¿Una aliada?(Corregido)

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***
Touya estaba bajándose los pantalones cuando, de repente, se escucharon unos golpes en la puerta.

"Joder. ¿Quién se atreve a interrumpir me?"

Entonces detectó la presencia tras la puerta y supo bien de quién se trataba.

—¡¿Qué quieres, Fuyumi?! ¡Estoy ocupado!

>Perdona, Touya. Pero nuestros padres te están buscando.

—¡Me importa una mierda! ¡Tengo algo que hacer!

>Es urgente, hermano. Tienes que ir o nuestro padre vendrá personalmente a buscarte.

Él no quería eso así que se subió los pantalones y, antes de irse, le dijo en voz baja a Katsuki:

—No te atrevas a moverte de aquí o, de lo contrario, cuando te encuentre; te voy a matar. ¿Lo has entendido?

—Sí.—Dijo fingiendo calma a pesar de estar aterrado.

El vampiro salió de la habitación y, tras unos instantes de silencio, la puerta se abrió una vez más.

"¡Demasiado pronto!"

Creía que Touya iba a aparecer frente a él una vez más, sin embargo, no fue así.

—¿Quién eres?—Le preguntó a aquella extraña mujer que estaba frente a él.

—Soy Fuyumi Todoroki y estoy aquí para ayudarte.

Bakugou no se lo creía. ¿Cómo que lo iba a ayudar? ¿No era ella una más de esa familia de vampiros?

—¿Ayudarme? ¿Por qué ibas a hacer tal cosa?

—Porque sé que mi hermano iba a hacerte algo horrible y no quiero ver sufrir a un inocente.—Ahora, cuéntame, ¿por qué razón te ha traído aquí Touya?

Entonces el rubio cenizo le contó todo lo que había pasado y el por qué de su presencia allí.

—¡Eso es horrible!—Tengo que sacarte de aquí.

—¿Cómo lo vas a hacer?

—Tengo una idea.—Aseguró.

El rubio cenizo tenía mucha curiosidad, así que le prestó toda su atención a aquella vampiresa que parecía tener buenas intenciones.

***

Mientras tanto, Izuku se encontraba ideando un plan para poder rescatar a Katsuki.

Obviamente no podía aparecerse en el castillo sin más, ni siquiera como murciélago debido a que estaba protegido con un hechizo especial contra su familia.

"Creo que ya lo tengo. Cambiaré mi apariencia pero, ¿en quién debería transformarme?"

El pecoso recordó a los aliados de los Todoroki y, tras meditarlo, decidió transformarse en Momo Yaoyorozu.

—Es el plan perfecto. Nadie se extrañará de verla por allí, ya que es una amiga cercana de la familia.

Midoriya se dirigió a toda prisa hacia la biblioteca. Allí se dispuso a buscar en las estanterías, le costó encontrarlo pero al final lo logró.

"A ver los pasos a seguir..."

Revisó las pautas a seguir y preparó todo para que el hechizo saliera a la perfección. Cuando todo estuvo listo, pronunció las palabras clave y acabó convertido en Yaoyorozu.

Finalmente estaba preparado.

"Espérame, Kacchan."

***

—¡Pues date prisa y dila!—Le exigió Bakugou.

—Shh. No alces tanto la voz o no podré ayudarte.

—Tks, como sea.

Fuyumi no estaba muy complacida con la actitud del humano, lo que daba como resultado que quisiera perderlo de vista cuanto antes.

—Voy a hacer un hechizo de teletransportación, aunque no tengo la certeza de que vaya a surtir efecto en un humano.—Pero bueno, mejor será que lo intentemos.—Ahora, sígueme. No podemos realizarlo aquí.

Katsuki se levantó de la cama y siguió a Fuyumi, quien lo condujo a través de uno de los  pasillos secretos, concretamente uno  situado tras una estantería de la habitación del Todoroki más joven. Después caminaron hasta una puerta blindada que la albina de mechas rojas abrió gracias a un reconocimiento ocular.

—¿Qué lugar es este?—Preguntó Bakugou al ver un lugar totalmente lúgubre.

—Es mi laboratorio secreto, aquí practico alquimia.—Dijo para luego comenzar a buscar uno de los libros para realizar el hechizo correctamente.

A Bakugou sólo le quedaba esperar.

***

Notas finales: ¡Hasta aquí por hoy!

¡Espero que os haya gustado!

Contrato con un vampiro. (Dekukatsu)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora