ʟᴇᴛ ᴍᴇ ᴛᴇʟʟ ʏᴏᴜ ᴀ sᴛᴏʀʏ (𝕐𝕒𝕟𝕕𝕖𝕣𝕖!𝐕𝐚𝐫𝐢𝐨𝐮𝐬)

𝗬𝗮𝗻𝗱𝗲𝗿𝗲! Vaas Montenegro x Lectora

𝑷𝒆𝒓𝒔𝒐𝒏𝒂𝒋𝒆 𝒀𝒂𝒏𝒅𝒆𝒓𝒆:Vaas Montenegro

𝑨𝒏𝒊𝒎𝒆/𝒎𝒂𝒏𝒈𝒂 𝒐 𝒗𝒊𝒅𝒆𝒐𝒋𝒖𝒆𝒈𝒐: Far Cry 3

𝑪𝒂𝒔𝒐: Secuestro, uso de armas.

𝑷𝒂𝒓𝒕𝒆: 1 de 1

𝑨𝒗𝒊𝒔𝒐:Jugué como 4 veces Far cry 3, así que perdonen si me esmero con los detalles.

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La sangre manchaba mis manos mientras seguía conduciendo; la música sonaba alto, lo cual me daba una clase de relajación. Al momento que intentaba encontrar palabras para la ira que sentía, se me hacía más y más imposible contener mi propia ira.

---Este hijo de puta.. ---Susurraba, mientras mi mirada se desviaba a mi cinturón de armas.

Su voz juguetona todavía resuena en mi cabeza una y otra vez. El simple hecho de recordar lo amoroso que buscaba sonar con cada palabra que salía de su estúpida boca, todo me daba una sensación de querer darle un buen escopetazo en los dientes.

"¡(Nombre), cariño! ¿No quieres venir a visitarme~? ¡Adoraría ver como intentas salvar a este inútil!"

El solo hecho de recordar sus palabras me genera una rabia incontenible. La sangre del ciervo que maté a puñaladas sólo me generaban más y más sed de sangre.

Todavía te recuerdo, Jason, el como me ayudaste a escapar, pero te sacrificaste para que yo fuera la que saliera de allí. Ahora el mero hecho de pensar que estas bajo las manos de ese psicópata me genera repugnancia.

A lo lejos, veo una bandera roja, flameando al son del viento, como si fuera una señal del destino que fuera a realizar otra masacre. Una sonrisa ladina se asoma en mi rostro, a la vez que detenía el auto.

Bajo del auto, tomando mi cinturon y enganchando todo para que pueda empezar mi rutina que, a este punto, ya se volvió costumbre.

Me adentro entre las plantas, mientras tomo un arco entre mis manos. Me inco en mis pies, obligando a mi cuerpo a camuflarse entre los arboles y arbustos.

Uso la cámara para ver a todos los integrantes de todos los subgrupos de Vaas, lo que logra hacer que una sonrisa se incline en mi rostro; había muchos de ellos, casi esperando a ser asesinados.

Veo un hueco en las paredes de chapa, por lo que aprovechó para escabullirme por ahí. Luego de entrar, noto que había un par de tigres encerrados en una sola jaula, siendo acosados constantemente por dos hombres de camisas rojas y rostros cubiertos. Mientras levantaba mi pistola con silenciador, desde un lugar seguro y oculto como lo es adentro de uno de los muchos edificios donde, casi convenientemente, no había gente, y dispare a la cerradura de la jaula.

Normalmente nunca me dejo llevar por la emoción de los disparos o de la gloria que siento cuando veo a todos muertos en el suelo, pero....

Creo que hoy será una de las pocas veces que haga una excepción.

Me levanto del suelo antes de ver mi cinturon, específicamente el lanzallamas. Con una sonrisa ladina escapando de mis labios, me acerco a un grupo de tres personas que se habían acercado a asesinar a los tigres que se habían escapado.

Rápidamente me acerco, y atravieso el cuello de uno con el machete, deseando cortar su cabeza. Pero, rápidamente retrocedo con el machete entre mis manos, antes de mirar a los otros dos; todos habían notado mi presencia.

---¡Es ella! ¡Es la mujer de Vaas! ---Grita el hombre frente a mi, bajando el arma.

El mero hecho que haya bajado la guardia por el simple conveniente que Vaas me buscaba por alguna estúpida razón, me generó una ira casi inmediata.