El obediente capitán

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Un nuevo día empezó y junto a ello varias dudas de qué haría Joshua en estas nuevas tierras desconocidas.


Tuvo una perfecta mañana junto a Jeonghan con quien debido a que tenia trabajo que hacer es que solo alcanzaron a desayunar y en ese momento aprovecharon de hablar, definiendo varias cosas, entre ellas que se quedaría en una habitación del palacio de momento, que debido a ser un invitado especial al ser el de la profecía es que tenia libertad en todo mientras respetara las leyes básicas del reino y finalmente estaba el tema de lo que quería hacer en su estadía.


Discutieron un buen rato porque Jeonghan decía que no necesitaba trabajar ya que lo podía mantener sin problemas, pero Joshua se negaba, ya que dependería demasiado de él y no era bueno si quería mantenerse viviendo en ese reino el resto de su vida, ya que dudaba que el emperador se sintiera siempre atraído por él o bien curioso. 


Ya se lo imaginaba, en algún momento este perdería el interés o bien ya no contaría con su rostro joven dejando de ser tan atractivo, lo cual entendería, pero ojala nunca pasara, ya que realmente le agradaba Jeonghan.


Como inicio de eso es que necesitaba explorar el reino para conocer bien que le rodeaba y en que podía trabajar, aunque de momento se lo tomaría a la ligera ya que parecían haber muchas cosas nuevas al ser una cultura o hasta mundo nuevo.


Jeonghan no quería que fuera solo, pero también seria muy llamativo andar con todo un grupo de soldados, así que asigno a su primo para que le cuidara, quien era el capitán del escuadrón encargado de la ciudad central, así que también era buen guía. También iba a ir con una túnica para cubrir su cabello, ya que este le delataría como el forastero de la profecía y no le dejarían explorar con tranquilidad.


Debido a que el emperador ya debía ocuparse de sus obligaciones es que los sirvientes lo guiaron hasta este soldado que le cuidaría, Joshua de repente acabando frente a un hombre alto y musculoso de piel con un tono más cálido, quien de lejos se había visto muy serio, pero al acercarse es que su rostro se ilumino dando la apariencia de un enorme cachorro energético.


- ¡Buenos días! Me presento, soy Kim Mingyu, es un gusto conocerte – Hizo una educada reverencia – Me informaron que eres un invitado importante de mi primo y deseas conocer nuestra hermosa ciudad principal estando de incognito, así que confía en mi, te enseñare los mejores lugares y como es la vida en las calles. Puedes llamarme solo Mingyu – Hablo algo rápido, por lo que a Joshua solo se limito a asentir mientras procesaba toda la información.


El hombre alto le miro expectantes varios segundos haciéndole reaccionar – También es un gusto. Me puedes llamar Jisoo – Se presento, recordando que para andar de incognito es que Jeonghan le recomendó usar un nombre más nativo del imperio, en donde acordaron usar ese.


Mingyu abrió sus ojos con sorpresa, dejando confundido a Joshua – Oh, lo siento, es que me sorprendió escuchar tu voz, es muy agradable – Comento algo apenado, pero siendo sincero – E-En fin, debemos partir para que veas a tiempo todo en la ciudad. Espero sea de tu gusto – Corto el tema de conversación y le guio a unos caballos.


El de rubios cabellos solo lo siguió, mirándole de reojo con curiosidad, ya que lo único similar en esos primos era el cabello negro algo largo y que eran malditamente calientes, pero tenían un atractivo y vibra diferentes.

Naufragio al paraíso (JIHAN/MINSHUA) / ThreeshotWhere stories live. Discover now