THE PROBLEMS

El día de la siguente ronda

— Bien muchachos, las peleas serán 1 a 1. Tenemos al menos 1 pelea asegurada, así que no se me estresen. —dijo Shingou, agitando sus manos, emocionado, por supuesto, con una enorme sonrisa. Aunque el ruido de la música era tan fuerte que apenas se escuchó la mitad de lo que dijo.

— ¿Qué significa eso? ¿Sobornaste a alguien Shingou? —preguntó Togata, quien no llevaba su uniforme habitual, sino, uno completamente negro. La chica estaba casi gritando para escuchar su propia voz y con trabajo Shingou la escuchó, pues Caravan Palace - Lone Digger sonaba tan fuerte como para romperte los oídos.

— Para nada, mi querida Togata. Lo digo porque tenemos a un verdadero profesional entre nuestras filas. Kurosaki, ¿quieres hacernos el favor de abrir la pelea? —dirigió Shingou.

— Por supuesto, jefe. —dijo Kurosaki, el hombre grandote agacho su cabeza ante Shingou y aceptó el reto. Caminó hacia el cuadro de peleas mientras pensaba que no le agradaba la idea de pelear, pero lo haría por Shingou.

— Bienvenidos, público encantador. ¿Estan impacientes por sangre de peleadores? no se preocupen, no se angustien. Que esta noche la casa estará llena de verdadero entretenimiento. Esta será una de nuestras peleas para la gran final de finales, en donde se llevarán la suma más grande. Será una pelea más que entretenida, para los aficionados, para los nuevos, para los que solo quieren ver huesos rotos, ¡esta es su pelea! ¡Emociónense! pues hoy veremos una batalla reñida. El equipo , un equipo conformado por profesionales, contra el equipo de la familia Tetsuo. ¿las estrellas podrán contra esos profesionales? ¿El talento podrá contra la experiencia? —gritaba el presentador de las peleas. Se columpiaba desde el techo del edificio, quedando justo encima del cuadro de peleas, donde podía ver todo como si fuera Dios. El hombre era pequeño, su piel era morena y llevaba lentes de sol, los cuales los usaba por las grandes luces que hay para alumbrar el escenario.

— Hoy sí que va a ver mucho dinero en mis bolsillos. La gente está entusiasmada. Esta pelea traerá muchas apuestas y con ellas, dinero. —dijo Shingou mientras se frotaba las manos de forma maliciosa, y de sus ojos salía un símbolo de yenes.

— ¡Estoy emocionada! —gritó Togata dando un salto, alzando los brazos.

Mientras tanto, el otro equipo se preparaba para iniciar la pelea.

— Bien, empiezas tú. ¿Nervioso? —preguntó James. Un hombre con traje de cocodrilo amarillento, casi café.
— Solo un poco. No tienes ni idea de cuanto desee que acabaran muertos en su primera pelea. Dead Baby y Bloody Mary tuvieron problemas al inicio, pero los solucionaron rápidamente, y el peligro en llamas por poco, mata a su contrincante. Lo peor es que no pude ver como pelea el grandote. Hasta ahora es el más peligroso. —dijo Jake, un joven con traje de Koala, que se veía más nervioso de lo habitual.

— No tienes de que preocuparte, es un grupo muy inexperto. La gente está empezando a ignorar al especialista de la bolsa, la niña podrá tener talento y lo que quieran, pero no le sirve de nada sino tiene la práctica. Nosotros ya somos considerados semiprofesionales. —dijo Lorence. Un hombre egocéntrico, con un traje raro de otro cocodrilo, pero el de él era verde oscuro.

— No solo se trata de Dead Baby, se trata del lacayo del jefe de jefes y el peligro en llamas, y ni hablemos de Bloody Mary. Esa niña resultó ser más fuerte que un semiprofesional y que una Chugoku entrenada. La familia Chugoku, temida y respetada por la gran fuerza bruta que poseen sus integrantes. Esa niña peleó con un Chugoku, otros 3 idiotas y aun así ganó, sin ningún solo rasguño. —dijo Jake, temblando como un chihuahua, a pesar de estar vestido como un koala.

— Que no te asusten sus hazañas, después de todo solo son unos mocosos. Adolescentes que no saben valorar la vida. Idiotas que no tienen ni el más mínimo respeto por la vida. —dijo Steve.