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"Para aquellos que no me extrañaron, no estaba muerto, andaba de parranda.

Las oficinas de S.H.I.E.L.D. no estaban en ninguna parte de Nueva York.

Los pasos de un hombre con una preocupante línea de pelo se oían por el pasillo, mientras en sus manos sostenía un archivo con la información de cinco misteriosas personas que aparecieron de la nada y golpearon al Capitán.

Aunque estaba emocionado de que su héroe favorito resucitara, estaba preocupado por la identidad de las personas que lograron pelear y dominar a Steve.

"Bien, dime, Skiper, ¿quiénes son? Quiero todos los detalles", dijo Phil mirando el archivo de Skiper y luego a él con cara seria.

"De acuerdo, es mejor que anotes esto, será largo... Recuerda, nunca confíes en un espía irlandés llamado Pick, el perro caliente solo tiene un 17 por ciento de perro. El Oasis es un método de inmortalidad, pero ¿quién presta atención?", continuó Skiper mientras Coulson seguía tomando nota.

"Entonces, tú eres el cerebro del equipo", dijo Coulson mirando a un atado Kowalski.

"Con un capitalista, un demente explosivo, alguien muy tranquilo y mentalmente estable, y a una mente más allá de lo humanamente posible... Sí, puede ser llamado un equipo", dijo Kowalski mientras continuaba con su plan de escape, que consistía en sus dientes, el tiempo y una soga de fibra de carbono reforzado que lo ataba. Pero ellos querían que pensara en eso y no en que era la clave para escapar.

"Okey, siguiente", dijo Phil mirándolo extrañamente.

"Necesito información de quiénes son y de qué organización son", dijo Phil, harto de tratar con estos psicópatas.

"Caboom si cabom", dijo Rico mientras sacaba de Dios sabe dónde una dinamita que alertó a todos.

Actualmente, un Phil Coulson con el pelo quemado y lleno de hollín se sentó en una silla de metal mirando al anciano con calma, lo que lo alertó aún más.

"Señor Ban, usted parece un hombre racional, así que...". Antes de que Phil terminara de hablar, la puerta se abrió y entró un soldado junto a otro hombre, algunos con gafas negras y otros con pelo rubio y un poco de peso.

"Lo siento, señor, no podemos detenerlos", dijo el soldado.

"Señor Coulson, usted tiene a mis clientes retenidos ilegalmente, por lo cual, si no quiere tener una demanda millonaria y un escándalo en la alta mesa directiva del gobierno, le recomiendo que los libere inmediatamente antes de que tomemos medidas legales", dijo el hombre ciego.

"¿Y con qué autoridad...?" fue interrumpido Phil antes de continuar, mirando una carta de la Organización de Derechos Humanos donde se estipulaba, junto al Consejo de Seguridad Mundial, cómo se reducirían los ya pequeños recursos de S.H.I.E.L.D.

A regañadientes, Phil dijo: "Libérenlos". ¿Qué dijo?, se preguntó un soldado.

"Dije que los liberen", gruñó Phil.



Fuera de las instalaciones de S.H.I.E.L.D.

"Gracias, soldado, te debemos una alet", dijo Skiper, siendo interrumpido por Kowalski, que evitó que metiera la pata y revelara que no eran personas normales.

"Como dijo mi compañero, te lo agradezco, señor Matt nos ha salvado. Estamos agradecidos", dijo Kowalski.

Matt solo sonrió mientras miraba al anciano y escuchaba cómo su corazón sonaba casi como una máquina, con toques metálicos.

No pudo concentrarse más, ya que Foggy dijo: "No hay de qué, nuestro deber como abogados es defender a las personas que sufren alguna injusticia, incluso si es del gobierno... Recuerden que Nelson y Murdock siempre estarán ahí para ustedes", dijo Foggy.

"Gracias de todas maneras", dijo Ban mientras se despedía de Matt y Foggy.

Mientras se dirigían tranquilamente a la casa de Ban, al tocar la puerta, son alejados por una fuerte explosión.

Tos, tos.

Tosiendo continuamente mientras se levantaba del desastre que ahora era su hogar.

"Órale, ¿qué pasó aquí? Por qué todo está de cabeza, yo solo pasaba y... aaaa... Cabo, estás sangrando, resiste soldado". Cabo no pudo terminar, Skiper ya se desmayó en el sitio con un malherido cabo.

"Rápido, necesitamos un teléfono, tenemos dos soldados caídos. Rápido, tenemos dos soldados caídos", dijo este mientras Rico sacaba un teléfono y Kowalski llamaba a una ambulancia.

Tos, tos. "Ai, mamasita linda, ¿qué pasó?", dijo Cabo, que se levantó algo mareado.

"Tranquilo, soldado, sufrió un trauma encefalocraneal. Ya llamamos a una ambulancia", dijo Kowalski.

"¿Un para qué de qué cosa...?", dijo Cabo al ver su cuerpo cubierto de sangre.

"No, la sopa se regó. Mitsuru, esta vez la regamos... espera, Mitsuru", dijo Cabo buscándola, ignorando a Skiper desmayado.

"Aquí estoy... toa, tos... te dije que olía a gas y ahora ves que sí. Yo te dije", dijo una muy enojada Mitsuri, que estaba llena de hollín pero ilesa.

" Así que ustedes explotaron la casa, ¿no?, dijo un ban que salía de los escombros, un poco sucio, mientras los miraba con una sonrisa, pero eso les mandó un escalofrío en las espaldas.

"Niños, ¿cuántas veces les dije que no debían jugar con fuego?", dijo Ban.

"En realidad, nunca lo dijiste", respondió Mitsuri, pero de inmediato se tsoo el hocico porque Ban los estaba mirando sonrriente a ellos
"o... Pero ahora ya lo hice, así que como es la primera vez que lo hago, les doy 10 segundos para correr", dijo Ban.

"No pueden ser 30", dijo Cabo.

"Ocho", respondió Ban.

"En serio, por favor, lo sentimos, no sabiamos que..."

" nos equivocamos", dijo Mitsuri desesperada.

"Cinco"

"Ahora, Mitsuri, ¿qué hacemos?", preguntó Cabo mirando a su nueva amiga.

"Yo les recomendaría... correr", dijo ban mientras terminaba con cero y los perseguía por toda la cuadra, mientras corrían despavoridos intentando huir de un enojado Ban.

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