La Adopción Correcta

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Sebastián. 

Hoy es la final de partido. Hoy digo adiós a este deporte.  Invite a Darling al partido, me dijo que haría lo posible por asistir. Y espero que venga.

Mamá ha estado pendiente de que no me falte nada y se lo gradezco mucho. No ha dejado de darme besos por haber obtenido un diez en el examen de matemáticas según yo tendría mala nota, pero no fue así. Cuando le di mi examen a mi mamá se emociono tanto.

Me gusta verla feliz.

No lo sé pero se ve bien. Siempre tiene una sonrisa en su rostro y me gusta que sea así.

Es domingo y bueno estoy un poco nervioso. Vamos en camino y llevo la radio que ella me compro. Aunque no es necesario ya que el coche tiene una, pero no me agrada la idea de dejarla en ningún momento. Ya es parte de mi.

—¿Emocionado?

— Nervioso. —me sonríe.

— Todo ira bien cariño. Y si no es asi tu madre se peleará con el árbitro —bromea— ¿Vendrá Darling?

— Eso espero.

—¿Algo que decir? —me pregunta y se dónde quiere ir.

— Creo que....—trago saliva— ¿Es nueva esa canción verdad?

— Sebastián....—no soy bueno expresando mis sentimientos y quiero creer que esto, extraño que siento se trata de mi instinto protector nada más.

— Es buena amiga —mamá me mira y niega divertida— ¿Ya lo sabes verdad? —me cubro el rostro y mamá se rei— No seas cruel.

— Es normal Sebastián. —dice.

— me da miedo.

— Pues no lo tengas. Se ve que ella también le gustas.

— Pues será que soy ciego —se ríe mas. Parece que me he vuelto la burla de mi mamá— No es gracioso. No sé que tiene pero hay algo en ella que me atrae. Es como si me hubiera colocado un imán en mi.

—¿Un imán? —se esfuerza para no reírse de nuevo.

— Es tonto ¿Cierto?

— Mejor ya no hablemos de eso —estaciona el coche— Ya hemos llegado.

Si será mejor que los chicos no sé enteren de nada.

Sino me harán bromas de esto todo el día y el resto de mi vida. Solo tengo trece años no estoy listo no preparado para ....

Ya llegó.

¡Y la muy tonta esta bonita!

Se ha puesto un pantalón overol con una camiseta blanca y zapatos deportivos. Trae el cabello trenzado con un flequillo recién hecho.

—Sebastian cierra la boca o el equipo rival se confundirá en dónde va a meter el balón —miro por otro lado

—¡Se ha sonrojado! —grita Andrés— ¿Por qué se ha puesto ro.....?

—¡Hey! Hola —llega. Tengo un balón en mis manos y la rebotó como tonto. Andrés también se la ha quedado mirando— ¿Llegó tarde? —pregunta al ver que nadie habla— ¿Que pasa?

—Estas....

— ¡Llegas temprano! —interrumpe Erick a Andrés.

— Ah. Bueno me pareció bien llegar antes que comiencen a jugar. —creo que ya he roto el récord de rebotar balones.

103..105...107...200...206...298..... 

¿Desde cuándo hace tanta calor?

Mira a otra parte campeón. Mira a otra parte.