I am not the only one- Hyunlix

Are you flirting with me?

A veces no sabía si sentía odio por su vida o por la suerte que tenía, era algo sumamente difícil de descifrar y ya se estaba cansando de que el destino jugara con su humor, porque la paciencia se le estaba agotando.

Hace tan solo un segundo estaba hablando de lo más normal con Hyunjin (si es que su conversación se consideraba "normal") y ahora estaba al frente de uno de los mejores amigos de Minho, el ex capitán de basquetbol de la universidad y heredero de una de las más importantes aerolíneas de Canadá.

Estaba a punto de estrellar su cara contra la madera y no parar hasta desangrarse, para así poder evitar hablar con él, ¿qué pasaría si le decía a Minho que vio a su esposo y al esposo de su amante juntos?

Ni siquiera podría imaginarlo sin tener un pre infarto

Rogaba a todos los dioses porque la tierra se lo tragara o que se le estrellara un meteorito en la cabeza para que lo dejara inconsciente y no tenga que contestarle al rubio.

-"Hola, Changbin"-saludó con una sonrisa fingida-"¿Cómo estás?, ¿Qué haces aquí?"

Por favor, no preguntes por Hyunjin

Por favor, no preguntes por Hyunjin

Por favor, no preguntes por Hyunjin

-"Muy bien Lix, ¿Quién es él?, ¿has venido con Minho? no he hablado con él desde hace unas semanas"- contestó amablemente mientras se acomodaba bien el gorro de Starbucks sobre su cabellera despeinada y guardaba su lapicero en su mandil verde oscuro.

Maldita sea

Felix no sabía qué responder y Hyunjin lo miró con curiosidad, ¿desde cuando el rubio se quedaba sin habla? Si hace un rato estaba tan parlanchín que hablaba hasta por los codos.

¿Qué había cambiado ahora?

-"¿Estás seguro? Minho dijo que salieron a un bar a recordar viejos tiempos hace menos de una semana"-alzó una ceja.

Pero al ver el rostro confundido del ojiverde y la perplejidad en el cuerpo del rubio, ató los cabos sueltos en su cabeza y unas inmensas ganas de haberse mordido la lengua se apoderaron de él.

No quería ser el hazme reír de ellos ni mucho menos, Seo le caía bien, era uno de los más cuerdos de su grupo de amigos, y sabía que Minho lo consideraba como un hermano, por lo que le impactaba el hecho de que Lee no le contara sobre Jisung y su aventura desde que llegó a Londres.

O ¿tal vez si lo había hecho y solo quería avergonzarlo? solo esperaba que su duda no fuera certera, no quería vivir siendo el cornudo del año.

Por supuesto que no había salido con ellos, sino con Han, ¿tan inocente había sido al caer en esa trampa?

Soltó una risa sin gracia y negó con la cabeza, atrayendo la vista de ambos jóvenes.

Hwang lo miraba neutral, y con cierta tristeza, él también había entendido el porqué de su actuar, pero decidió permanecer callado y solo esperar a que el ojiazul tomara aire, se calmara y le respondiera algo inteligente que lo dejara callado.

Como era común en Lee Felix

Pensándolo bien, Jisung había regresado ebrio hace menos de una semana a su casa. Este le había dicho que todos los chicos habían decidido ir a tomar unas copas para aliviar su mente por unos minutos.

Calumnias

Todo lo que salía de la boca del castaño eran calumnias, tras calumnias, mentiras que deterioraban poco a poco su matrimonio y las ganas de seguir luchando por él.