récord de silencio, date méritos Doblas.- bromeo para alzar al bebe y ashusharlo.

-lo siento cari! Es que me emocione mucho
Mira es de tu color y animal favoritos! Es perfecto para ponérselo a Ivan!- le arrebato a su bebé y fue hacia los baños para ponerle el nuevo traje. El pelinegro decidio esperar sentado para ver las boberias de su esposo.

Al rato salió y le mostró al niño ya cambiado, Spreen tenía el ceño fruncido y lucia molesto.

-Chiqui, creo que a Spreen mucho no le gusta...-

-bobo o que de Luque? Si lo ama! Si o no Spreen- le repartió besos en las gordetas mejillas del bebe pero el niño molesto tomo una de las orejas de su mamá y comenzó a tirarlas- auch auch! Spreen, hijo!-

-te dije que estaba molesto.- separo al bebe del terrible acto que estaba cometiendo, luego rio por la carita de su esposo -quieres que te diga el sana sana?-

-na, yo prefiero pasar ya al beso que me va a cura el dolor- lo miro haciendo piquito esperando su beso, el cual si llego siendo correspondido

-eres bobo-

-pero tu bobo-

-anda, sigamos viendo que te traje para que disfrutes tu cumpleños después de todo-