Rescate exitoso.

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***
Fuyumi estaba enfocada en que su magia fuera un éxito, así que no le estaba prestando atención a Bakugou.

"Voy a curiosear mientras esta loca sigue con lo suyo."

Entonces, Katsuki se dedicó a mirar por el laboratorio de la vampiresa. Por allí se encontró con distintas mezclas químicas y varios tipos de embriones que claramente no eran humanos ni animales, sino de criaturas que no llegaba a identificar; cosa que le producía terror.

"Joder, quiero irme ya de este jodido lugar."—Pensó horrorizado.

—¡Ya está!—Exclamó la chica de cabello blanco y mechas rojas.

El rubio cenizo se acercó rápidamente a ella y vio que acababa de aparecer un agujero negro que, se suponía, lo llevaría de vuelta al castillo de los Midoriya.

—¿Estás segura de que eso me llevará al castillo de Izuku?

—Sí, puedo mostrarte la parte exacta en la que aparecerás.

Fuyumi, moviendo sus manos a lo largo del agujero, le mostró la biblioteca perteneciente a la familia de su novio.

"Parece fiable."

La mayor lo miró y le preguntó:

—¿Convencido?

—Sí.

—En ese caso, pasa antes de que alguien venga.

Katsuki asintió y, cuando iba a pasar a través del portal; alguien más apareció en escena.

—¡Kacchan!

—¡Izuku!

Los novios se abrazaron, sintiéndose aliviados y felices por haberse encontrado, sin embargo; Fuyumi tuvo que interrumpir su emotivo encuentro.

—Odio romper este bonito momento pero os tenéis que ir ya. Al no ser que queráis enfrentaros a la ira de mi hermano Touya.—Y no creo que eso sea conveniente.

El pecoso frunció el ceño y dijo:

—Descuida, no queremos permanecer por más tiempo aquí.—Vámonos, Kacchan.—Dijo tomándolo de la mano.

Bakugou asintió y los dos pasaron a través del portal, apareciendo así en la biblioteca de los Midoriya.

—Al parecer ella no mentía.—Comentó Katsuki al llegar.—Por cierto, ¿Cómo hiciste para colarte en el castillo de los Todoroki?

—Tuve que tomar otra apariencia, concretamente, la de Yaoyorozu. Que es una amiga cercana de a esa familia.

—¿Y nadie notó algo raro? ¿No se extrañaron de verte allí tan tarde?

—No, nadie se alarmó.—A lo mejor no es raro para ellos que Yaoyorozu aparezca por allí, sea la hora que sea.

—Vamos, que se folla a alguien del castillo, ¿a que sí?

—Eso creo.

—¿A cuál de los hermanos? ¿Al quemado, al guapo o a la hermana?

—No lo sé pero, ¿cómo que al guapo? ¿Quién es el guapo, Kacchan?—¿Te interesa alguno de ellos?

Katsuki sabía que estaba celoso y eso le divertía en demasía.

—¿Cómo que cuál?—Pues el vampiro de cabello mitad blanco y mitad pelirrojo.

El príncipe no pudo más y acorraló al humano contra la pared.

—Kacchan, no bromees con eso.—Tú eres mío.

Bakugou sonrió de manera soberbia y dijo:

—Tranquilo, Izuku.—Sabes que solamente tengo ojos para ti, maldito tonto. A mí me gustas tú y mucho.

El pecoso sabía que era cierto, así que se relajó.

—Te creo pero no vuelvas a decir algo así, sabes que no me gusta que halagues a otros.

—Prometido.

Se dieron un beso para sellar la paz entre ellos.

—Izuku, ¿cómo está Inko? ¿Le pasó algo a ella?

—Mi madre fue hipnotizada pero se desmayó y la llevé a su habitación, ¿quieres que vayamos a ver cómo está?

—Sí.

Dicho esto, salieron de la biblioteca y se dirigieron a los aposentos de la reina.

***

Mientras tanto, en el castillo de los Todoroki, Fuyumi tenía que lidiar con la ira de su hermano mayor.

—¡¿Por qué has permitido que ese humano escape?! ¡¿Cúal es tu jodido problema?!—Le gritó a la vez que tiraba por los suelos los utensilios de laboratorio de su hermana.

—¡Touya! ¡Para, por favor!—Le suplicaba una y otra vez intentando detenerlo.

El vampiro de ojos turquesa la miró con odio y la tiró al suelo de un sólo golpe.

—¡Eres una zorra traidora!—¡¿Desde cuándo le chupas la polla a ese estúpido príncipe?! ¡Dilo!

—¡Y-yo! ¡Sentí pena por ese humano!

—Así que quieres chuparle la polla a ese humano... Y por eso has traicionado a tu familia, ¿es eso?

—¡No! ¡Nada de eso!—¡Sólo pensé que no quería que alguien inocente resultase herido!

La furia volvió a arremeter contra objetos del laboratorio y dijo:

—Sabes que con lo que has hecho, has elegido bando; ¿verdad?

Ella agachó la cabeza y contestó:

—Yo he hecho lo que me conciencia me dictó.

—Muy bien.—Espero que disfrutes de tu castigo.

—¿Castigo...?—Dijo temblorosa.

Touya llamó a dos criados de confianza y éstos llevaron a su hermana a otro lugar en el que la someterían a torturas.

***

Notas finales: ¡Hasta aquí por hoy!

¡Espero que os haya gustado!













Contrato con un vampiro. (Dekukatsu)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora