ღ𝕄𝕀 𝔾𝕌𝕃𝔽𝕀𝔼ღ ♡𝕄𝕖𝕨𝔾𝕦𝕝𝕗♡

♥6♥

⚜

Justo acabo a tiempo.

Había pasado toda la tarde.

Enserio... toda la tarde y parte de la mañana.

Elaborando un pastel de chocolate. Para su esposo.

Siendo sinceros jamás fue un omega muy hábil para la cocina. Usualmente Mew le preparaba exquisitos platillos qué lo hacian deleitarse.

Pero ahora quería sorprenderlo.

Gulf con veinte años, no tiene muchas habilidades culinarias y aún así hizo un pastel.

¡Quería gritarlo con orgullo!.

Limpió como pudo la mesa y se fue a bañar y a arreglarse. Amaba qué Mew siempre le dijera cuan bonito se veía.

Entonces ahí estaba bañándose en su tina con muchas burbujas. Y un ligero olor a lavanda.

Cerro los ojos un momento y de pronto el timbre de la casa sonó.

¡Era Mew!.

Su alfa había llegado y lo mejor, ¡era hora del pastel!.

Salió rápido de la tina y deprisa se secó cambio y acomodó si cabello.

Bajó las escaleras pero Mew no estaba en la sala ni en la entrada de la casa.

Fue con emoción contenida a la cocina en donde vio a su alfa ver detenidamente su pastel.

Aguardo en silencio, quería que lo probara, se había esmerado tanto...

Mew probó el pastel qué estaba en la isla de la cocina. Con un tenedor pinchó un pedazo y se lo llevó a la boca...

— ........

— ......

— .....

Así de rápido como entró, salió.

Mew escupió el pastel.

Estaba quemado de abajo, por dentro no estaba cocido, y el betún de el pastel sabía salado por alguna razón.

— ¡Demonios! — gritó limpiandose la boca con una servilleta — ¡Nunew!.

Gulf estaba con la boca abierta de la sorpresa había escupido su pastel.

— ¡Nunew quien carajos hizo este pastel! Despidelo ahora mismo. No, sabes que mejor demandalo — grito a los cuatro  vientos por que Nunew no aparecía.

— Yo lo hice — susurró débilmente el omega en el marco de la puerta de la cocina — No te preocupes Mewie, ya no lo haré más — hizo una mueca al tratar de formar una sonrisa.

Pero sus ojos se aguaron rápidamente y salió corriendo de ahí.

Mew aún continuaba con la boca abierta y el tenedor en la mano.

Reaccionó y salió detrás de Gulf.

— ¡Bebé! — gritó desesperado mientras avanzaba de dos en dos la escalera.

En la habitación Gulf lloraba silenciosamente. Su corazóncito se rompió por que su alfa no quería su pastelito.

— Gulfie perdóname, por favor cariño no sabía que ese manjar era tuyo. Y-yo hago ese tipo de expresiones cuando amo alguna comida.

El omega lo ignoró, ni siquiera se volteó a verlo. Estaba triste.

— Cariño porfavor mírame — rogó mientras trataba de levantar las sábanas.

— D-deberías estar con u-un omega qué s-si sepa cocinar, d-debe ser horrible estar casado conmigo — logró decir una vez que lo sacó de entre las sábanas. Se sentó en la cama pero aún con la mirada bajá.

— Gulf Kanawut de Suppasit — Mew cambió su semblante a uno más serio — Jamás vuelvas a pensar eso, nunca, estar contigo es... una de las cosas más hermosas qué me pudieron pasar en la vida. Cada momento a tu lado es invaluable para mi. Yo no quisiera jamás a otra persona a mi lado. Simplemente eres tu o nadie.

Gulf lo miró a los ojos e hizo un puchero, amaba a su Mewie más que nada.

— ¿M-me puedes enseñar a hacer pastel? ...

Mew sonrió y lo tomó entre sus brazos cargandolo con posesividad.

Gulf ancló sus piernas a la espalda de Mew mientras dejaba recargada su cabeza en el hombro.

— Vamos a hacer un rico pastel mi amor —dejó un beso en su nariz mientras se encaminaban a la cocina.

Mew motivaría Gulf a hacer todo lo que se propusiera.

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