Esta es tu historia con Edward Anthony Masen Cullen, esta basada en la saga de Crepúsculo. La mayoria de la historia es de mi imaginacion, pero tiene pocas partes de las peliculas.
Edward y yo habíamos tenido una magnifica cita, primer tuvimos un picnic en un lugar maravilloso y me emociono mucho que estuviera rodeado de agua. Me llevo a ese precioso lugar con los ojos vendados y me guio poniéndose detrás de mi.
Cuando termine con la comida del picnic, Edward me llevo a un hermoso prado y él para hacerlo mas emocionante me volvió a vendar los ojos. Al llegar, me quito la venda y nos sentamos en la hierba uno frente al otro.
Nos quedamos mirándonos a los ojos en silencio e inconscientemente empezamos a cortar la distancia entre nosotros. Nuestras respiraciones se mezclaron y cerré los ojos esperando el impacto de nuestros labios.
Espere unos segundos, pero no paso nada y abrí los ojos confundida. Al abrirlos, vi que Edward se había levantado y estaba unos pasos lejos de mi.
Tn: ¿Pasa algo? - pregunte confundida
Edward: No. - dijo mirando hacia abajo - Sera mejor que te lleve a casa para que puedas alistarte para ver a mis hermanas y que no me regañen por llevarte tarde a casa. - dijo un poco incomodo
Tn: Claro. - dije levantándome de la hierba - Tu primero. - dije señalando el camino con la mano
Edward asintió sin mirarme y empezó a caminar a lo que espero que sea la salida. Yo lo seguía de cerca y pude notar que dentro de él se desataba una lucha interna.
Siempre he podido leer las energías de la gente y puedo sentir lo que sienten. Por suerte, se controlarlo y puedo desactivar mi don cuando yo quiera.
Suspire frustrada por la cantidad de emociones que emitía Edward y decidí apagar mi don. Solo podía ver su espalda mientras caminábamos y decidí pensar en todo lo sucedido.
Mis Salvatore tenían razón al decir que la cita no iba a acabar bien o que pasaría algo raro. Los quiero mucho y odio que tengan razón, pero se que me apoyaran en todo de todas maneras.
Cuando volví en mi, me di cuenta de que estábamos solo a unos cuantos pasos de llegar al aparcamiento y que se veía el coche de Edward a lo lejos.
Los dos seguimos avanzando en silencio y no deje que esta vez me abriera la puerta. Note su mirada en mi, pero fingí que no me había dado cuenta y le ignore.
Entre al coche soltando un ligero suspiro y no le dirigí la mirada en ningún momento. Segundos después, Edward también entro en el auto y encendió el motor. Empezó a sonar la radio y Edward me miro.
Edward: ¿La apago? - dijo refiriéndose a la radio
Yo negué con la cabeza y apoye la mano para subir un poco el volumen. La música y el ruido del motor es lo único es lo que podía oírse en el coche.
El ambiente tenso empezó a desaparecer y los dos empezamos a tararear la melodía de una de las canciones. La canción que sonaba era la primera que cante con mi madre y me puse un poco triste.
Edward: ¿Estas bien? - pregunto mirándome de reojo
Tn: Si. - dije mirando mis manos - Es solo que esta es la primera canción que cante con mi madre. - dije con los ojos cristalizados
Edward: Todo estará bien. - dijo poniendo su mano sobre la mía - Con el tiempo dejara de doler.
Yo sonreí, me limpie la lagrima que se escapo con la mano que tenia libre y apreté su mano en señal de agradecimiento. Él también sonrió y siguió conduciendo sin separar nuestras manos.
Sin darme cuenta, estábamos a punto de llegar a mi casa y me entro un mensaje de Stefan. Solté la mano de Edward y le conteste que lo llamaría luego.
Edward: Ya hemos llegado. - dijo llamando mi atención
Yo asenti y deje que me abriera la puerta para salir del coche. Mire a mi hogar vacio y vi una pequeña luz en mi cuarto. Negué ligeramente con la cabeza y supe que los únicos que entrarían a mi casa sin avisar serian los Salvatore.
Tn: ¿Me vienes a recoger luego? - pregunte mirándolo
Edward: Si, - dijo dándome una corta mirada - ¿en cuanto tiempo regreso? - pregunto apoyándose en su coche
Tn: En unos cuarenta minutos, - dije haciendo una mueca pensativa - ¿esta bien para ti? - pregunte mirándolo
Edward: Me parece bien. - dijo asintiendo - Así me dará tiempo a recoger los restos del picnic, con la emoción se me olvido hacerlo.
Yo asenti y me acerque a la puerta de mi casa.
Tn: Nos vemos luego. - dije despidiéndome con la mano
Él repitió mi gesto y se metió en el coche. Luego, encendió el motor y espere a que desapareciera de mi vista. Yo solté un fuerte suspiro y entre en mi casa.
Al entrar, vi a Damon en el sofá con un vaso de Whiskey y él sonrió al verme entrar por la puerta. Yo negué con la cabeza mirándolo y me acerque a él para abrazarlo.
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Tn: Teníais razón. - dije en su oído
Damon: Yo siempre tengo razón. - dijo burlón - Pero, ¿sobre que esta vez? - pregunto alejándome un poco de él para mirarme
Tn: Sobre Edward. - dije bajando la mirada
Damon: ¿Quieres hablar de ello? - pregunto mirándome
Tn: No hay nada de que hablar. - dije negando ligeramente con la cabeza - Casi nos besamos y antes de hacerlo, Edward se aparto. - dije encogiéndome de hombros
Damon: No necesitas a otros chicos. - dijo mirándome con el ceño un poco fruncido - Con nosotros te basta.
Tn: Y me sobra. - dije divertida - No sabia que estaba hablando con Stefan. - dije mirándole alzando una ceja - ¿Dónde esta Damon Salvatore y que has hecho con él?
Él frunció el ceño y los dos empezamos a reírnos a carcajadas. Me reía con tanta fuerza que se me empezaron a saltar las lagrimas y Damon me acaricio las mejillas para limpiármelas.
