Gu Yin fue condenada a vivir durante tres vidas como una simple mortal, al ser enmarcada falsamente. Sus recuerdos fueron suprimidos, y se vio despojada de su poder e identidad como princesa de la tribu de los espíritus zorro. Todo gracias al capri...
Cuando Gu Yin despertó, estaba acostada sobre el fondo de una carreta, rodeada de algunos metros de telas, cajas de madera y algunas ánforas con olor a vino, mientras esta se encontraba en movimiento.
Ahora mismo continuaba estando un poco mareada y podía sentir la boca demasiado seca.
Antes de despertar había estado soñando con extrañas imágenes, donde ella era adulta y tenía muchos hermanos, un padre y una madre amorosa, parecían momentos muy felices; pero de la nada todo había cambiado y ella estaba encadenada mientras su padre la miraba fríamente.
Cuando despertó, apenas podía recordar algo de aquellos sueños, pero se sentía muy diferente. Como si este no fuera su verdadero cuerpo, como si una realidad la hubiera golpeado duramente, pero también se sentía más fuerte. Quería luchar y quería ser quien decidiera todo en su vida.
Gu Yin se había dado cuenta de que pagar la bondad de Ah Si no podía ser su única misión en la vida, pero aún no sabía qué hacer realmente, además de pagar aquella bondad.
"¡Ama, ama! ¡Al fin despertaste!" La pequeña voz de Ni Xu comenzó a sonar a su lado, ella parecía estar llorando.
Luego de que la serpiente negra le explicara todo y le entregara los objetos dejados por sus amigos, Gu Yin lloró amargamente. Ni siquiera pudo despedirse, ella habría deseado seguirlos. Pero la jefa Lu tenía razón, hasta que no lograra librarse del sello no podía ir a ningún lado.
Solo podía esperar hasta que creciera y se hiciera fuerte.
Mientras Gu Yin había estado inconsciente, habían sucedido muchas cosas en la casa señorial de Gao.
En la ciudad imperial, el talento del nieto de la familia Gao, Ah Si, se había hecho famoso, luego de los resultados de su examen de talento. Y la casa Gao había obtenido innumerables visitas de algunas familias prominentes de eruditos, ministros y generales de la capital, que buscaban congraciarse con la familia, y otros más que buscaban un compromiso temprano para sus hijas con aquel joven talento.
La noticia incluso había llegado a oídos del emperador, quien envió sus felicitaciones a la familia Gao y algunos premios por haber dado un nuevo talento a su país de Zhanshi. Gracias a esto, el emperador también había recordado su primo, el rey de la provincia donde vivía el ministro, y a sus sobrinos. Y envió una carta con el ministro Gao para que la entregara personalmente a su primo, el rey, una vez que llegara a destino. También había enviado a uno de sus generales con órdenes secretas para fortalecer las barracas en esa provincia. Debido a que esta era una ciudad cercana a la frontera entre su país de Zhanshi y el país de Yuwang. Y aunque habían transcurrido casi 200 años desde el último conflicto entre ambas naciones, el emperador quería fortalecer el ejército en esta ciudad, por cualquier eventualidad.
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"Estás despierta, Gu Yin"
Cuando la carreta se detuvo entró Jin Chen a esta, traía agua para ella, además de una píldora nutritiva.
"Es bueno, comenzaba a creer que no despertarías. ¡Cómela! -ordenó el niño mientras empujaba la píldora redonda en su boca, y comenzó a explicar- Un guardia del señor Shu me las dio para que te diera una al día. Él me pagó para hacer esto, no pienses nada extraño"
La niña intentó hablar, pero tan solo salía un sonido desagradable de sus labios
"No intentes hablar, has estado tanto tiempo inconsciente que necesitas recuperar la voz poco a poco"
"Gu Yin, yo... todavía me caes mal, ¿sabes?. Si tan solo no fueras mujer, quizás me caerías mejor. Mi padre dijo que te cuidara, pero no quiero que te hagas ideas falsas. No somos amigos y no creo que eso cambie. Tu talento es bueno, y eso te pone en muchos peligros, por eso tanto mi padre como el amo han dicho que no debes decirle a nadie más. Espero no cometas un error al respecto y nos traigas más problemas"
"Mientras estabas inconsciente, las otras sirvientas que fueron con nosotros... bueno, al parecer su suerte fue mala. Así que el maestro anciano Gao le dio al amo cinco sirvientes de confianza para que los trajéramos con nosotros. Y también intentó varias veces que el joven segundo amo se quedara en la capital con él, e incluso que el hijo mayor lo adoptara. Pero el ministro no lo permitió"
La niña terminó de comer la píldora y beber agua en lo que el niño contaba algunas cosas, y cuando terminó de hablar simplemente soltó un "continúa durmiendo" y salió.
Durante dos días, Jin Chen continuó sin decirle a nadie que Gu Yin había despertado, hasta que estaban próximos a llegar a la ciudad, cuando Ah Si logró evitar la vigilancia de su padre y se escabulló para ir a verla.
"¡Gu Yin!" Ah Si saltó a sus brazos para abrazarla, tan fuerte que la niña sentía que se asfixiaba. En estos pocos días Ah Si había ganado un par de centímetros de altura, haciéndose más alto que la niña, pero aun así lloraba a mares mientras la abrazaba intentando meter la cabeza bajo su cuello.
"¿Por qué despiertas hasta ahora? Estaba tan preocupado" sollozaba el niño sin detenerse.
La voz roca de Gu Yin soñó
"Joven maestro, siento haberlo preocupado"
Al oír la manera como era llamado, el niño la soltó mientras le daba una mirada llena de reproches.
Luego de eso Ah Si se encargó de decirle a todo el campamento que su amiga había despertado.
